Hilda tiene premoniciones constante se golpea la cabeza dándose puñetazos para calmar esos impulsivos pensamientos no puede obviar que Ricardo se enamoró de otra mujer y la resta importancia a la causa de su alejamiento, quién más que ella sabe que él es un cobarde, qué no tuvo el valor para enfrentar la situación y a escondidas se ve con otra mujer, lo detecta en su radar psicológico y sabe que siempre vuelve con ella y lo comparte con su mamita que lo encubre en toda holgazaneria y injuriosas diversiones, en caso de que ella decida abandonar esta relación psicópata y manipuladora, le importa demasiado que van a pensar de ella la gente si se separa de él, tal vez hablen a sus espaldas o se burlen al verla pasar diciendo que está besada por el diablo, las mujeres felices por estar casadas pero inseguras de la fidelidad de sus esposos harán muecas y se persignaran para que no les robe el marido porque es lo que hacía su madre, ella sabe muy bien el alto precio que se paga en la sociedad por ser "la divorciada o la solterona ".
Llega la medianoche es la misma secuencia de siempre, sus ilusiones rotas en millones de pedazos, continúa en el balcón intentando no llorar y observa el cielo gris estrellado ¿Qué importancia tiene el cielo y las estrellas si su corazón está roto? ¿Qué tan tonta es que ella sueña sola y cree que sueña por los dos? se distrae mirando las luces del telo, nunca había prestado atención que frente a sus narices había un hotel para parejas enamoradas ¿Cuánta gente llega por día ese lugar? Y luego pensó "no me imagino a el entrando al hotel de la otra cuadra frente a mis narices y sonrío moviendo la cabeza y mirando hacia abajo ¡nomás me falta ser cornuda en mis propias narices! ( empina en su boca un vaso de Whisky) continúa hablando arrastrando pesadamente las palabras ¡te juro Ricardo que un día me pagarás, yo también tendré mi propio amante y lo traeré a nuestra cama...respiró profundo como desahuciada y susurró "¡verás cuanto duele estar en mi lugar, por hoy se que me conformo con migajas! se miró al centro entre las mamas, se sacudió la remera que lleva puesta y refunfuño "Que lo parió che...soy mendiga, vivo de mendigando unas migajas de amor, (terminó la última gota de la botella de whisky para relajarse y lograr conciliar el sueño).
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Editado: 23.12.2021