Capitulo 51

El día siguiente.

  Un leopardo transformado en forma humana y Moore de espaldas, caminando en el bosque con un grupo de leopardos. Dijo preocupado: “Moore, ¿estás bien? ¿Te enviamos de regreso a la Ciudad de los Hombres Bestia primero?

  Moore negó débilmente con la cabeza. “No sirve de nada. La única forma de neutralizar el veneno de los hombres bestia serpiente es comiéndolos. No se moleste en desperdiciar su energía corriendo hacia mí. Lo más importante es rescatar a la hembra ”.

  El hombre bestia serpiente tenía cuatro rayas de animales, mientras que su grupo solo estaba formado por leopardos de dos rayas. Ni siquiera pudieron rescatar a una mujer de sus manos, y mucho menos matarlo.

  Ahora que el más fuerte de ellos, Moore, había perdido su poder de combate, probablemente incluso fracasarían en su tarea de salvar a la mujer.

  Los leopardos se sintieron abatidos.

  "¡Rugido!" ¡Alguien descubrió algo!

  Muy rápidamente, un hombre bestia leopardo en forma humana corrió al lado de Moore con una hoja de árbol que tenía una escama de serpiente. “Encontramos una escama de serpiente en el lugar donde vivía el hombre bestia serpiente, colocada apropiadamente en la hoja de un árbol. ¡Definitivamente ayudará a neutralizar el veneno! "

  Moore miró la escama de serpiente sin comprender, incapaz de describir sus sentimientos ante el repentino giro de los acontecimientos.

  Junto a él, los leopardos hablaban ruidosamente. Sus sentidos ya estaban borrosos en este momento, sin embargo, escuchó claramente esto: “Hay el olor de una mujer en esta escala. Esa hembra debe haberlo arrancado ".

  ...

  Bai Qingqing se sentó en el brazo de Cortis y lo siguió mientras se dirigía a la playa. Después de que tomó la decisión de cambiarse a un nuevo hogar, llevó a Bai Qingqing de regreso a la cueva, empacando todas sus cosas en una pieza de equipaje que ahora llevaba consigo.

  Era mediodía agudo, pero el cielo se oscureció de repente, la presión del aire era tan baja que hacía que uno se sintiera congestionado en el pecho. Con los pájaros en el bosque volando a baja altura, si uno no prestaba atención, podría caminar directamente hacia algunos.

  "Parece que va a llover", dijo Bai Qingqing mientras miraba al cielo.

  Esto estuvo mal. Si tuvieran que detenerse ahora, Cortis todavía estaría rebosante de energía. ¿Y si decidía desatar toda esta energía sobre ella?

  Cortis dijo: “Hay una cueva en frente. Busquemos refugio de la lluvia allí ".

  Bai Qingqing sonrió. "¿Por qué están tus cuevas por todas partes?"

  “Es así para las bestias sin hogar”, dijo Cortis.

  Esta cueva estaba bastante escondida. En la parte superior de las densas enredaderas que colgaban a la entrada de la cueva, había pequeñas flores rojas floreciendo en medio de esas enredaderas, una vista bastante hermosa para la vista.

  Bai Qingqing arrancó las enredaderas y las ató a los dos lados para que el aire circulara por la cueva. Justo cuando estaba a punto de entrar, Cortis de repente la arrastró detrás de él.

  "¡Rugido!"

  Un tigre fuerte y voluminoso se abalanzó. La parte superior del cuerpo de Cortis lo esquivó y, torciendo su cuerpo, se transformó en su forma de serpiente y se acurrucó alrededor del feroz tigre.

  El tigre era claramente un animal salvaje. De un solo movimiento, Cortis lo sometió. El tigre luchó con todas sus fuerzas en el dominio absoluto de Cortis.

  Sin embargo, cuanto más luchaba, más apretado Cortis se retorcía a su alrededor. Cada vez que respiraba, el agarre a su alrededor se hacía más fuerte, hasta que perdió por completo todo el espacio para respirar.

  Bai Qingqing miró en estado de shock mientras esto se desarrollaba ante ella, e incluso escuchó el sonido de los huesos al romperse, lo que le dio tal susto que se le debilitaron las rodillas.

  Le dolía el corazón al recordar que Parker también fue estrangulada de la misma manera antes.

  Después de que Cortis estranguló al tigre hasta la muerte, se transformó en su forma mitad humana. Cuando se dio la vuelta y vio la expresión aterrorizada de la hembra, tiró frenéticamente a su presa a un lado y se deslizó a su lado.

  "No tengas miedo". Cortis lo persuadió mientras abrazaba a Bai Qingqing.

  Bai Qingqing bajó la cabeza y no miró a Cortis, diciendo en voz baja: "Estoy bien".

  Cortis pensó para sí mismo que las hembras estaban demasiado bien protegidas por su tribu y que en el futuro, él debía cazar presas mientras ella no estuviera cerca, para no asustarla.

  “Tenemos comida para hoy. Encenderé un fuego y cocinaré para ti ".

  Bai Qingqing asintió con la cabeza suavemente. "Mm."

  El lugar donde vivía naturalmente tenía una fuente de agua cercana. Cortis fue a recoger leña cerca mientras la tormenta aún no había comenzado.