Hay historias que se escriben solas.
Historias que nacen de un susurro en la madrugada, de una frase garabateada en un recibo, de una pregunta que nunca se hizo en voz alta.
“Un Secret Entre Nous” empezó así: como un secreto.
Una pequeña semilla de “¿y si…?” que creció entre flores, silencios y besos robados.
Camille y Julien no son perfectos. Se equivocan, se hieren, se pierden.
Pero también se quedan. Se atreven. Se abrazan cuando da miedo.
Y para mí, eso es amor.
El que se construye a trocitos, el que se cura con manos tibias y promesas verdaderas.
El que hace familia incluso cuando uno cree que ya no tiene dónde pertenecer.
Si llegaste hasta aquí, gracias por creer conmigo que un error puede ser el principio de algo hermoso.
Que un secreto puede convertirse en promesa.
Que siempre —toujours— hay una forma de volver a casa.
Editado: 30.07.2025