Cp 4. Una esperanza

Asher y yo nos miramos por un momento, no sabemos que quiere decir esa persona, le hago una seña para que vuelve a preguntar.
-Hola, hola, ¿hay alguien ahí? No se escucha cambio.- nuevamente, silencio.
solo se escucha la interferencia y por unos segundos nos desanimados hasta que alguien contesta, es un hombre.
-¿Hola? ¿hay alguien ahí? Cambio.- Asher y yo nos volvemos a ver ahora sorprendidos, esa persona no esta susurrando, esta hablando...normal.
-¿Hola? Tenemos un refugio y comida, es seguro, ¿me escuchan? Cambio.- Asher se queda en silencio, es obvio que no confía en ese persona y yo tampoco.
La señal se corta y la persona no habla más, ambos nos mantenemos en silencio notando que ya está dejando de llover lo que significa que ya no podemos susurrar. Ambos nos volvemos a sentar en el suelo muy pensativos, se supone que yo me voy cuando la lluvia termine, no necesito pensar en ese refugio siempre e estado sola, además eso podría ser una farza, una mentira, no puedo confiar en nadie y menos en esa voz del walkie talkie.
Pero...¿que pasaría con Asher? Es decir, él también tomará su propio camino, ¿no? Nosotros no nos volveremos a ver, solo fue una casualidad encontrarnos en mi laboratorio, solo...solo fue un encuentro inesperado. Suspiré suavemente y recosté mi espalda a la pared, dirijo mi mirada hacia a Asher quien aún está escribiendo en ese cuaderno, la lluvia se detuvo y esa es mi señal para irme.
Me levanté del suelo y empecé a buscar mis cosas, Asher se levanta rápidamente y toma mi brazo con cuidado, yo lo miré muy confundida, en su cuaderno tiene algo escrito.
-¿a donde vas? Pensé que te quedarías unas horas más.- Asher me mira algo...¿desesperado? O ¿suplicante? No sabría describir su mirada ahora mismo.
-¿No quieres considerar ir a ese refugio? ¿Qué tal si es de verdad? Creo que sabes muy bien que esta ciudad está cada vez más peligrosa y la comida es escasa. Tal vez ese refugio...sea una esperanza para los dos, tampoco confio mucho en eso pero no tenemos más opciones- Dice mientras aún sostiene mi brazo.
Pensé en sus palabras con cuidado, tal vez tiene razón en el tema de la comida, e tenido mucha suerte estos días encontrando comida, pero en el futuro no sé si tendré esta misma suerte, además tengo mi laboratorio aquí en la ciudad no puedo dejar todo eso abandonado. Agarro su cuaderno y empiezo a escribir.
-si tú quieres ir a ese lugar esta bien, pero yo no lo are, puede ser una trampa. Tú y yo tendremos caminos diferentes por lo tanto es mejor que me vaya ahora.- me solté de su agarre y salí de la tienda, tal vez parezca buena persona pero no me dejare engañar, no debí pensar que tal vez si es alguien de confiar. Caminé a paso rápido con cuidado de no hacer ruido, pensando en que jamás debí conocer a Asher aunque todo fuera una coincidencia. Él me sigue y vuelve a tomar mi brazo, lo miré ya muy molesta pero él me extiende el cuaderno.

-¿Acaso e hecho algo para que desconfíes de mi? Te e tratado con respeto y no te e hecho daño, ¿por qué no consideras quedarte conmigo? Seriamos un gran equipo, yo puedo ayudarte con tu investigación, también estudie ciencias.
Mire su rostro y ahora si puedo confirmar que es una mirada de suplica, ¿por qué me quiere tanto a su lado? No lo entiendo pero...su oferta de ayudarme no suena mal y él tiene razón, en las pocas horas que hemos estado juntos no me ha hecho nada malo, lo miré frustrada sin saber que hacer, cuando estoy a punto de dar una respuesta ambos sentimos algo, unas presencias, nos giramos para ver y es un grupo de personas que están frente a nosotros. Llevan una vestimenta algo extraña, también tienen armas y eso nos hace estar atentos, todos están en silencio solo uno de ellos da la cara dando un paso hacia adelante, ese hombre sonríe y hace que todo mi cuerpo sienta un escalofrío, Asher me pone detrás de él y eso me sorprende, yo puedo defenderme de ser necesario pero no es momento de discutir eso, el hombre extiende una gran libreta con algunas palabras escritas.
-Hola queridos sobrevivientes, vemos que tienen dificultades para estar aquí, vengan con nosotros y tendrán casa y todo lo necesario, solo necesitamos que cumplan con una petición...- nos mira a ambos con esa maldita sonrisa escalofriante.
Es obvio que no son de fiar, tan solo su presencia dice que estamos en peligro, Asher y yo nos miramos por unos minutos como si estuvieramos pensando en como alejarnos de ellos, el hombre cambia la hoja de la libreta.

-Lo único que tienen que hacer es...-una de las chicas se acerca, tiene esa misma vestimenta rara, es como una gabardina pero de color negro con un simbolo raro en la parte superior del pecho, del lado derecho, ella se posa al lado de ese hombre y.. abre su boca, estuve apunto de vómitar al ver que no tiene lengua, se la cortó, los demás hacen lo mismo y no tienen lengua como esa chica.-Tienen que cortarse la lengua, así no aran ruido, además tendrán que ayudarnos a buscar más sobrevivientes.- dice escrito en la libreta.
Mire a Asher con horror mientras él seguía serio, es obvio que no vamos a aceptar, Asher toma su cuaderno y escribe.
-¿para qué quieres más sobrevivientes? No somos estúpidos es obvio que no escogen a cualquier persona para salvarla solo por que si.- Miré a Asher sorprendida para mis adentros, ¿como sabía eso? ¿Solo lo supone?
Ese hombre se mantiene con esa sonrisa, vuelve a mostrarnos su libreta.
-Pero que observador, tienes razón no escogemos a cualquiera, solo siéntanse afortunados y créeme, no quieres saber para qué razón o motivo buscamos a esos sobrevivientes. - dice ahora con una mirada retorcida que solo me eriza la piel del miedo, los que están con él que son tres mujeres y tres hombres cierran sus bocas, ellos se mantienen muy serios, y sus ojos...es como si no tuvieran emociones, sentimientos o vida.
Asher ahora más serio hace que empecemos a retroceder poco a poco, solo unos pasos.
Nosotros vivimos en la ciudad de Bilbao, es un municipio situado en el norte de España y una capital, jamás pensé que en esta ciudad nos encontraríamos con unos locos como estos.
El hombre que hace apenas unos segundos nos estaba sonriendo ahora esta muy serio, sus ojos son tan penetrantes y fríos que me hace sentir de nuevo un escalofrío en el cuerpo.