Cp 8. Problemas en el camino

Miré a Leo sorprendida, traté de preguntarle más al respecto pero él solo se dio la vuelta y siguió caminando, miré a Asher pero él también se veía muy confundido, decidimos dejar esa conversación para después y seguir nuestro camino.
Las horas del día iban pasando, nosotros estábamos cansados y exhaustos, tome el brazo de Asher para darle a entender que era hora de un descanso, él me entendió enseguida y fue a decirle a Leo, todos nos alejamos un poco del río para poder descansar pero...había un problema, podemos ver que se acerca una tormenta, mierda, ¿que vamos a hacer ahora? No tenemos donde refugiarnos ni donde pasar la noche. Asher aún ayuda a Leo a caminar y es obvio que todos sabemos en la situación en la que estamos, ¿en qué momento se formó tiempo de lluvia? Esta mañana estaba muy soleado y despejado, todos nos alejamos del río ya que por la lluvia puede ser peligroso y seguimos nuestro camino adentrándonos en el bosque, Leo está hablando con Asher por medio de su libreta, supongo que están pensando en una solución, suspiré algo inquieta y de mi mochila saque una pequeña botella de agua, ya no me queda mucho igual en la comida, ahora somos tres conseguir comida será más difícil, levanté mi cabeza y vi que Leo se acerca a mi.
-Nos dimos cuenta que hay un sendero en el bosque, tal vez si lo seguimos podríamos encontrar un pueblo o algún lugar para refugiarnos.
Mire a Leo no muy convencida pero en realidad era buena idea además no tenemos muchas opciones, asentí con mi cabeza y los tres avanzamos por el dichoso sendero, la noche se acerca junto con la tormenta, tratamos de caminar rápido pero Leo siente dolor en su lesión así que decido ayudar y lo apoyo en mi, ahora Asher y yo llevamos a Leo más rápidamente.
Las horas pasan y me empiezo a desesperar porque hemos caminamos mucho y aun así no encontramos un lugar seguro, las gotas empiezan a caer y nosotros caminamos más rápido pero aun así no vemos nada ya que oscureció por completo, podemos ver los truenos y escuchamos los rayos. Maldición la tormenta nos alcanzó y aun no estamos seguros, escuchamos a muchas de esas criaturas a nuestro alrededor ya alteradas por el ruido de la tormenta. Nos detenemos bajo un árbol ya que no tenemos a donde más ir, es peligroso ya que un rayo puede caer justo en el árbol.
Acostamos a Leo viendo su mueca de dolor, ahora que hay mucho ruido a nuestro alrededor por la tormenta podemos hablar, pero no tan alto.
-Chicos esto no está funcionando, no hay nada a nuestro alrededor, no hay un pueblo ni un lugar seguro.- digo con algo de desesperación.
Asher me mira serio pero también preocupado.
-Tenemos que seguir, no podemos rendirnos ahora, estamos en peligro aquí fuera y esas cosas pueden encontrarnos.
-Asher tienen razón, tenemos que seguir.-dice Leo tratando de sentarse.
Es la primera vez que lo escuchamos hablar, suspiré frustrada.
-Tu lesión está mal, no podemos...
-No podemos parar, aquí no estamos seguros y esta tormenta va a empeorar, tenemos que seguir, estaré bien.-Leo se levanta del suelo con dificultad.
Miré a Asher preocupada pero Leo tiene razón, no podemos quedarnos aquí, bajo la lluvia y con el peligro de que esas cosas nos encuentren en cualquier momento. Ayudamos a Leo nuevamente y seguimos nuestro camino, él barro nos ensucia todos los zapatos y parte de las piernas, estamos completamente empapados pero aun así seguimos nuestro camino pero de pronto escuchamos a una de esas cosas, su sonido tan característico, es como el rígido de un león pero más...fuerte, dominante, grueso 6 algo distorsionada.
Nos detenemos de golpe, no sabemos donde esta y por la oscuridad del lugar puede estar camuflado por su piel oscura, mi respiración se acelera y mis manos tiemblan, maldita sea no puedo negar que tengo miedo ahora mismo, suelto a Leo un momento y saco mi arma, puedo ver que Asher hace lo mismo que yo sacando su arma.
