CAPÍTULO TRES

Seguí con mi vida, tanto como pude.

Conforme pasaba el tiempo del último año escolar me iba dando cuenta de que no podía dejar atrás lo que había sucedido con Paty, había culpa dentro de mí y aunque yo misma me convencía de que lo estaba haciendo bastante bien, que lo ocultaba de la mejor manera posible y que nadie se daba cuenta  de que estaba fingiendo la mayor parte del tiempo pronto me convencería de que estaba muy equivocada porque en el fondo todos sabían que no estaba bien y por eso permanecían a mi lado, fue entonces que todo se complicó porque fingir se volvió una tarea tan difícil para mí que en medio de mi desespero comencé a hacer cosas que más tarde me arrepentiría.