Dolor.

Cuando el horario de visita se acabó, una de las enfermeras se llevó a mi bebé al sector de neonatos para que pudiera descansar ya que entre el parto y las visitas estaba agotada.

-Enseguida vuelvo cariño. -Dijo Jero.

-De acuerdo. -Respondí antes de caer en los brazos de morfeo.

Desperté escuchando gritos en el pasillo, al abrir los ojos vi que debía de ser temprano pues por la ventana se podía ver el sol recién saliendo.

Afuera se podía escuchar un gran revuelo. A los pocos segundos entra Esteban con su rostro demasiado serio junto a una Micaela con cara de haber estado llorando, detrás de él entró Jero con una expresión igual de seria, un hombre de unos cincuenta años y una enfermera.

-Buenos días señorita Alonso. -Saludó el hombre- Soy el doctor Varela, soy el director del hospital y ellas es Margot, es jefa del área de neonatos.

-Encantada. -Respondo contenta- ¿Cómo se portó mi bebé?

-De ella venimos a hablar. -Dijo la joven forzando una sonrisa.

-¿Lloró mucho?

-En realidad venimos por otro motivo. -Intervino el doctor.

-¿Cómo? -Digo confundida- Disculpe es que no entiendo.

-Pues en nombre del área de neonatos y del hospital queremos pedirles disculpa a usted y al señor Grayson. -Un frío me recorrió el cuerpo y la alegría se esfumó.

-¿Perdón? ¿Que le pasó a mi bebé?

-Cariño debes de ser fuerte. -Dice Jero en un intento de tranquilizarme.

-Ya, por favor, no teniendo lo que están hablando.- Digo comenzando a impacientarme.

El médico estaba por hablar cuando Estaban lo cortó.

-Nuestra bebé ha desaparecido.

-¿Cómo? ¿Qué has dicho? ¿Dónde está mi bebé? -Pregunto ya con angustia en la voz y con lágrimas acumuladas en mis ojos. De pronto toda la habitación comenzó a dar vueltas- Jero...

-Shhh, tranquila, la vamos a encontrar. -Dijo acercándose y sentándose en a mi lado- Esteban ya hizo la denuncia.

-¿Cómo? -pregunto mirando al director del hospital y a la enfermera- ¿Cómo es posible que suceda algo así? ¿Cómo permitieron que un lunatico se llevara mi hija?

-Realmente no sé cómo pasó, tenemos seguridad en todo el hospital. Puede estar tranquila, que haremos todo lo que esté en nuestras manos para que su hija vuelva con usted, ya los investigadores tienen todas las grabaciones de las últimas veinticuatro horas, solo hay que esperar.

-¿Esperar? -Gritó Esteban- A esta hora mi hija puede estar en cualquier lado.

-¿Cómo? ¿Hace cuanto está desaparecida?

-Pues luego de que nos llevamos a su bebé y la dejamos en el área de neonatos hubo un recambio de personal, suponemos que en esos segundos en los que salió el personal de franco e ingresó el personal de turno alguien debe de haberse camuflado como parte de personal al área y fue específicamente a la cuna de su bebé.

-Con permiso, debemos seguir con nuestra ronda. - Se disculpó el médico junto a la mujer y ambos salieron de la sala.

-¿Nuestros padres lo saben? -Desvío la vista hacia Esteban para preguntarle una vez que estamos los cuatro solos.

-Fue lo primero que hizo Jero, me avisó a mí y a tus padres, yo les avisé a los míos.

-Diles a mis padres que entren, quiero hablar con ellos. -Dije secándome las lágrimas.

Esteban soltó la mano de Mica y asomó la cabeza por la puerta para llamar a nuestros padres.

-Hija. -Dijo mi madre acercándose y nuevas lágrimas comenzaron a caer haciendo que exteriorizara todo mi dolor- Tranquila, con tu padre estamos trabajando a toda maquina para que Quimey vuelva contigo. Lo que sí deben decirnos si alguno de ustedes tienen algún conflicto con alguna persona.

-No ma, con la única que tenía problemas era con Mica, pero ya ves que nos hemos vuelto como hermanas. -Digo extendiéndole una mano a mi amiga la cual ella tomó y dando unos pasos me abrazó.

-Yo tampoco. -Soltó Esteban.

-Noelia. -Soltó Jero de pronto.

-¿Quién? -preguntó Esteban de pronto.

-Mi ex novia. Estoy seguro de que fue ella. Noelia hace poco volvió, intentó hacer que volviéramos, pero como yo amo a Magalí no lo logró, lo único que consiguió fue que Maga y yo peliemos y que a causa de ella casi la pierda definitivamente. Cuando se enteró de que Magalí y yo volvimos ella desapareció sin dejar rastro.

-¿Estas seguro? -preguntó mi padre.

-Completamente, es que... -largó un profundo suspiro y se obligó a continuar- Hace tres años atrás iba a ser papá, estaba muy ilusionado, pero entre ella y yo las cosas comenzaron a ir mal. Un dia intenté terminar mi relación con ella, planeaba hacerme cargo de mi hijo, pero sin estar a su lado por que las cosas ya se estaban yendo de mis manos, como yo me negué a volver con ella, pagó para que se lo sacaran y al enterarme de lo que hizo corté toda relación. Hace poco ella volvió alegando que estaba arrepentida, pero ya era muy tarde, yo me había enamorado de nuevo. Por eso creo que fue Noelia la que hizo esto, para obligarme a volver con ella.

La habitación estaba sumida en un profundo silencio, lo único que podía pensar era en mi bebé y en que estado estaría. Si Jero tenía razón en lo que decía yo misma me encargaría de ella. Una cosa era que se metiera conmigo, pero una muy diferente era que lo hiciera con mi hija recién nacida.