Vemos a nuestro alrededor pero no logramos ver a esa cosa, nos sentimos rodeados pero también nos sentimos como si no hubiera nada, como si estuvieramos solos en ese lugar, entonces escuchamos la voz de Leo.
-Vamos, ellos no están cerca, si lo estuvieran ya nos hubieran atacado, recuerden que ellos se vuelven locos por todo el ruido.
Pensé en las palabras de Leo, tiene razón si estuvieran esas cosas cerca ya estuvieramos muertos, pero entonces, ¿que fue ese ruido? ¿Fue nuestra imaginación? Ahora mismo tengo muchas dudas pero no es el momento de pensar en eso.
Seguimos nuestro camino hasta que a lo lejos logramos distinguir algo, unas casas, siento alivio al ver que por fin llegamos a un pequeño pueblo, caminamos rápidamente y entramos en la primera casa que vemos, cerramos la puerta bloqueandola con cualquier mueble que nos encontramos junto con las ventanas.
Suspiré más tranquila, nos alejamos de la puerta y vemos el lugar, todo está muy oscuro no vemos nada.
- Tengo algunas velas.-dice Leo quien ahora esta sentado en el suelo.
Saca las velas de su gran mochila y las enciende con un llesquero, me sorprende que aun sirva ya que se ve viejo, las velas se encienden y logramos ver un poco el lugar, se nota que esta abandonado por las cosas viejas y llenas de polvo, Asher ayuda a Leo a caminar y vamos hacia la sala, es una casa pequeña de dos pisos, la sala tiene un pequeño sillón lleno de polvo, hay una chimenea y una mesa con solo una silla, tal vez solo vivía una persona aquí, vamos al sillón y lo sacudimos un poco para acostar a Leo, la chimenea aún tiene algo de leña pero esta humedad así nunca prendera, dejo las velas encima de la chimenea para que alumbre más y luego me siento en el suelo frente al sillón donde Leo está acostado, Asher se aleja para ver el resto de la casa pero antes nos preguntan como estamos, sobre todo a mi, me preguntó tres veces seguidas, cuando se aleja miro a Leo quien se ve tranquilo y temblando un poco del frío, claro todos estamos empapados por el agua 6 sucios de barro, es normal que tengamos frío.
-¿Ustedes son pareja?- dice Leo de repente y curioso.
Me quede en shock y lo miré sorprendida.
-¿Porque dices eso? Claro que no, apenas y lo conocí hace unos días. - dije rápidamente.
La tormenta es muy fuerte así que podemos hablar un poco más tranquilos.
-Bueno...él se preocupa mucho por ti, lo poco que hablamos en las libretas solo me hablaba de ti, como si te conociera de toda la vida, claro que también me hablo de él pero fue más de ti.-dice Leo sonriendo como si él supiera algo que yo no.
-No somos nada, tal vez amigos pero nada más, apenas y lo conozco no se mucho de él, si me ha contado su cumple años y otras cosas pero nada más.- Miré hacia otro lado.
Me levanté del suelo para no seguir con esa conversación, nosotros no parecemos pareja, simplemente decidimos estar unidos para ir a ese dichoso refugio nada más, luego de eso cada quien tomará su propio camino. Me levanté y fui a buscar mi mochila, esta completamente mojada así que saqué mis cosas y algunas comidas que me quedaban, mi cuaderno se arruino todo, mi ropa de repuesto también esta completamente mojada y ni decir de algunas cosas personales como jabón, toallas sanitarias...suspiré algo triste pero seguí sacando todo para que se pudiera secar. Asher baja de unas escaleras cercanas y regresa con nosotros.
-La casa tiene dos habitaciones, creo que es mejor quedarnos aquí, la casa está tan vieja que el piso de arriba podría caerse, también encontré algunas cosas inflamables tal vez podremos encender la chimenea, hay una cocina y un sotano, revise la cocina pero no hay nada de comida.-dice Asher en un tono tranquilo.
