PARTE 34

Con el paso de nuestros ciclos de la carrera Harper pensó que estaba con un amigo mío por lo que decidió retirarse de la casa y pensar bien las cosas. Por mi parte estoy estudiando porque se aproximan otros exámenes importantes y no puedo detenerme a pensar en lo mío y Harper. Estoy sentada en mi escritorio, rodeada de libros y apuntes, tratando de concentrarme en mis estudios para los próximos exámenes. Sin embargo, mi mente no deja de divagar hacia Harper y la situación que estamos atravesando.

Me siento confundida y un poco perdida. Harper decidió tomar distancia y pensar las cosas, y aunque lo entiendo, no puedo evitar sentirme ansiosa y preocupada por lo que pueda suceder entre nosotros. Me pregunto si tal vez cometí algún error o si hay algo que pueda hacer para arreglar las cosas.

Respiro hondo y cierro los ojos por un momento, tratando de encontrar calma en medio de este torbellino de pensamientos. Sé que necesito concentrarme en mis estudios, pero es difícil cuando mi corazón está dividido entre mis responsabilidades académicas y mi relación con Harper.

Decido darme un breve descanso y me levanto de la silla. Camino por la habitación, tratando de liberar la tensión en mi cuerpo. Llego hasta la ventana y contemplo la vista del atardecer. El cielo se tiñe de colores cálidos y tranquilos, y me doy cuenta de que debo encontrar esa misma tranquilidad dentro de mí.

_Respira, Ellie. Solo respira.- me digo a mí misma en un susurro. Cierro los ojos y me concentro en mi respiración, inhalando profundamente y exhalando lentamente.

Es normal sentirse abrumada en momentos como este. Harper y yo hemos pasado por muchas cosas juntos, y es natural que haya momentos de duda y reflexión. Pero también sé que lo que tenemos es especial, y que merece ser cuidado y valorado.

Decido que no puedo quedarme aquí pensando en el qué pasará. Necesito hablar con Harper, entender sus pensamientos y sentimientos, y expresar los míos también. Quiero que sepamos que estamos juntos en esto, que podemos apoyarnos mutuamente en nuestras metas y sueños.

Con esa determinación en mente, regreso a mi escritorio y retomo mis estudios. Esta vez, trato de enfocarme en el material y dejar de lado las preocupaciones por un rato. Sé que la conversación con Harper tendrá su momento adecuado, y mientras tanto, debo concentrarme en mis objetivos académicos.

El estrés sigue presente, pero ahora tengo una sensación de esperanza y determinación. Confío en que, sin importar lo que depare el futuro, enfrentaremos juntos cualquier desafío que se presente.

Después de todo, el amor verdadero es una fuerza poderosa, capaz de superar obstáculos y de fortalecernos en cada paso del camino. ¿No es así?.

Termino mis exámenes y recibo la llamada de Harper, estoy nerviosa mientras camino hacia. Harper me citó aquí para hablar sobre la cafetería y la pastelería, pero me pidió que nos comportemos como si no nos conociéramos. No entiendo muy bien la razón, pero decido seguirle el juego.

Llego al parque y veo a un chico sentado en un banco, mirando hacia otro lado. Me acerco con paso lento y me paro frente a él, esperando a que me mire. Cuando finalmente lo hace, le sonrío.

_Hola, ¿eres Harper?

_Sí, soy Harper. ¿Tú eres Ellie?

_Sí, así es. ¿Qué querías hablar sobre la cafetería y la pastelería?

_Ah, sí, claro. Bueno, primero que nada, quería decirte que me encanta lo que haces con los postres. Son deliciosos.

_¡Gracias! Me alegra que te gusten. Estoy muy apasionada por la pastelería.

_Se nota. Y creo que eso es exactamente lo que necesitamos en la cafetería. Más postres deliciosos para nuestros clientes.- sonríe.

_Estoy de acuerdo. Ya tengo algunas ideas de nuevos postres que puedo agregar al menú.- esta situación me causa mucha risa.

_Eso suena genial. Y también quería preguntarte si estarías interesada en colaborar más conmigo en la cafetería.

_¡Claro! Me encantaría. Además, creo que nuestras habilidades se complementarían muy bien.

_Así es. Creo que podríamos lograr cosas asombrosas juntos. Y, ya sabes, podríamos también pasar más tiempo juntos fuera del trabajo.

_Sí, eso suena bien. Aunque trabajar juntos puede ser complicado a veces, estoy segura de que podemos manejarlo.

_Estoy seguro de que sí. Y sabes, hay algo más que quiero decirte.

_¿Qué es?

_Que desde que te conocí, he sentido algo especial por ti. Y me gustaría conocerte mejor, fuera de la cafetería y la pastelería.

_¿En serio?.- finjo sorpresa.

_Sí, en serio. ¿Te gustaría salir conmigo, tal vez para tomar un café?

_Me encantaría.- sonrío.

Nos quedamos mirándonos por un momento, sintiendo la conexión entre nosotros. Aunque estamos actuando como si nos conociéramos por primera vez, la verdad es que nuestros sentimientos son genuinos. Es un poco extraño, pero también emocionante, con un toque de risa.

_Entonces, ¿mañana por la tarde?

_Suena perfecto.

Nos ponemos de pie y nos despedimos formalmente, como si esta fuera la primera vez que nos encontramos. Mientras caminamos en direcciones opuestas, Harper se detiene de repente y da media vuelta. Lo veo acercarse hacia mí, con una mirada de súplica en sus ojos.