Armonía.
- Ayer no pudiste presenciar lo que hizo Gabe Scott durante el partido de bienvenida, pero aquí estoy yo para contártelo. - dice mientras nos sentamos en una de las mesas de la cafetería.
Mi parlanchina amiga se llama April Stone, castaña, ojos azules, 1.50 de estatura, uno de los mejores promedios de toda la escuela, la conozco desde... casi siempre, desde que estábamos en jardín y peleamos por ver quien, hacia la serpiente de plastilina más grande de toda el aula, recuerdo que le pedí alrededor de 5 cajas plastilina a mi madre, me regaño después al enterarse en como la había utilizado, pero por fortunio gane aquella competencia dejando a April desconsolada, al verla triste decidí partir aquella serpiente y dale la mitad, no soy una perra sin corazón.
- ¡Dios, debiste verlo cuando se quitó el suéter! - pasea sus manos por todo el cuerpo en señal de lujuria.
Gabe Scott es su Crush desde que comenzamos secundaria, él es un año mayor que nosotras y debo decir que el chico es bastante apuesto, pero no tanto como el hermano de Daenerys. Pero según lo que me cuenta el chico solo quito su camisa y todas derritieron al verlo.
- ¿Qué tal si te acercas a él y lo invitas a salir? - le propongo mientras muerdo una de mis tiras de zanahoria, a mi madre le gusta que coma saludable.
- ¿acaso estás loca? Eso sería un suicidio total, porque no creo que le gusten las chicas Nerds. - la expresión de su rostro cambia de uno de emoción a uno de tristeza.
- Ni siquiera lo has intentado April, solo mírate, eres guapa e inteligente, si yo fuera un hombre ese sería el tipo de chica que me gustaría.
- Gracias, pero mira el tipo de chica que se le acerca. - hace una mueca con su boca dándome a entender que mirara en dirección a Gabe. Lo hago y no muy lejos de nosotras se encontraba el susodicho hablando con tres porristas, se notaba claramente que le estaban coqueteando, porque cada vez que una hablaba tocaba alguna parte de su cuerpo como, pecho, brazo y pierna.
- No es por hablar mal de ninguna de las mujeres, pero se les nota a leguas que le están coqueteando descaradamente. - digo encogiéndome de hombros.
- Y él les sigue el juego. - April deja caer su cabeza sobre la mesa dejando escuchar un ruido seco.
- ¿Qué le pasa a April? - a nuestro lado se sienta Victoria Navarro y Ethan Navarro, son hermanos mellizos, en lo único que se diferencian ambos es que Victoria es lesbiana y le gusta parecer como un hombre y Ethan es gay, y además le gusta vestirse como mujer. Se dieron cuenta de que hacían parte de la comunidad desde muy pequeños y sus padres los apoyaron en todo, pero como la sociedad es un poco... Catolica, para no ofender a nadie, la sociedad es egoísta cuando se trata de estas situaciones
- Parece constipada. - comenta Ethan con su tono de voz afeminado.
- Está sufriendo porque Gabe Scott no le hace caso. - le respondo. Los hermanos Navarro colocan sus ojos en blanco.
- En vez de estar aquí lamentándote ¿Por qué no vas y te acercas? - le pregunta Victoria con obviedad, pero April sigue en un estado de negación.
- Lo intenté y tuve el mismo resultado. - le informo encogiéndome de hombros. - es como estar hablando con una pared.
- Pues a mí sí me va a escuchar. - pude ver a Ethan muy decidió con lo que iba a hacer. - mírame April. - no obtiene respuesta alguna de la chica. - ¡April! - exclamo con una voz varonil, todo a nuestro alrededor entra en un profundo silencio, decido mirar a mi alrededor y las miradas de todo el alumnado estaba sobre nosotras, incluso April levanto la mirada al escuchar a Ethan varonil. - diablos April, haces que mi voz sea como la de un macho. - sacude su cuerpo como si le diera asco.
- Por un momento pensé que el diablo me había venido a buscar. - dice April.
- Es tu culpa, pero ahora no hablemos de eso, la cosa es que te gusta un chico y estas esperando a que suceda como en esas novelas cliché que lees, déjame decirte que esas protagonistas son ridículas y sin sentido, si tu realmente quieres algo ve por ello, si te gusta Gabe Scott ve y dile, hazte notar, hazte desear, y para eso estoy yo. - Ethan sonríe como el gato de Alicia en el país de las maravillas.
- Esto va a ser muy interesante. - me inclino hacia delante para escuchar todo con claridad.
- Si quieres también puedes utilizar la técnica. - se fija en mí.
- No gracias, pronto moriré como para tener novio ahora. - respondo.
- ¡Armonía! - dicen todos al unísono en señal de reproche
- No vuelvas a decir esa idiotez. - me señala amenazante con el dedo Victoria. - sabes que eres muy importante para nosotros.
- Lo sé chicos, pero deben estar conscientes de que en cualquier momento no estaré con ustedes.
- No hablemos de eso ¿Quieren? Es un tema que me pone muy nerviosa. - dice April casi que, sorbiendo los mocos, porque ella asistió a una terapia psicológica donde debían ir mis familiares, pero solo fue mi madre y April, cuando sucedió no tenía mucha confianza con Victoria y Ethan, pero si los concientice de que mi tiempo aquí podía ser muy corto. - mejor dime cómo puedo conquistar a Gabe.
- Fácil, viéndote a simple vista eres una chica muy hermosa, tus curvas no son prominentes, pero se logra ver tu silueta. Y he notado que al chico le gustan chicas bajitas, punto a favor. - aplaude feliz. - entonces la estrategia es la siguiente, vas a frecuentar los lugares donde él está, pero, ¡Ojo!, sin llegar a acosar, ya que la idea es que él te vea constantemente y se te le quedes grabada en su mente, podrás pavonearte cuantas veces quieras. Luego cuando ya creas que es suficiente, te le acercaras y le pedirás algo, lo que se te venga a esa cabecita de Einstein. - mientras que Ethan hablaba yo simplemente imaginaba todo como una misión espía.
- Espera un momento. - interfiero. - hallo una falla en tu lógica, y es que le estás diciendo a April que no actué como en las novelas cliché y que sea ella quien dé el primer paso, pero... no lo está haciendo.