Dándole vueltas al encuentro.

Ya en las profundidades de mi cuarto, me tiré en mi cama a reflexionar sobre lo que ocurrió hace horas atrás. Aún no puedo superar la pequeña discusión con Esteban.

Por un lado tenía razón, podía seguir estudiando hasta que el bebé naciera, pero luego se me haría el triple de difícil hacerlo, lo bueno era que siempre estaba la opción de rendir libre, pero... ¿Y si estaba tomando una mala decisión? No... definitivamente no. De pronto se me vino a la cabeza la imagen de Jerónimo, en como me afecto que él me tomara de las muñecas para serciorarse de que estuviera bien ¿Dios mío, que me sucede? ¿Por qué no puedo dejar de pensar en la sensación que me provocó el contacto de sus manos en mi piel?

-¿Qué sucede Maga? -pregunta una frustrada Marianela.

-Nada. -Digo intentantando acallar mis pensamientos.

-¿Segura? -pregunta- Es que hace media hora te estoy contando algo y se nota que tienes la cabeza en otro lado.

-Si, lo siento, es que pasó algo hoy cuando salí de mi parcial de Derecho Romano.

-Cuentanos. -Exigió Patricia.

-Bueno, se los resumo. -Digo apoyando la espalda en el respaldar de la cama- Lo que pasó fue que estaba yendo a la cafetería cuando salí del parcial, y me lo crucé a Esteban, me sugirió que lo de en adopción y comenzamos a discutir.

-Decime que le disfiguraste el rostro. -Suplica Patri- Se lo merece por hijo de...

-¡Patricia! -La interrumpimos Marianela y yo antes de que terminara la frase.

-Debería ya que se le lo merece, pero no. Bueno, cuestión que mientras discutíamos, él me tomó de las muñecas frustrado y comenzó a apretar cada vez más haciendo que me dolieran... -Seguí contando, pero fui interrumpida por una estupefacta Marianela.

-¿Que hizo que? Lo mato, te juro que lo mato.

-No, que todavía no te puedo sacar de la cárcel. Bueno, estábamos así cuando de la nada apareció Boris. -Al nombrarlo esperé a que ambas acotaran algo.

-¿Jero? Decime que lo molió a palos. -Las tres sabíamos que Jerónimo era más alto y tenía el cuerpo mucho más trabajado que Esteban, no por que lo hayamos espiado, sino por que se nota a mil leguas de distancia, además estudia medicina con Mari.

-No dado que eso hubiese sido realmente una mala decisión, pero llegó justo para intervenir. -Me interrumpo, aún me afecta recordar lo que sucedió.

-¿Qué piensas hacer en cuanto a Esteban se refiere?

-Nada, dejar las cosas como estan y criar a mi hijo sola. -Digo con voz resignada.

-Piensalo, si decides compartir la custodia, la tendrás que aguantar a Micaela, quizás, por el resto de tu vida.

-Ni lo menciones, no quiero a esa tipa cerca de mi bebé. 

Ya era de medianoche y aún no pegaba ojo, si no me dormía de inmediato mañana tendría unas ojeras tremendas, sin contar que no escucharía la alarma de mi móvil y por si eso fuese poco llegaría tarde a clase de nuevo. Me di vuelta en el colchón e intenté pegar ojo por décima vez.

Mientras estaba empeñada en dormirme, la pantalla de mi móvil se iluminó, genial, lo que me faltaba. Al tomar mi móvil de la mesa de noche era un mensaje.

"De: Desconocido.
Para: Magalí Alonso.
Necesito hablar contigo, ¿Podemos hacerlo mañana?"

Tecleo rápidamente en la pantalla y se lo mando.

"De: Magalí Alonso.
Para: Desconocido.
¿Quien eres?"

"De: Desconocido.
Para: Magalí Alonso. 
Soy Jerónimo. ¿Podemos hablar mañana?"

"De: Magalí Alonso.
Para: Jerónimo. 
De acuerdo, a las once en la biblioteca de la universidad"

Después de que se lo mandé, me acomodé de vuelta en el colchón y por una vez, después de horas intentar dormir, logré hacerlo.

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Hola bellas/os acá les dejo un nuevo capítulo, espero les guste. 
¿De que querrá hablar Jero con Maga?