JETT MORRISON.
—Crei que tu pensabas de mi como otra cosa... —se le iluminó la mirada y se notó cierto arrepentimiento en su mirada.
—¿Que? ¿Sexo? Vamos Elia, no todo es eso. Creeme tal vez al principio lo pensé, porque soy un idiota, pero era porque no me había dado aún la oportunidad de conocerte.
—Todavía no me conoces bien Jett y claro es obvio que no lo harás en solo cinco días que me quedan.—hablo mirándome sería.
—Bueno valdría la pena conocerte lo que pueda a no saber absolutamente nada.—sonreí de lado mirándola.—Pero no me cambies de tema ¿que no tenías que decirme algo?.—digo observandola con detalle.
Al verla nerviosa solo consigo reirme un rato y después sonreírle hasta que se da cuenta de la razón de mi mirada y ella me fulmina con la mirada.
—Ya no diré nada.
—Es que te vez adorable, perdón ahora si. —me pongo serio y la veo con atención.
—No, ya no quiero decirte nada, te lo perdiste.
—Que injusta eres.—pongo una mueca y ella solo consigue sonreír de lado para luego abrir la boca de nuevo pero sentí mi celular vibrar. —Espérame ¿si?
Me aleje un poco de Elia que ella sólo se acariciaba los labios y yo contestaba.
—¿Hola?—pregunte al no saber de quien era el número.
—Hola Jett... ¿Podemos hablar?.
Si que reconocí esa voz, era la voz de Alicia, hacia tanto que no la escuchaba y no supe como reaccionar.
Después de como la termine, decidí borrar su número y todo contacto con ella, ya que solamente había salido con ella por venganza, se lo merecía de todo lo que le había hecho a Sara, lamentablemente no esperaba que realmente se enamorará.
Bueno... Que podemos decir, soy irresistible.
—Hola Alicia.—dije seco.
—¿Estas ocupado? Necesito hablar contigo sobre... Nosotros.
—¿Nosotros? Alicia dejame aclararte algo ¿okey? No hay nosotros, lo nuestro fue una mentira, ya tenlo claro. Esto se terminó, ya supéralo además si me disculpas, estoy ocupado.
—¿Ah si? ¿Ocupado con que?
—Con mi novia ¿Algún problema?
Por un momento Alicia se quedó callada y mire a Elia que solo trataba de darme mi espacio.
—¿Novia? Ya tan rápido me cambiaste ¿Tambien la vas enamorar y a dejar como a mi?—espetó.
—No a ella no, es que lo mío contigo fue por venganza, no porque te amara Alicia, lo de ella es diferente porque a ella si que la quiero Así que adiós y no me vuelvas a marcar.—le colgué enseguida.
Me volví hacia ella que solo me miraba un poco extraño.
—¿Todo bien? Parecias molesto.—pregunto.
—Si, todo bien, solo discutía con una chica
—¿Y eso?
—nada importante. ¿Quieres ir a caminar?
—Si claro...—nos quedamos callados un momento mientras caminabamos por primera vez se sintió incómodo hasta que ella hablo de nuevo.—¿Quien es Alicia?
Justo lo que no quería comentarle, no quería decirle lo mierda que fui con ella, se que eran asuntos de mi hermana y ella pero ya tenía una cuenta pendiente. Además se creía intocable y yo iba a ser la persona que le bajara tantito el ego.
No voy a negar nada, a veces también me siento inalcanzable, todos en algún momento nos sentimos así pero también hay que admitir que también a los ojos de otros somos sus gustos humildes.
Vi a Elia y me tense por la pregunta, no quería decirle sobre lo que hice con Alicia.
—Bueno es una chica con la que salía.—dije intentando evitar el tema.
—¿Por que te marcó?
—Quería que habláramos de un nosotros que ya no existe y que jamás... Bueno prefiero no hablar de eso.—aun incómodo me puse una mano en el cuello.
—Entiendo...
La conversación con Elia se hizo incómoda, de verdad no quería decirle uno de mis peores lados porque hasta yo se que lo que hice con Alicia no estuvo bien. Jugar con los sentimientos de la gente no está bien, es lo peor que puedes hacer pero Alicia... Mierda... No me iba a quedar con las ganas, creo que es una de las peores cosas que yo he hecho.
Mientras seguimos caminando saco mi teléfono de nuevo para ver si no me había escrito Sara, Lucy o mamá, al parecer no pero me di cuenta que sin pensarlo ya eran las 3:00 p.m ¿tanto tiempo ya pasó? El tiempo jamás se me pasó tan rápido con una persona pero ahora que lo pienso me alegra que solo sea con ella.
Mientras tanto seguí viéndola que tenía una cara angustiada y mordiendose los labios mirando la playa. Supongo que estará aún preocupada por lo de su padre, debe ser difícil y me encantaria ayudarla pero la distancia es un gran problema que tenemos ella y yo. Si fuera por mi le diría que podría vivir con nosotros o que podría cuidar a su gato, quiero ayudarla no me gusta verla así.
No se si lo que iba a hacer sería lo correcto pero es mejor intentarlo que a nada así que mientras caminabamos me detuve enfrente de ella y solo me observo confusa mientras agarraba yo sus manos delicadamente.
—¿Quieres que te haga reír?
—Jett no creo que sea el momento, no estoy ahora para divertirme, no se que hacer...—dijo evitando mi mirada.
—Todo resultara bien ¿okey? Mira se que no puedo ayudarte, pero si que puedo escucharte, cada vez que te sientas estresada, molesta, triste, feliz, emocionada, nostálgica y si necesitas quien te escuche ahí estaré.—le mostré una sonrisa tranquilizadora.
—¿Y como harás para que me divierta ahora? No es un tema tan fácil de olvidar.
—Eso dejamelo a mi.—sonreí y me acerque a ella para después poner mis brazos alrededor de ella, logrando cargarla y tenerla en mis brazos mientras ella envuelve sus brazos sobre mis hombros.
—¡Jett! ¿Que haces? —me miro con sorpresa.
—¿Confias en mi? Si dices que no, te bajo en este instante y si lo haces solo dejate llevar.—la observe y ella parecía pensativa hasta que asintió con la cabeza.— Y... ¿Eso que significa?
—Que si Jett, confío en ti. Era obvio—dijo mirándome sería.
—Bueno.. Prepárese señorita.—la sujete fuerte y corrí hacia la playa llevándola en brazos, ella se aferró a mi con fuerza y me dirigí al mar que chocó con mis pies y di vueltas logrando que Elia sacará una sonrisa.