Mire hacia la puerta viendo como esa cosa se mantiene ahí sin moverse o entrar, es como si estuviera esperando a que uno de los dos hiciera ruido para saber en donde estamos.
Miré al chico quien se mantiene serio, él observa la habitación y mira una taza de vidrio la cual agarra, enseguida entiendo lo que va a hacer así que lo detengo rápidamente antes de que lancé la taza para distraer al monstruo y poder salir, ese es mi lugar de investigación no puede destruirlo. Él me mira confundido, yo le muestro algunos de los instrumentos de investigación y parece entenderme, deja la taza en su lugar y al parecer piensa en otro plan, yo miré las ventanas que están en la habitación, podemos abrirlas y salir en la habitación de al lado, tome su brazo y lo guíe a las ventanas, él me entiende y abre las ventanas con sumo cuidado, parece una eternidad pero por fin lo logra, espero a que él pase primero pero solo me mira, enseguida entiendo y soy yo la que pasa primero, en ese momento pensé, ¿como es que nos entendemos con tanta facilidad? Con solo unas señas o miradas ya sabemos lo que dice el otro, eso no me gusta para nada.
El chico pasa después de mi, luego ambos salimos y caminamos por el pasillo a paso lento para no hacer ruido, subimos a la superficie en donde quedaba la recepción y las oficinas principales del lugar, luego por fin salimos del gran edificio. Mi corazón late rápidamente pero mantengo la calma, puedo ver que ya es de noche y esa es mi señal para irme, pero cuando trato de alejarme ese chico toma mi brazo, no hace fuerza es un toque muy delicado, lo miré fastidiada pero entonces escuchamos el grito de alguien, es un señor que corre hacia nosotros gritando por ayuda, el chico y yo nos alejamos rápidamente por que detrás de ese hombre vienen muchos de esos monstruos y sabemos que ese pobre señor no va a sobrevivir. Corremos a toda velocidad sin saber a donde ir exactamente, él toma mi mano y cambia el rumbo de nuestros pasos, me lleva a una tienda abandonada, entramos y cierra la puerta bloqueandola con muchas cosas, luego se acerca a mi lado y nos mantenemos quietos y en silencio, no se escucha nada por lo que podemos deducir que esos monstruos se fueron, suspiré suave y me senté en el suelo, quiero irme pero entonces se escucha un gran trueno, maldije para mis adentros.
Esas cosas odian el ruido, por lo tanto cuando llueve ellos se alteran mucho por el ruido que hace la lluvia, en esos días es mejor no salir y estar en un lugar seguro donde ellos no te encuentren.
Por ahora no podemos salir de la tienda hasta que la lluvia termine, hasta ahora me percato que el chico esta sentado a mi lado, él me extiende ese tonto cuaderno con algo escrito.
- Mi nombre es Asher, ¿cuál es el tuyo?- Miré su rostro, esos hermosos ojos azules aún se podían ver a pesar de la oscuridad del lugar, suspiré y también escribí.
- Me llamo Zaila.- le devuelvo la libreta en señal de que no quiero saber nada más de él.
Entonces la lluvia empieza, por un lado me gusta ya que es como un respiro por que si haces algún ruido no se escuchara tanto pero por el otro lado es muy peligroso.
Asher al ver que empezó a llover susurra levemente.
- ¿quieres?- en su mano me extiende una comida enlatada.
Yo me niego pero el ríe suavemente, deja la comida en mis piernas y sonríe.
- Entiendo que desconfíes de mi, somos unos desconocidos, pero odio la tensión, además si quisiera hacerte daño te hubiera dejado sola mientras corríamos.
Pienso en las palabras de este chico y tiene razón, hoy en día todos te traicionan sin dudar solo para salvarse ellos mismos, él podía dejarme allá fuera y aún así me ayudo a esconderme en este lugar con él, le miré a los ojos nuevamente y sin decir nada acepto la comida enlatada, no me gusta depender de nadie así que de mi mochila saco una botella de agua y se la doy, él sonríe y la acepta.
Ambos comemos en silencio mientras la lluvia se hace aún más fuerte, podemos escuchar a esos monstruos alterados pero los ignoramos por completo, de pronto el ambiente tenso que había disminuye dejando solo un momento de tranquilidad. Al terminar de comer suspiro y miro al chico.
-Gracias. - susurre - por ayudarme y no destruir el laboratorio. - Miré hacia otro lado.
El chico sonríe y también susurra.
- Gracias a ti por sacarnos de ese edificio abandonado.- suspira y también mira hacia otro lado.
Nos quedamos en silencio por el resto de la noche, la lluvia sigue sin parar y nosotros nos acomodamos para dormir cada quien en una esquina de la tienda, en ese momento no puedo evitar pensar en todo lo que a pasado hoy, algo dentro de mi me dice que puedo confiar en él pero no me dejare convencer, siempre e trabajado sola y también e sobrevivido sola, no lo necesito.
Con esos pensamientos me quedo profundamente dormida.
Al día siguiente, me levanto con una pesadez en el cuerpo, me sorprendo al ver que la lluvia aún no ha parado, me incorporo en el suelo y miro a mi alrededor, puedo ver que Asher no está pero sus cosas si, se que esto esta mal pero necesito saber si él en verdad no es una mala persona, aprovecho la oportunidad y reviso su mochila, encuentro armas, navajas, ropa, comida...casi lo mismo que yo nada en especial pero entonces su cuaderno me llama la atención, lo abro y empiezo a leer su contenido.
11-03- 2023
Mi nombre es Asher Wensters, tengo 25 años de edad y cumplo el 18 de febrero de 1999.
En el día de ayer conocí a una chica, su nombre es Zaila, es muy lindo su nombre jamás lo había escuchado, la encontré en una de mis caminatas en busca de un laboratorio para investigar a esos monstruos, es muy desconfiada, seria y distante, me gustaría conocerla mejor algo me dice que puedo confiar en ella, me ayudo a escapar de ese laboratorio, eso dice mucho, ¿no?
#2878 en Fantasía
#1280 en Personajes sobrenaturales
#1257 en Thriller
#503 en Suspenso
Editado: 12.12.2024