11.Los planes de Sasha

Llevamos rato mirándonos de la cara a la puerta y viceversa. Sin saber que decir. Lo que acabo de descubrir allá arriba me ha dejado completamente descolocada.

Jules y Freya, Freya engaña a Patrick con Jules. Se supone que Freya y ese otro ser se odian.

—¿Tú creés que nos hayan escuchado?

Sasha observa un punto fijo en el suelo.

—No, descuida. Y si así fue no le darían mucha importancia, no les conviene levantar sospechas.

No entendí mucho lo que me dijo pero asiento.

—¿Tú...lo sabías?—Pregunto.

Me mira de reojo.

—Si.

Se encoje de hombros.

—De hecho, todos lo saben. Y mientras Jules y la perra de Freya se revuelcan creyendo que nadie sabe su pequeño secretito...

>>Los demás solo fingen no saberlo.

Entonces a mi mente vienen las palabras de Rob «"A la hora de apuñalarte por la espalda no se lo piensan dos veces"», pff ya veo, vaya amigos.

Patrick es un imbécil como todos los demás. Pero aún así no puedo evitar sentir pena por él. En medio de toda esa estupidez, si hay algo que lo caracteriza de los otros chicos, esa es su fidelidad y gran amor—Que no se molesta en ocultar— hacia Freya. Fidelidad y amor a la misma chica que le pega los cuernos con uno de sus mejores amigos.

—¿No se supone que son amistades?, Siempre andan jactándose de que más que amigos son familia y que son un equipo.

De pronto hace mucho frío. Froto mis manos para darles calor.

—No Haz. Como dicen por ahí “en el mundo no hay amigos"

La miro con el ceño fruncido

—En realidad eso lo dice la Biblia.

—Ya lo sabía

Ríe.

—Me da pena por O'Donnell, ¿sabes?.

Su voz tiene genuina pena
en su tono.

—¿Enserio?, disculpa que te diga esto pero... Tú también formas parte de esa mentira, y posiblemente yo también, pero la diferencia es que yo no tengo ningún tipo de cercanía con él, tú en cambio...eres su amiga y no le sacas de esa farza de la que nadie se ha dignado a sacarle.

Sasha jadea indignada.

—Nono. Primero: yo no soy amiga de O'Donnell, solo somos conocidos. Entiendo lo que me dices. Pero no me corresponde a mi decirle que su novia le es infiel con su mejor amigo.

Se pone de píe y examina los 
pósters como si buscara alguna imperfección en ellos.

>>Otra cosa es, que Patrick no me creería. Apenas llevo dos semanas conociéndolo. Si tuvieras un novio de tres años y una prácticamente desconocida para tí viniera a decirte que te es infiel con tu también, mejor amiga de toda la vida...

Se voltea para darme la cara.

>>¿Le creerías?

Vacilo

Sasha hace un chasquido con sus dedos.

—No hace falta que respondas. Ahí está la respuesta. No. 
No lo harías.

En parte no lo haría y en parte si. Creo que si yo estuviera en esa situación le daría el beneficio de la duda. No es la primera vez que suceden casos como ese. En realidad eso de que el novio o novia engañe con su mejor amigo/a está trinchadísimo.

En lugar de decirle mi planteamiento prefiero zanjar el tema por hoy.

Al Don sueño le dió ganas de 
llegar.

—Será mejor que nos 
durmieramos ya.

Entre bostezos le digo.

—Si, mi cuerpo está que pide descanso. Y mañana tenemos 
fiesta

Hace un bailecito con sus caderas.

—Tendrás fiesta. Querrás decir—Le doy una mirada de cejas al vuelo.

Ella imita mi jesto y se cruza de brazos.

—Tendremos. No estarás pensando quedarte aquí hasta que pase, ¿o si?

Iba a decirle que eso era exactamente lo que pretendía hacer, pero ni siquiera me deja tiempo a replicar.

—Porque yo no te lo permitiré—Se acerca y toma unos cuantos mechones de mi pelo.—Tengo muchos planes para nosotras mañana, en especial para tí.

Sonríe con emoción.

>>Eres como un diamante en bruto Hazel, ¿no te han dicho que eres muy hermosa?. Ya estoy ansioso por sacar a relucir esa belleza al aire exterior.

Habla de una manera que me hace sentir un poco cohibida. ¿hermosa, yo?, Si claro. Juraría que sus ojos lucen terroríficamente radiantes, parece una científica loca hablando sobre sus planes de conquistar el mundo, nada más le faltó el “Wuajajajaaa".

Esto último me hace reír.

—Veo que a tí también te emociona la idea—Aplaude bajito.

¿Qué?

—Nonono—Niego.

Pero Sasha ni siquiera me pone asunto. ¿Dónde está?, de la nada ya no la ve...

Oh, está acostada.

Mi frente se arruga, a este paso quedaré vieja antes de tiempo.  ¿Cuándo rayos llegó ahí?

Ya no quiero pensar tanto. Mejor me voy a acostar.

Que mañana pase lo que tenga que pasar. Si Sasha quiere ponerme un vestido corto-zorra la dejaré hacer. Tal vez...no sea malo sentirse bonita por un día.

Y con ese último pensamiento me quedo profundamente dormida...