♡ :  CAPÍTULO III

[POV HYUNJIN]

Terminé mi trabajo justo a las seis en punto, la puerta de mi oficina sonó con dos golpes seguidos.

—Adelante —grité y la puerta se abrió dejándome ver a Lía lista para irse.

—Ya estoy lista querido —dijo con una sonrisa y camino quedando frente a mí, del otro lado del escritorio.

—Bien, pues vámonos —exclamé levantándome de mi silla giratoria y tomé mi maletín negro.

Ambos salimos de la oficina y subimos al ascensor y pulse el botón del último piso que era el estacionamiento. Los números del ascensor avanzaban hasta que la puerta se abrió justo en el estacionamiento, salimos del ascensor y me despedí del encargado de cuidar los autos.
Le abrí la puerta del copiloto a Lía y ella me sonrió, seguido me subí al auto y emprendí el viaje hacia mi casa.

—¿Estás seguro de que tu esposo no estará? —preguntó rompiendo el silencio, yo asentí de forma positiva con la cabeza y le ví fugazmente —Verás lo buena que soy con niños, son mi adoración —dijo con alegría que se hizo muy notable, más cuando la volteé a ver de nuevo y ví esos ojos cafés con ese brillo que la hizo ver hermosa.

—Sé que tu debilidad son los niños, y te prometo que te daré los que quieras cuando nos casemos —ella se emocionó aún más cuando le dije eso.

—Querré a nuestros hijos y a los tuyos por igual, Hyunjin —su mano acarició mi hombro y luego se inclinó para darme un beso en la mejilla, —Te amo tanto Hyunjin —esas palabras suyas me hicieron recordar a Jeongin…

—Claro que quiero casarme contigo Hyunjin, ¡Te amo tanto Hyunjin!

Esas fueron las palabras de Jeongin cuando le pedí matrimonio una vez que llevaba la mitad de la carrera, mi padre me heredó la empresa y así pude terminar mis estudios trabajando medio tiempo, al principio pensé que lo que le interesaba a Jeongin era que heredara la empresa por el dinero, pero con el tiempo de casados me di cuenta que no, él gastaba poco y no le gustaba las joyas, ni la ropa de marca, de hecho lo único que le gustaba era el anillo que le di cuando nos comprometimos, al principio se lo ponía cuando íbamos a cenar, aunque fuera la única joya que llevase con vaqueros y shorts de mezclilla, con esos ya conocidos tenis negros con blanco que siempre llevaba, su mezcla no era tan fina que digamos pero aun así era la persona más bella que haya visto en toda mi vida.

Aparqué el auto frente a la casa y salimos de este, abrí la puerta y ví a mi suegra recogiendo los juguetes de los niños en el pasillo de la entrada.

—Déjeme ayudarla —se ofreció Lía y se agachó para recoger los juguetes.

—Gracias hija, esos niños son muy traviesos —dijo JiHyun y me vio con una sonrisa, —Hola, hijo —era su costumbre llamarme así desde que me casé con Jeongin.

—Hola JiHyun —cerré la puerta y me acerqué a ella para darle un beso.

—Mi hijo habló y me dijo que te dijera que vendría mañana por la noche, así que mañana iré por los niños al colegio y me quedaré hasta que regreses —dijo con una sonrisa y se giró para tomar su bolso de la mesita de entrada donde estaba el teléfono y un jarrón con flores.

—¿Sabe dónde está su hijo? —le pregunté.

—¿No te lo dijo? —pregunto seria y me miró confusa, —Mis hijos están en Busan, una de sus amigas tuvo un accidente y tuvieron que quedarse hoy mientras su familia llega mañana —con eso comprendí por qué no llegó, al parecer era importante, pero ¿Qué amiga?.

—Está bien JiHyun, nos vemos mañana —le dije mientras ella salía de la casa.

—¡Papá! —gritó Jay desde la entrada de la sala, corrió hacia mí y lo levanté para luego abrazarlo y darle un beso en su frente, el niño dirigió su vista a mi lado donde estaba Lía y le sonrió —Hola Lili—así le decía por qué entre ellos acordaron eso, él le había comentado que se parecía a las muñecas de plástico que suelen jugar las niñas, y su nombre no le favoreció en eso y por eso ese es su apodo, que por supuesto ella no rechazaba de parte del pequeño.

—Hola Jay —Lía sonrió y se acercó al niño para darle un beso en la mejilla, ella al separarse me dejó ver otra figura pequeña frente a mí, era Jake con ese ceño fruncido, común de su padre cuando se enoja —Tu debes ser Jake —Lía se acercó a él con una sonrisa y se agachó a su altura, —Soy Choi Lía, la secretaria de tu padre —ella le extendió la mano y el niño solo la miró y luego dirigió su vista a mis ojos, en su cafés ojos pude ver enojo, cosa que hizo extrañarme, solo recuerdo que la primera vez que me dirigió esa mirada fue en el primer día que lo llevé a la empresa y de ahí no quiso volver, aún recuerdo el día en la mañana siguiente, Jake hizo un gran capricho por no ir.

—Vamos campeón es hora de ir al trabajo —dije entrando en su habitación, el niño se cubrió completamente con la colcha haciéndome reír por su demostración de flojera —Vamos que se nos hace tarde —descubrí su pie de la colcha y le empecé a hacer cosquillas, pero en menos de un minuto lo había jalado como si yo estuviese alguna enfermedad contagiosa —Vamos Jake tu hermano ya está listo y yo también —tomé la colcha descubriéndolo todo y lo Alcé poniendo mis manos bajo sus axilas.

El niño se removió como un loco aventando patadas y golpeando mi pecho.

—¡Suéltame, suéltame, no quiero ir contigo! —gritó mi hijo volviendo su golpes más fuertes, yo le ví con el ceño fruncido ante su acto.

—¿Qué pasa aquí? —mi esposo y Jay estaban parados en la puerta, el niño viendo sorprendido a su hermano que seguía con sus golpes y mi esposo con el ceño fruncido fulminándome con la mirada como si yo tuviese la culpa.
Solté a mi hijo poniéndolo en el suelo y el salió corriendo hacia su papi, ella le abrazó con fuerza y lo cargó, el niño lloraba en su hombro y Jeongin le decía palabras que lo hicieran calmar mientras con su mano izquierda acariciaba de arriba a abajo su espalda. —¿Qué pasa bebé? —le preguntó ella y caminó hacia la cama dejando a Jake ahí, ella trató de separarse, pero el niño se aferraba a su cuello como temiendo caer a un barranco o algo con mucha altura —Mi niño ¿Por qué estás así? —separó un poco la cabeza del pecho de su madre y pude ver como sollozaba de nuevo, —Vamos no te pongas así, papá te llevará a la empresa ¿no quieres ir?