Un Sociópata Dentro De Él

Capítulo 12

1

Calix

  Segundos de silencio después…

  — ¿Y a mí qué pedo? —suelto.

  — Necesito tu ayuda —suplica Thompson.

  —No.

  Estoy a punto de colgar cuando distingo la voz de Athan— Calix, por favor.

  Segundos de silencio.

  Suspiro— ¿Dónde?

  — En mi casa —responde Athan antes que yo cuelgue.

  Cuando dejo mi teléfono en la cómoda, veo de reojo algo brillante en ella. Tanteo para qué es hasta que mi mano da con algo que parece ser una cadena de plata. Me la coloco, notando que tiene un pequeño dije de un león. Bueno, para no hacer largo el resto, me vestí y me fui en auto a la casa de Athan, donde me recibió él.

  — ¿Y bien? —pregunto apoyado de brazos cruzados en una pared, con Thompson y Athan delante mío.

  — Secuestraron a Jane —suelta Thompson.

  — ¿Y?

  — Y...—empieza Athan— queremos que nos ayudes a encontrarla. Sos el mejor del grupo, tu mente va más allá de lo convencional.

  — No soy detective privado, pídanme lo que quieran menos eso.

  Athan suelta una risa amarga— Era obvio que ibas a hacerlo, se te presenta un reto y te rendís, como con tu hermana.

  Primera puñalada al abdomen.

  No lo escuches, te está manipulando.

  — Si no hubieras dejado que se vaya a esa fiesta —sigue—, estaría viva, pero bueno, lo hiciste.

  Segunda puñalada al abdomen.

  — La asesinaron porque vos lo permitiste, vos dejaste que la mataran a sangre fría, y tiraran su cuerpo en un río.

  Tercera puñalada al abdomen.

  Los ojos empiezan a escocerme.

  — Tenía 16 años, solo 16, y la dejaste morir como si no valiera nada, parece que era así para vos.

  Cuarta puñalada al abdomen.

  La primera maldita lágrima se desliza por mi mejilla, luego la segunda por la otra mejilla.

  — Vos mataste a tu hermana, por tu culpa ella no puede vivir como una adulta, ni siquiera puede vivir...porque vos la mataste.

  Quinta puñalada al abdomen.

  Mis puños comienzan a tensarse y lágrimas escapan de mis ojos.

  — Si asesinaste a tu hermana, no sé qué será de Jane, que no te agrada. Otra persona inocente va a ser asesinada por tu culpa, por tu culpa Jane va a terminar como Ailani…

  No lo digas. Por tu bien, no lo digas.

  —...muerta.

  Esa fue la gota que rebalsó el vaso.

  En dos zancadas me aproximo a Athan y lo empujo fuertemente contra la pared a sus espaldas, presionando mi brazo contra su tráquea. Su expresión es ligeramente sorprendida, no pensó que iba a reaccionar así. Sin soltarlo, le propino un puñetazo con todas mis fuerzas en la mandíbula.

  — Volvé a decir todo eso y, te juro por ella, que no vas a salir ileso —musito con furia. La expresión de Athan cambia una de arrepentimiento al escuchar mis palabras.

  — Calix—trata de hablar pero lo suelto de golpe y voy hacia Thompson, quien retrocede asustado.

  Lo señalo con expresión furibunda— Que sepas que me debes una grande.

  Voy hacia la cocina, abro la heladera y saco un Monster Mule. Athan está a punto de quejarse cuando le dedico una mirada helada. Me acomodo en una silla mientras abro con una mano mi Monster y le doy un sorbo antes de hablar, fingiendo toda la tranquilidad del mundo.

  — ¿Cómo están tan seguros de que la secuestraron?

  Thompson hurga en su bolsillo y me entrega un pequeño papel doblado repetidas veces— Estaba en su cama.

  Extiendo el papel con una mano y empiezo a leer mientras tomo.

  Hola, amigos.

  No me interesa la plata, quiero a Sorrow acá. Hoy es un buen día para mí, así que voy a ser generoso con el tiempo. Tienen 2 meses para encontrar a la chica y traerme a Sorrow, de lo contrario, ella muere. Voy a darles solo 1 pista sobre nuestro paradero:

  Suicidas. Valdiviana. Krzywy. Clayoquot.

  Nos vemos, André.

  No escupas el Monster, no lo hagas.

  No tengo idea de a qué se refiere con esa ''pista''.

  Trago con esfuerzo y dejo el Monster en la mesa frente a mí. Con el ceño fruncido vuelvo a leer la nota.

  — Athan supuso que ibas a saber qué significaba —expresa Thompson.

  Segundos después, niego con la cabeza antes de mirar a Thompson con expresión de detective privado.

  — ¿Dónde fue la última vez que viste a tu hermana? —interpelo.

  — Estaba hablando con ella y después se fue a su habitación. La llamé desde fuera y no me respondió, así que entré. Ella no estaba pero sí esa nota sobre su cama. Estábamos en nuestro departamento.

  Me levanto y voy a la puerta de la casa. Me termino el Monster de una y aplasto la lata con fuerza.

  — Vamos a tu casa, Thompson —expongo antes de salir de la casa y subir al auto.

  Segundos después, veo salir a Thompson y Athan. Athan se sube en el asiento del copiloto y Thompson en los de atrás. El segundo me da la dirección de su casa y empiezo a conducir hacia allá.

  — Perdón, Calix —habla Athan unos minutos después—, sabés que no lo decía en serio. —aprieto los puños contra el volante—, solo...necesitaba que nos ayudes y...la única forma era...manipulándote.

  Hasta acá.

  Freno el auto de golpe y, sin mirarlo, ordeno—: Atrás.

  — Calix, por—

  — Dije. Que. Atrás.

  Suspira y se baja del auto para subirse atrás, junto a Thompson. Bloqueo las puertas y pego un acelerón. Minutos después, estamos frente a un bloque de departamentos...horrible. El cemento está desprolijo, tiene manchas de humedad y otras mierdas.

  — Por favor, decime que no vivís en este basurero —suplico a Josh.

  — No…

  — Gracias a Dios —murmuro.

  — ...Vivo en el de allá —señala un edificio...mucho peor,



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En el texto hay: droga, accion, muerte

Editado: 19.11.2021

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