Yo seguí haciendo mis cosas, lo único que medio sobrevivió sin mojarse tanto fue mi manta, que conveniente pero... pense por un momento y al final me acerque a Leo y le di mi manta, la necesita más que yo, él se sorprende y trata de negarse pero prácticamente lo obligue a tenerla, él se rinde y me agradece. Asher logra encender la chimenea asi que juntos acercamos el sillón un poco más a la chimenea así estaremos todos más cómodos y más calentitos, también nuestras ropas se pueden secar. Los tres hablamos durante algunas horas aprovechando la lluvia, nos conocemos más, como era nuestra vida antes, si teníamos familia o cosas así, nos enteramos que Leo vivía con su madre ya que su padre no era muy bueno con ella, tenía una hermanita menor pero ella murió en un accidente de auto cuando tenía 6 años, me entristeci al saber eso pero él no quiso hablar más del tema, las horas siguen pasando y Leo se queda dormido solo quedamos Asher y yo.
-¿ya no sientes tanto frío ojos bonitos?-dice en un tono algo preocupado pero calmado.
-No, de hecho mi chaqueta de se a secado un poco.-sonrei leve mirando hacia las llamas, otra vez con ese apodo, supongo que tendré que acostumbrarme a eso.
-Zaila...se que tenemos poco de conocernos, y que todo esto es muy repentino, pero quiero que confies en mi.- dice Asher viéndome.
Me sorprendi de que depronto dijera esas palabras, lo miré y trate de hablar pero rápidamente me dice.
-No conozco mucho de tu pasado y se muy poco de ti, pero me gustaría que fuéramos un equipo de verdad, que estemos juntos en las buenas y en las malas, acepte a Leo por ti y no me arrepiento, es una buena persona lo ha demostrado en el poco tiempo que está con nosotros.-dice suspirando suavemente.
No decimos nada durante unos minutos, no es un silencio incómodo en realidad es uno cálido, uno en donde ambos esperamos a que uno de los dos diga algo, suspiré y hablé.
-No soy una persona de muchas palabras Asher, en el pasado me traicionaron cuando más necesitaba a esa persona, me cuesta confiar en la gente y no es solo desde que empezó todo, antes siempre fui de pocos amigos y aunque no se me hacia difícil hablar con los demás siempre preferí mis estudios.-dije con sinceridad volviendo a ver las llamas.
-Puedo hacer el intento de confiar en ti, pero no será de la noche a la mañana, tú tampoco te has abierto mucho conmigo, ambos seguimos desconfiados con el miedo a la traición o a las mentiras.-deje de hablar al sentir como Asher tomaba mi mano, lo miré y el miró directo a mis ojos.
-Mi padre era un abusivo, le pegaba a mi madre casi todos los días, yo...solía esconderme en el armario o me escapaba de casa, estudie para ser abogado pero eso no era lo que yo quería, mi padre me obligó con la condición de que dejaría a mi madre en paz.-su voz tiembla al decir esas palabras.
Lo miré directo a esos hermosos ojos azules, me estaba contando de su vida, ¿de verdad quiere tener mi confianza? Él antes no quería hablarme de su familia...
-si te estoy contando esto es por que en realidad quiero tener tu confianza Zaila, quiero que me conozcas, que estemos juntos, que seamos amigos. Tal vez para ti sonará raro pero desde que te vi senti una gran conexión, no sé explicarlo pero es por eso que a ti no te traté como a Leo cuando lo vi por primera vez, tú eres única.-dice entrelazando nuestras manos.
Yo sentí como mis mejillas ardían un poco, miré nuevamente al fuego y hable.
-Yo...conocí a un chico cuando apenas todo este caos estaba empezando, eramos muy buenos amigos y teníamos mucha confianza, confiaba en él e incluso llegue a arriesgar mi vida por él, pero...él me abandono cuando una de esas cosas me iba a atacar, cuando él se alejo una de esas cosas lo mató y ahí descubrí que el ruido los puede matar, una bocina estaba en uno de los postes, el monstruo que atacó a mi "amigo" hizo que el poste cayera haciendo que hiciera mucho ruido.
Asher me mira sorprendido y curioso, me acerca más a él y me abraza, yo me sorprendi por esto y trate de alejarme pero él habla.
-Gracias por contarme, te prometo que yo jamas seré como esa persona, ahora entiendo por qué siempre has estado sola en estos dos años.
Yo no dije nada, al final acepte su abrazo y nos quedamos así durante mucho rato, yo empiezo a tener sueño así que poco a poco me voy quedando dormida.
No se si fue buena opción brindarle un poco de mi confianza a Asher, pero ver su honestidad en su pasado...me hizo sentir que decía la verdad, tal vez en un futuro podamos ser como él quiere pero por ahora no se sabe que nos depara el futuro.