Un Simple Error

CAPÍTULO 25


 

Vincent


 

Su cariño, su sonrisa, sus besos cada mañana. Su presencia me hace falta. Mi casa y su casa, se siente solitaria. Realmente me haces falta. Todo de ti me hace falta. 


 

Era hora de marcharme, al funeral. Era hora de despedirme, aunque no quería. El camino hacia la funeraria se hizo eterno, realmente eterno.


 

Al llegar, entre rápidamente a su cuarto donde se encontraba. 


 

En cuanto a entre mi mirada de dirijo a las personas presentes, sus padres adoptivos, su hermano, su esposa e hijos. Avani y Anthony junto el ataúd donde se encontraba Elena. Mis ojos se inundaron de lagrimas al ver a mi Elena.


 

Allí si vida, es lo peor que podía ver. Sus ojos cerrados, su piel pálida, su cabello negro, pase mi mano por su cabello, me acerqué un poco y bese su frente con la mayor delicadeza de el mundo. Sus sortijas resaltaban al igual que sus collares.


 

Su ropa negra, se ve igual que siempre. Volví a alejarme, en pocos minutos rompí en llanto. Estaba sentado, cerca de le ataúd de Elena, ella era mi ángel, lo repetiré las veces que yo quiera pero siempre será mi ángel. La madrastra de elena se acerca a mi para que dijera unas palabras.


 

le dije que si, pero que serán breves.

Me levanto, voy hasta el podio que estaba en el centro de la sala

.

—Como puedo comenzar... son tantas cosas que viví a su lado que no puedo expresar, Cosas que me enseño, me hizo sentir la persona mas amada este mundo de mierda que todavía tengo que vivir sin ella. Solo mirarla a sus ojos te hacia sentir, la persona mas valorada en este mundo— Yo la amare— Siento que se esta formando un nudo en mi garganta que se vuelve mas y mas grande—con ternura, hare que viva entre mis sueños de amor y felicidad. — Se que no buscara otro amor, por lo que yo siento por ti es algo sublime y radiante,— Cerré mis ojos y mis lagrimas comenzaron a deslizarse por mi rostro. — te hare de emociones y te juro ante cupido y quien quieras. No te olvidare por que este amor fue un amor inmortal


 

Mi querida Elena.

Pasaron algunas semanas de la partida Mi Elena.


 

mi dolor se vuelve mas y mas grande que mi cuerpo se siente tan débil, que parece irreal. Solo soy una persona que busca ser feliz sin que nadie lo ayude en absoluto.


 

El silencio se apodera de mi habitacion, a veces ni me levanto y solo pienso en todo el daño que le cause a Elena. Haciendo que llorara por horas, cada vez que me siento en la parte de atrás de mi casa, y es de noche. Le lloro al cielo por que no me despedí de Elena por ultima vez. Pienso que los te quiero que nos solíamos decir, si eran reales.


 

Elena ya formaba parte de mi, aunque no la vuelva a ver.


 

Quiero volver a ver  a mi ángel , le suplique al cielo o a quien este por alli que me la devuelva de nuevo. Era hora de cargar su ataúd hasta el cementerio.  Y no pude ver cómo cerraban y se llevaban a Elena hacia el auto.


 

— No puedo despedirme de ella — Escuche susurro de Tayler


 

— No puedo— limpie mis lagrimas


 

— Tranquilo hermano — se acercó y m abrazo.

No tarde el llegar a cementerio. Con sus flores favoritas, Rosas blancas, rojas y negras.

Camine junto a Bryce hasta donde nos indicaron.


 

Lo único que tengo muy claro es que no voy a poder aguantar ser fuerte. 


 

Mientras estaba  más cerca sentía como mi corazón se hacía pedazos pequeñitos que cortan y dejan su marca.


 

Mis ojos me ardían, los familiares de estaban despidiendo de ella.  Solo me tocaba a mi.

Dios esto me va a doler.


 


 

En el hospital


 


 

— Soy yo Vinnie, no se si me escuchas o no.. — Tenia un nudo en mi garganta que se volvía mas y mas grande—  No olvides el primer día que nos hablamos , los momentos que reíamos juntos, no olvides nuestras peleas y reconciliaciones,  no te olvides las veces que me decías" cállate"  y luego me abrazabas con fuerza. Yo no quiero que me olvides  que te amo , Elena.... Jamás dude de el amor que me tenias. Por favor —  suplique—  no me dejes aquí sin tu compañía ,sin tu amor no se que hare sin ti.—  acomodo mi cabeza en mi brazo y comienzo a llorar incontrolablemente. —  Perdóname Elena, por todo lo que te hecho sufrir estos últimos meses...—  Levanto mi mirada—  Y se que no merezco ese perdón pero lo necesito... Me siento culpable no debí dejarte sola. Soy un necio , un estúpido, lo que quieras pero jamás dude de mi amor hacia ti. si te vas no se como viviré con a culpa que tengo...— pase mi dedo delicadamente por su rostro — Me levante de la silla y abrazo con fuerza el cuerpo sin vida de Elena —Elena te necesito —  Repetí.


 

[...]


 

Ella corre sin saber hacia donde ir, con miedo a que la atrape. No mira hacia atrás, sabe que está ahí, que nunca se fue. Salta, corre tropieza y sigue con el terror comiéndole los huesos. Lo que ella no sabe es que mientras más corra más cerca está, que ya la tiene, la atrapo hace mucho tiempo pero ella sigue corriendo tratando de liberarse de sus garras


 

. Ella sigue intentando que sus piernas no le fallen, corre sin fin alguno pero ya está ahí, justo detrás de ella respirándole en la nuca. Esa bestia que la persigue en sus más profundos sueños, esa bestia que algún día fue ella.


 

— No debí, no debí dejarte sola — susurre mientras pasaba uno de mis dedos por la lápida de Elena— Como olvidar esa fecha — escuche la voz parecida ala de Noah

Rápidamente voltee


 

— ¿Que haces aquí? — pregunte




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