EL PRINCIPIO DE TODO

Quizás el tiempo no fue el adecuado para nosotros sin embargo fue el más hermoso que pude disfrutar durante todo el tiempo en el que permaneciste a mi lado...

Saben yo jamás imaginé encontrarme a mismo diciendo que tengo un problema.
La depresión se apoderó de mí silenciosamente, al principio tenía problemas con las cosas pequeñas pero luego elegía ignorarlas como una pequeña jaqueca, me decía es temporal que pasaría, es solo un mal día, pero no lo es, estoy atascado en este estado mental.
Me acostumbré a usar una máscara social y vivir entre los demás porque es lo que tenía que hacer, es lo que hacen los demás, pero el problema no desapareció.
Me esforcé por actuar todos los días y empezó a costarme más y más, allí es cuando comencé a caer más profundo y es entonces donde empecé a alejarme de mis amigos y familia poco a poco o simplemente ignorandolos por completo.
Todas las satisfacciones desaparecieron, esas pequeñas cosas que solían hacerme feliz ahora son insignificantes, incluso las cosas simples se volvieron dolorosas haciéndome perder la motivación ¿Por qué continuar haciendo cosas si nada me hace feliz? Todo esto me hace sentir incluso peor y me veo atrapado en un círculo vicioso sin salida.

De pronto me doy cuenta que estoy viviendo en cámara lenta, los días son indistinguibles, sólo ruido blanco...

Una pesadez que llena mi mente y se reparte en todo mi cuerpo, siento que nunca volveré a ser feliz sigo alejándome y destruyendo las relaciones cercanas que tenía.
Estoy avergonzado por todo lo que he hecho y por lo que no he hecho, hay una parte de mi que quiere arreglar las cosas, un impulso positivo repentino que me hace querer salir y conocer nuevas personas que no saben absolutamente nada de mí pero no dura mucho porque sé que de todas formas no funcionará ¿Quién estaría emocionado por conocer a un miserable como yo?
Las cosas que emocionan a mis amigos me son indiferentes y me dejan consiente de la brecha que hay entre ellos y yo.
Otro fracaso no es una opción así que elijo estar solo, donde me siento seguro, donde nadie me hace preguntas y encuentro la calma, tu regazo ahora frío, lágrimas caen por mis regordetas mejillas, ya no tengo autoestima y la falta de tener un propósito se me hace insoportable cada día al punto de no querer continuar, prometiste no dejarme nunca y mírame ahora llorando desconsoladamente frente a tu tumba... ¡SEOKMIN! llévame contigo, por favor, si no es así al menos brindarme un propósito para seguir aquí.