Un Sugar Daddy...¿yo?

Capítulo 24. Una clara conversación.

—No voy a involucrarme en eso. —dijo Liam al escuchar el plan de Corina— No lo entenderías, una cosa es molestarla y otra es dañarla de esa manera. ¿Qué clase de persona eres? Mi padre jamás va a caer en ese juego, es un hombre ciego de obsesión por Aurora y ella le dió lo que tú no, su inocencia.

—No seas anticuado.

—Yo no soy anticuado, Lucas lo es...mi padre jamás la dejará, hagas lo que hagas, a tí es capaz de matarte si algo te sale mal y te descubre, te sugiero que no hagas nada en contra de Aurora, y a mi no me involucres en tus locuras.

—Está bien, te callas entonces, eres un cobarde...si me delatas diré que fue tu plan...

—¡¿Quéee.... estás loca...?! —Liam huyó de la presencia de Corina como si era un dragón que venía a devorar su pensamiento.

***

Aurora leía plácidamente durante la noche, en algunos momentos venían pensamientos sobre Lucas y sonreía encantada sabiendo que él estaba pendiente de ella.

Cerró el libro en un suspiro y no pudo evitar recordar el dorso de sus manos acariciando sus mejillas tras su mirada cristalina.

—Te sentirás muy orgulloso de mi, Lucas. —dijo dibujando una hermosa sonrisa en el rostro, y cuando más soñadora estaba, una llamada la saco de su idilio poniéndose de pie— ¿Mamá?, ¿Quéee? ¿Cómo que...? ¿Estás en Nueva York...? —un silencio le sobrevino mientras se sentaba nuevamente con desgano en la cama— Bueno... mañana te veo en la empresa.

...

Lucas tomaba una copa y Peter solo esperaba escuchar lo que tenía que decirle sosteniendo un vaso de agua.

—Me dijiste que viniera y ahora estás callado. ¿Qué le pasó a mi amigo? Lucas Miller nunca se calla cuando algo le molesta o lo inquieta.

—Quiero casarme con Aurora, me urge hacerlo...—Peter puso el vaso y lo observó brevemente— No me veas así, bien sabes que no es tonterías, es mi deseó, la necesito... pensé que podía aguantarme, es muy joven...

—No sabía que fuera serio para tí...

—¿Cómo puedes pensar que no, o dudarlo? Creí que me conocías...

—Es joven sí, pero es una mujer hermosa...ha crecido en poco tiempo, viste y se comporta como adulta tras las exigencia del día a día. ¿Ella sabe la magnitud de ésto que dices?

—Ella sabe que la amo...

—La amas, pensé que no lo escucharía de tí...

—Ella tiene miedo....aunque lo dudes, yo también, pero estoy seguro de lo que quiero. Su madre quiere que regrese desde que supo que soy el mismo que la conoció en su ciudad, cree que le haría daño.

—Tu no le harías daño, Aurora es una chica hermosa que sabe que contigo todo es seguro.

—Hay algo que no sabes, te lo diré, pero debes callarlo....

—Lo haré...soy tu amigo.

—Ella es hija del señor Visconti.

—¡¿En serio, Lucas....? Noooo, es una locura.

—El no lo sabe, —interrumpió ante la actitud sorpresiva de Peter— ella sí, dice no quererlo, pero sí. Yo estoy seguro que cuando el señor Visconti lo sepa, todo se complicará. El querrá tenerla, Aurora es una chica especial y yo no voy a perderla.

—Todo es tan extraño. —dijo Peter— Pareciera no estar escuchando a mi amigo, a mí hermano. Siempre supe que alguien llegaría a tí.

—Necesito convencerla que yo soy el hombre de su vida, que me vea no como una opción, no lo sabes Peter, pero Aurora se ha convertido en mi compañera y creo que ella no lo sabe.

—Tomátelo con calma, no la apresures.

—Estoy nervioso de pensar que yo nunca la conquiste, sería un castigo por ser tan ajeno a los sentimientos de algunas mujeres que me han querido, a eso temo. Ya ves que dicen que todo se paga en esta vida.

—Ahhh...pero lo reconoces.

—Lo reconozco Peter...solo que no había amado...nunca, Aurora me vuelve loco. —un mensaje en el teléfono lo hizo salir de contexto.

_¿Sucede algo, Lucas? —pregunto su amigo al verlo fijo en la pantalla de su teléfono.

—La madre de Aurora está en la ciudad, quiere regresarla...no lo voy a permitir, nunca. —dijo mientras servía una copa— hablaré claro con sus padres.

***

La mañana llegó y la madre de Aurora esperaba por el señor Miller desde muy temprano en su empresa, estaba fija en su pensamiento cuando éste la interrumpió.

—Señora Clark.... qué sorpresa, Aurora está en la universidad. —dijo con cortesía y caballerosidad — es posible que hoy venga un poco temprano.

—Sé que mi hija está en la universidad, vine a conversar con usted. —dijo sosteniendo una mirada de desconfianza.

—Pase a mi oficina, —Lucas se mostró aún más atento y cordial— adelante.

—Gracias. —respondió ella de forma seca y cortante.

—Siéntese por favor. —al verla cómoda le preguntó— dígame, ¿Qué se le ofrece?

—Vine porque quiero que Aurora regrese a casa, —él la miró fijo.

—¿Por qué quiere que Aurora deje su carrera, su trabajo,..sus sueños? Hablemos con claridad.




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