Un pequeño hechicero en Camelot

04

POV ARTHUR

Corrí por el castillo cuando me avisaron que estaban llegando. Escuché como mi hermana gritó mi nombre pero no me importó, estaba demasiado feliz de verlo de nuevo.

Los vi bajar de los caballos y me acerqué aún más, sentía que no podía ser más feliz al verlo de nuevo en casa; todo este tiempo en el que no estuvo una parte de mi faltaba y se sentía muy vacía.

Toda esa paz se perdió cuando vi como Sir Galahad se acercaba a él con su espada desenvainada y atravesaba a Merlín con ella, mis latidos pararon y todo en mi se desconecto, corrí a él y lo tomé en brazos cuando Lancelot quitó la espada del cuerpo de Merlín.

Lo alce entre mis brazos y corrí hacia Gaius, él debía encontrar la manera de cómo sanarlo, no me importo como la sangre ahora negra de Merlín me manchaba.

—¡Gaius! — grite llegando a la enfermería

—Mi rey — dijo el médico preocupado cuando vio a Merlín en los brazos del otro

—Tienes que ayudarlo Gaius, Sir Galahad lo apuñalo con su espada y su sangre empezo a salir de color negro — dijo alterado

—Dejelo ahi — señalo una cama donde dejó a Merlín

—Necesito saber que hizo que su sangre se hiciera de color negro — dijo buscando como detener el sangrado de Merlín

—Vayan por Galahad — dijo el rubio a los dos guardias que lo habían seguido desde la puerta

No pasó mucho tiempo para que el caballero estuviera ahí. Parecía tener unos golpes y Gwaine que venía más atrás también. Muchas veces Gwaine no era de su completo agrado pero lo único que tenían ambos en común era cuidar a Merlín y eso lo hacía su aliado en estos momentos.

—¡¿Qué hiciste, que tenía la espada?! — lo mire molesto

—Hice lo que tenía que hacer — gritó molesto — hice lo que tu padre haría — volvió a gritar

—Este ya no es su reino — lo acerque a mi molesto — Yo soy el rey y mis leyes son las que tienes que seguir

—Eres débil, ese hechicero y estos forasteros te hicieron débil — grito luego de mirar a Gwaine y Lancelot — Tu padre tenía razón, jamás debiste tomar el trono, solo llevarás a la ruina el reino

—Como yo lleve a mi reino es mi maldito problema, los pensamientos de mi padre no influyen en mi reinado

—Llevarás el reino a la ruina y todo los un maldito hechicero

—Merlín no tiene nada que ver — volvió a gritar

—¡Mientes, cuando se fue empezaste a cambiar todo! — sin importar que estaba siendo detenido por León y Lancelot, él seguía intentando acercarse a Arthur — Debe ser un buen calienta cama para que te haya atrapado así — gritó, pero antes que Arthur saque su espada dispuesto a matarlo Gaius grito

—¡Dejen de gritar! — nos miró molesto — Sir Galahad, ¿que veneno uso? — pregunto molesto

—No se a lo que te refieres — lo miro serio

—Sir Galahad no lo volveré a preguntar — camino hacia el hombre — ¿que veneno uso? — repitió molesto, nunca lo había visto de esa manera y no lo culpo en realidad

—¿O que Gaius? — reto el otro

—Te hare sufrir, lo que el rey te haga no será nada con el dolor que puedo hacerte Sir Galahad — amenazó a Galahad, nunca había visto a Gaius de esa manera; incluso puedo jurar que vi sus ojos brillar en un suave dorado

—Esto es lo que provocaste — me gritó furioso — Con tus estúpidas leyes la magia se ha infiltrado en todos

—Habla Galahad — grito Gaius, acercándose con algo extraño en la mano — o te obligare — acerco ese extraño objeto en el ojo haciendo que el otro grite adolorido

Sus gritos se prolongaron un poco y parecia salir fuego de esa cosa extraña, jamas habia visto a Gaius asi y me asegurario de nunca molestarlo de esa manera nunca en mi vida.

—Bien — gritó lloroso, forcejeaba por liberarse o al menos separarse de Gaius — lo diré

—Habla — dije

—Interficere magicam — susurro, que mierda era esa cosa, pero Gaius parecía asustado

—De donde lo conseguiste — pregunto Gaius

—Luego de la cacería que se hizo a un pueblo en las fronteras de Camelot encontró ese veneno — suspiro tembloroso — a los líderes de cada batallón se nos ponía eso en nuestras espadas y esos malditos morían rápido, era fácil deshacernos de ellos

—Cual es su cura — pregunte

—No la hay — dijo Gaius

—Es imposible, debe haber algo que podamos hacer — dije desesperado — no podemos dejar que muera

—Lo siento señor — se lamentó Gaius

—Llevense — murmure — llevenselo o lo matare ahora mismo — grité furioso

Escuche como se lo llevaban mientras el maldito se reía, la sombra del reinado de mi padre todavía acechaba al mio. Me acerqué al cuerpo de Merlín mientras tomaba sus manos y dejaba un beso en ellas. Me negaba a perderlo.

—Gaius — murmure con lágrimas en los ojos — debe haber algo que podamos hacer, no podemos dejar que muera así — lo miré desesperado — algun hechizo o alguna magia que podamos usar

—Lo lamento señor, pero no hay nada — murmuró triste — pero hay una profecía, se dice que Emrys es el hechicero más poderoso que ha pisado la tierra — dije y recordé de la profecía que investigue luego de saber su verdad




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