El resto de la tarde estuve revisando al ganado y los encontré con problemas estomacales y con necesidad de buen tratamiento o seguir enfermando. Así que después de la cena decidí ir a hablar con Gustavo ya que él no nos acompañó en el comedor.
-Hola amor- Entre a su despacho sin tocar y ni siquiera levanta el rostro de los documentos que tiene en sus manos.
- ¿Acaso tus padres no te enseñaron a pedir permiso antes de entrar a un lugar?- Muerdo mis labios al verlo sin sombrero, su cabello revuelto lo hace ver tan sexy.
- Trataron de enseñarme muchas cosas, pero al ver que no aprendía decidieron no seguir perdiendo su tiempo.- Me acerco hasta apoyar mi trasero en la punta de la mesa - ¿Qué haces?- Pregunto pero me ignora. - ¿Estás mirando la lista de invitados para nuestra boda?- Resopla.
- ¿Cuál boda?- dice - Mira, en este momento me encuentro ocupado ¿Podrás irte?-
- Nop- Muevo mis piernas y puedo observar que se queda mirándola. Tengo un pequeño short y una blusa de tiras - Necesito hablar de algo contigo - Me inclino hacia él para que observe mi escote.
- Di...- Carraspea desviando su mirada hacia los documentos- Di lo que tengas que decir y vete... Por favor - sonríe al ver sus nervios.
- Quiero hablar sobre el ganado - Decido levantarme y alejarme un poco, la verdad es que yo también me estoy poniendo nerviosa.
- Supe lo que hiciste hoy- Deja los papeles a un lado y me observa - Gracias por lo que hiciste, pensé que estabas en el mismo semestre que mi hermana - Me sorprendes - Entrelasa sus dedos - Y por cierto, gracias -
- No me agradezca aún- Me siento delante de él cruzando mis piernas - Aunque pensándolo bien puedes agradecer de una manera - Guiño mi ojo.
- ¿Cuándo vas a madurar?-
- No soy fruta para madurar - Digo mirando mis uñas - Aunque si quieres puedo ser la fresa y tu la crema y hacemos un delicioso postre- Relamo mis labios en tono juguetón.
- ¡Basta! - Grita haciéndome sobresaltar.
- Ok. Ok - Levanto mis manos en forma de rendición - Te cuidado, puede que te de un infarto, cada día te veo más amargado - Ruedo los ojos - Vengo a hablar sobre el ganado, necesitas darle otro tipo de alimento, no hay pastizal suficiente y está comenzando a comer tierra y rocas y eso le estruja su intestino- Se vuelve a sentar - También necesitan vitaminas y purgarlos. Tu ganado está perdiendo nutrientes y su carne no va ser eficaz para el comercio-
-Pensé que te faltaba para graduarte de veterinaria-
- Solo un semestre - Encojo mis hombros.
-Se que mi ganado está mal, el arroyo se seco y no hay buen pastizal- Suelta un suspiro - Estoy buscando como salir de este problema-
-Necesitas invertir en varios tanques y llenarlos en invierno para tener la reserva para los veranos. Se sabe que Texas, los veranos son intensos, no puedes confiar en los arroyos - Me inclino hacia él - Por cierto, no entiendo como un río se seca, Clara me mostró una foto y se puede ver claramente que no es un riachuelo-.
-No sabemos que pasó, solo de un momento a otro se fue secando hasta no quedar nada, solo quedan pequeños estanques hasta que desaparece y vuelve el invierno-
-¿Exploraste las montañas? ¿Dónde se crea el manantial?- Niega con la cabeza.
-El arroyo vuelve a fluir en invierno- dice - Pero es buena idea en construir unos tanques de almacenamiento para poder sobrellevar el verano y más cuando son tan intensos como ahora-
-Para que veas que tu futura esposa te dará buenas ideas -
-¿Todo tiene que ser una broma para ti?-
-No es broma- Sonrió - Tú y yo seremos esposos-
-Estas loca-
-Loca por ti, mi amor- Le lanzo un beso y puedo ver como se sonroja - Pero deberías investigar el nacimiento del agua, algo debe de estar afectando-
-No tengo tiempo para eso, tengo mucho por hacer- Hace una pausa sin dejar de mirarme -¿Alguna cosa más que quieras decir?-
-¿Has pensado cambiar la clase de ganado que tienes?- Digo.
-Lo he pensado pero no hay inversión- Dice - Imagino que mi hermana te habrá soltado ya nuestros problemas-
-Soy como un diario para tu hermana, ella me cuenta todo- Sonrió - Si vieras las cochinadas que hace - Ruedo los ojos .
-¿Qué quieres decir
-Nada, olvídalo - Sonrío- Ya sabes, soy su diario y no puedo divulgar nada-
-Si mi hermana ha hecho cosas, es por tu culpa- Abro los ojos.
-¿Y porque yo?- Pongo la mano en mi corazón- Eso duele- limpio mis lágrimas imaginarias.
-¡Eres una mala influencia!- Pongo cara de tragedia.
-¡No digas eso!- Dramatizo - Además, lo que te dije de tu hermana es broma, debes saber muy bien que ella no mata ni una mosca-
- ¡Ves! - Grita - Para ti todo es una maldita broma-
-Y para ti todo es un complique- Me levanto furiosa - ¡Debes de relajarte, pareces un anciano!-
-¡Yo no soy un anciano!- Grita acercándose- ¡Tú eres una inmadura!-
- ¿Está pasando?- Clara entra a la oficina - Sus gritos se escuchan por toda la casa- Cruza sus brazos.
- ¿ Y qué tal que fueran gemidos? No puedes ir entrando sin tocar ¿Qué tal que los gritos hubiera sido de placer?- Niego con mi cabeza- Te hubieras encontrado con una escena...-
-Ni lo digas- Interrumpe sacudiendo su cuerpo - Primero me percaté que no fuera eso -
-¡Qué horror! Escuchando detrás de las puertas - Niego con la cabeza.
-¡Basta las dos!- Ambas nos sobresaltamos por el grito de su hermano - Por favor salgan - Señala la puerta.
-Quiero ayudarte a recuperar tu ganado - digo ignorando que nos echo de la oficina-
-No necesito de tu ayuda-
- Necesitas dinero y yo te lo puedo dar, con eso puedes...-
-Ni hablar- Me Interrumpe - No pienso recibirte nada -
-Ok- digo con calma - No te molestare más-
-¿Enserio?- Tanto Clara y su hermano lucen sorprendidos.
- Si, me acabo de dar cuenta que eres un maldito egoísta, machista, que prefiere perder todo y hundirse llevándose a su hermana antes de recibir la ayuda de alguien- Camino hacia la salida.
Editado: 06.09.2024