Una decisión, un gran error.

Capitulo 16

Llevamos apenas dos minutos arriba del juego y ya perdí la cuenta de cuantas veces Emiliano grita como si fuera el último momento de su vida. Sostiene mi mano y parece que me va a romper los huesos no le digo nada, pero si duele.

Vamos por la última subida y espero que esto termine pronto o terminare sin mano el resto de mi vida.

  • ¡Ay dios!, ¡Voy a morir!, James sé que nunca te lo dije, pero…  la verdad te ves ridícula con tu uniforme de trabajo- pone su cabeza en mi hombro y yo lo empujo
  • Ay si este juego no te mata lo are yo- subo el tono de mi voz
  • Lo lamento, pero quería decir esto antes de morir y otra cosa más…

Demonios siempre interrumpen los momentos en los que una persona me quiere decir algo importante, siento como todo mi estómago se sube hasta la cabeza y siento unas cosquillas en mi vientre. La bajada de este juego se siente peor que la subida.

Después de una bajada muy fuerte Emiliano tiene una expresión muy rara y no habla, sus ojos azules están en un tono que no se puede describir.

Permanece quieto unos minutos y como no veo sus intenciones de bajarse lo jalo y no bajo yo.

  • ¿Quieres la segunda ronda?
  • Ni loco, nunca en mi vida me volveré a subir a un juego así prefiero arrancarme las pestañas una por una.
  • Eso es más doloroso, pero como gustes- me encojo de hombros
  • Es más soportable que esto.
  • ¿Quieres entonces ir al carrusel? - me burlo
  • Es un juego para niños no es divertido, pero como quieras, pero primero vamos a comer algo, te parece bien ¿una pizza?
  • No lo preguntes y vamos ya- lo jalo del brazo

Nos dirigimos al puesto de comida, todo se me antoja, pero prefiero una pizza por el momento, tenemos toda una noche para poder probar estos platillos. Pero Emiliano como siempre pide para los dos.

  • ¿Por qué no me preguntas de que quería yo la pizza? - menciono con enojo
  • Porque se lo aburrida que eres y vas a elegir hawaiana, ¿no?

Me sorprende al saber como es que no se le olvido el sabor que me gusta a mí.

  • Esta pizza es grandiosa
  • Grandiosamente aburrida- se burla

Pongo mis ojos en blanco y mejor me pongo a comer calladita me veo más bonita.

Emiliano parece que nunca ha comido, con tres mordidas da fin a la rebanada y solo me volteo un segundo y ya tiene un pedazo de la mía.

  • Deberías dejar ese mal habito de quitarme lo que estoy comiendo- me burlo
  • Y tu deberías tener el habito de comer y rápido y no como pollo- se ríe
  • ¿Siempre vamos a estar discutiendo?
  • No siempre querida habrá buenos momentos- sonríe
  • Eres un asqueroso- hago una mueca de asco
  • Tu pensaste así yo no dije nada- se encoje de hombros

Cambio de tema porque eso es cierto y no quiero sentirme incomoda.

  • ¿Estás listo para el carrusel?
  • Primero, no quieras evitar el tema- sonríe- segundo aun no puedo creer que vayamos hacer eso es para niños.
  • Deja de quejarte y vamos.

Nos dirigimos al carrusel y a diferencia del otro juego hay poca gente pasaremos rápido, así es amigos, esos somos nosotros unos universitarios de veinte años queriendo subir a un juego para niños de cinco años. Es estupendo.

  • ¡Yo quiero ese caballito! - escucho a Emiliano mientras va a dirección de ese caballo blanco con detalles azules
  • Si claro un juego muy aburrido, yo me subo en el de enfrente- es un caballo café muy bonito
  • Déjame elegir un caballo mínimo

Yo sonrió, se ve muy gracioso. El juego se siente normal, pero está muy divertido al menos mi mano disfruta la comodidad de no estar aplastada.

A diferencia del anterior, Emiliano está gritando como loco:

  • ¡Más!, ¡Esta súper divertido! - alza las manos y se balancea como si el caballo fuera real.
  • Es un juego para niños tranquilízate- me burlo
  • ¡Ashley!, tenemos que repetir esto.
  • Olvídalo
  • Toda la noche estaremos aquí, no me bajare jamás.

Sera una noche grandiosa.

Terminaron los minutos que teníamos que estar en el juego, Emiliano parece niño chiquito cuando no le compras su juguete. Pero logre bajarlo o de lo contrario enserio pasaríamos toda la noche en ese juego.

  • ¿Por qué esos juegos no pueden estar en cualquier parte del mundo? - dice con tristeza
  • Porque no hay muchos Emilianos en este mundo y es un alivio- suspiro

Me pregunto si puedo llegar a sentir algo por él, es cierto no hay muchos Emilianos solo hay una Emiliano que se emocione por subir a un carrusel.




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