Un Maravilloso Desastre

Capitulo 25

Capitulo 25

Soph

A veces me pregunto ¿En algún momento dejaremos de sufrir? ¿O estamos condenados? La verdad no lo sé ¿Por qué los demás piensan que somos juguetes y nos lastiman? Se llama "jugar con los sentimientos" y afecta, duele, cambia, destruye.

Cuando se sufre de ese modo cuesta creer que pueda existir un dios, que de verdad haya alguien entre las estrellas que no se compadezca de tu desesperación. Por un momento recuerdas la felicidad del amor, y el mero hecho de vislumbrar la belleza de ese paraíso te hace comprender mejor las atrocidades del infierno que estás viviendo.

Ella quería sentir todo eso y mucho más. Ni siquiera el peor de los dolores físicos puede compararse con el que siente su corazón constantemente. El absurdo de ese vacío neumático, la ausencia total de todo, como respirar en un mundo sin aire, como beber de un vaso vacío, como tirarse a una piscina sin agua, el silencio de las profundidades marinas, la ausencia de cualquier sonido, palabra, color, alegría, felicidad, sentimientos cristalizados, como si el mundo se hubiera partido por la mitad y, de repente, esa sonrisa robada, impresa, crucificada, disecada e inanimada. Así es el vacío desgarrador que siente

-¿Qué paso allá afuera? – dice Adriana entrando a la cocina haciendo que salga de mis pensamientos – cuando digo que te conozco más que Caroline es porque es así, y sé que estabas buscando la manera de alejarte de ella – se cruza de brazos - ¿Qué se supone que pasa? – suelto un suspiro y busco mi teléfono, cuando encuentro los mensajes se los muestro. Al principio tiene cara de sorpresa, después pasa a molesta y después a triste – Oh vaya.

- Si, oh vaya – digo mientras me siento

- ¿Le vas a decir? – Pregunta agarrándome la mano como apoyo.

- No sé, le costó mucho trabajo. No quiero que vuelva a pasar lo mismo.

- Te entiendo, tampoco lo quiero pero tienes que decirle.

- No, si viste en el mensaje le dije que no lo pensara. No necesita saber de unos mensajes que la lastimarían, no tiene por que enterarse. Va a tener un bebe y si las cosas salen bien quizás hasta consiga a alguien que este con ella.

- Te entiendo – dice comprensiva – te apoyo a pesar de las cosas.

- Gracias amiga – le sonrió.

- Y ahora, vamos con ellos

- Vamos – cuando llegamos a la sala nos encontramos solo a Dylan

- ¿Dónde están? – pregunta Adri.

- En el cuarto de Sammy, ella le estaba explicando a Caro como iba a cuidar de su nuevo primito – nos dice, no aguanto mucho antes de que suelte una carcajada

- Dejémosla, que vaya entendiendo como es el ser madre – dice Adriana.

- Vale – digo - ¿Qué hacemos?

- Mmm, ¿Twister? – Me encojo de hombros ante la pregunta de Dylan

- Porque no – es un simple juego ¿Qué podría salir mal?

Hora y media más tarde

-¡No seas tramposa Sophia! – me grita Adriana.

- ¡Tramposa tu! – le respondo.

- Si claro, como si yo fuera la que te pateara cada vez que me toca solo para que te caigas y pierdas... ¡Cómo no! – dice.

- ¿Dejan de pelear y seguimos jugando? ¿O mejor me voy con Caro y mi hija? – pregunta Dylan.

- Ella es la tramposa amor – le contesta Adriana. Lo que pasa es que tenemos una hora jugando esta cosa, pero como me estoy aburriendo cada vez que me toca a mi le meto el pie justo donde ella está para hacer que se caiga. Obviamente nunca admitiría eso en voz alta.

- No hace falta Dylan, ya a mi me dio flojera – comento tratando de levantarme, lo que consigo es caerme en el piso con Adriana encima.

- ¡Ya! – Me grita - ¡Te Gane! – Se levanta y empieza a bailar su "Victoria" - ¿Viste Amor? ¡Hasta que por fin!

- Si eres mentirosa – la señalo – no me ganaste, ya no quería jugar más – me levanto y me limpio los pantalones.

- Si claro, ¿ahora si verdad? – Me mira feo – iré a ver a mi bella hija – dice dejándome sola con Dylan.

- ¿También hace lo mismo cuando te gana? – le pregunto.

- En realidad nuestros juegos son diferentes y no hace eso especialmente– me dice.

- No quiero saber, mejor quédate así – se ríe cuando me escucha asqueada.

- No es nada que... - le corto antes de que termine

- Lalalalala no escucho, soy sorda, no escucho, tampoco quiero escuchar – grito con mis manos tapándome los odios.

- ¿Qué te pasa loca? – dice Caro bostezando.

- Nada que Dylan quiere contarme que tipos de juegos tiene con Adriana y no me interesa saber – veo como hace una mueca de asco.

- No se para que pregunte – dice.

- Si, yo también me arrepiento de preguntar – le digo - ¿Cómo te fue con Sammy?

- Bien la verdad, pero después que hablo casi media hora me quede dormida en su cama con ella a un lado hablándole al bebe. Por lo que veo se quedo dormida al poco tiempo también – dice encogiéndose de hombros.

- Y está dormida profundamente – dice Adriana entrando en el salón.



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En el texto hay: secretos, amor, amistad

Editado: 19.09.2020

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