Capítulo 21-Tyler...¿Lucía?

Ya había pasado la semana de los parciales, ahora me encontraba con las chicas celebrando que todas habíamos aprobado nuestro respectivo semestre.

Manteníamos una conversación de asuntos triviales mientras terminábamos nuestro pedido.

–Cuantos regalos van hasta ahora- pregunta Tamara.

A pesar de que solo le habíamos contado una pequeña parte del asunto, (donde omitimos la casi violación y el secuestro), ella ha estado al pendiente.

–Hace dos días llego el cuarto regalo- dije con desagrado.

En menos de 3 semana ya habían llegado tres regalos y sobres más.

El segundo regalo había sido un llavero en forma de mariposa y junto un arma, era extraño y terrorífico. El tercero fue una bala real. El cuarto regalo se trataba de un dije con mi foto.

Las cartas solo contenían números, fechas para ser más específicas; pero eran fechas "importantes de mi pasado".

–¡Skyler! - el grito de Alice me saca de mi trance.

–¿Qué pasa? -pregunto, pero ellas tienen la vista fija -nada disimuladas- en las afueras del café.

–Mira más al fondo- me susurra Alice.

Volteo de mala gana nuevamente, y cuando soy consciente de lo que observan me arrepiento de haber volteado a ver.

Siento como si me estuvieran agarrando como saco de boxeo.

Steven esta muy acaramelado con una chica... y valla chica. Es esbelta, de cabello cobrizo, casi naranja. De lejos no logro tener una buena perspectiva de ella.

Y apuesto a que sí.

Callo la voz de mi cabeza.

La chica se fija y voltea en dirección a nosotras, pero por suerte no logra vernos -supongo que fuimos muy obvias- por suerte, Steven no voltea.

–Esa es Lucía- dice Tamara sorprendida.

–¡¿Quién carajos es Lucía?! - espeta Alice.

Tamara vacila un poco antes de decírmelo –Su exnovia- responde con un además de manos.

Siento un retorcijo en el estómago.

–¿Y que hace con él?- agradezco que Alice sea mi amiga. Tenia la misma pregunta, pero no quería hacerla.

Esta la mira de manera significativa –No lo sé, ni siquiera se porque esta acá, ella estaba en Alemania o ¿era Irlanda? - nos informa.

–¿Y tú de donde es que la conoces? - pregunto con mucha curiosidad.

–Era una muy buena amiga hasta que decidió follarse a mi novio- dice retándole importancia.

– ¿A Lucas? - pregunto y al momento me arrepiento de ser tan curiosa ya que ella baja la cabeza.

Aunque ella no lo admita se que aun siente "algo" por él.

– ¿No, pero gracias a ella lo conocí? - responde y vuelve su vista a la parejita

–Chicas creo que estamos siendo muy obvias- dice la voz de la razón, Sam.

Todos dirigimos la vista hasta nuestros lugares.

Tenia un tren de pensamiento recorriendo a gran velocidad las villas en mi cabeza.

Terminamos nuestros pedidos, y nos encaminamos a la salida. Justamente Steven pasaba por la entrada al local,

–Tamara, ¡Oh!, has cambiado mucho- fue lo que dijo la despampanante chica, mejor conocida como Lucía.

Steven tenía su mirada en la mía. Lucía era la única que hablaba, pero su voz la percibía muy lejana.

–Te presento a Alice, Samantha y...Skyler- escuchar que dijera mi nombre ya era raro, pero que utilizara ese tono era horrible. Y sabía que me lo merecía, de cierta manera.

–Me llamó Lucía- dijo esta, mientras estrechaba su mano con cada una.

No la concia, pero ya la aborrecía.

–Nosotras ya nos tenemos que ir- les dije. No quería seguir viendo como él pasaba de mí sin ningún sentimiento pesado, mientras yo me sentía estupendamente horrible.

–Bueno, espero nos veamos pronto- dijo y tomo a Steven por el brazo.

Empezamos a caminar con las chicas y sentía su mirada en mi nuca.

---

Después de haber ido a ver una película con las chicas. Por fin estoy en mi apartamento.

Me dirijo al cuarto de baño para darme una larga ducha. La necesitaba como nunca, necesitaba relajarme y sobre todo pensar lo que estaba haciendo.

Entre tanto se me había olvidado hacer el super. Me encontraba con mi carrito paseándome por los pasillos del pequeño supermercado. Después de escoger lo necesario y justo me dirijo a la caja para pagar.

Me encontraba en el ascensor, mirando los números hasta llegar a mi piso.

Cuando abrí la puerta me encontré pisando un sobre. Entre, deje las bolsas en la cocina y regrese para recoger el sobre. Me encamine hasta la sala con el sobre en mano.

<<Tus días se han terminado, aprovecha las ultimas horas que te quedan. Espero tu amiguito no te halla cogido cariño, porque ya no volverá a verte.

Atte. S.I.L.V.E.S.T.R.E>>

Adjunto a la carta había una foto instantánea de mi en el supermercado.

Comencé a llorar, como creí que nunca lo volvería a hacer.

Estaba claro que era Tyler.

Me dirigí hasta mi habitación, me tumbé en mi cama y seguí con mi mar de lágrimas.

Necesitaba a alguien, específicamente a él. Pero no, no lo involucraría en esto.