VALERY

Una alarma me saco de mi sueño profundo, pero para mi dicha era una de mis canciones favoritas asi que seria todo un honor levantarme con esas musica todas las mañanas.

Esta soy yo Valery Beth una joven alta,morena,cabello negro ondulado hasta sus caderas y unas curvas para enloquecer que preferia ocultar,asistia a un instituto a cuatro cuadras de mi casa en el que cursaba el penultimo año ¡YAA CASI TERMINARIA!.

Me encantaba ir al instituo pues pienso que puedo liberarme de todos los problemas que ocurren en mi casa, y para mi suerte ya habia finalizado el verano era momento de regresar y tenia muchas ansias de ver a mis amig@s iba con las ganas al 100%.

Cuando mi alarma sono salte de mi cama emocionada, entre a la ducha me quite mi pijama lave mi cabello, entre a mi habiatacion donde me puse el uniforme que consistia de una falda azul y una camisa blanca que para mi desgracia odiaba como me quedaba pero lastimosamente no podia hacer mucho al respecto.

Cuando me estoy desenrredando mi cabello entra mi hermano a mi habitacion,se lanza con mucha fuerza en mi cama (igualito a los de la WWE). -¿Emocianda por tu primer dia de clases hermanita?-.me pregunto mientras estrujaba mis peluche.

-¿No tienes nada que hacer? ,deja mis muñecos quietos.-Grite mientras rodee mis ojos
-¿no crees que esta muy temprano para estar tan agresiva?- dijo con risa burlona
-Largate. Le respondi

Como casi nunca me obedecio
Y este es mi hermano Andres Beth,dos años mayor que yo; univeristario,alto,cabello negro que reposaba sobre su frente,moreno,ojos marron y claro con una lista de chicas babeando por el.   

Termino de recoger mis cosas, me monto mi bolso agarro mi celular y me pongo mis audifonos y subo el volumen al 100% y me deleitaba escuchando "Flaca de Andres Calamaro". mientras caminaba por la acera sono mi parte favorita de la cancion y mientras observaba el lindo dia me deleite cantandola a todo pulmon.

Entre no me olvides te deje nuestras abriles 
olvidados en el fondo del placar, en el cuarto de 
invitado eran tiempos dorados el pasado 
mejor.

Aunque casi te confiezo que tambien he sido un 
perro compañero, un perro leal que aprendio a nadar 
y a volver al lugar para poder comer.

Cuando alce mi vista ya me encontaba caminando por los pasillos del intituto a lo lejos pude observar a mi grupo de amigas y me encamine en esa direccion, al llegar hablan sobre donde habian viajado en el verano, por todas nosotras eramos ,9 en mi instituto y otra que estudiaba en otro.