Capítulo 24

Atenas Ivanov

Ha pasado solo dos días desde que les había dicho a mis niñas sobre su padre, la reacción de ellas al saber que había hablo con su padre el cual acepto verlas, conocerlas fue un momento épico, feliz y llena de mucha emoción estuvieron abrazadas a mi durante un largo tiempo mientras asimilaban la noticia. Aunque para mí todavía me parecía un error, porque solo quería a mis niñas para mí, aun tengo esa espinilla en mi cabeza que no me deja tranquila pensando que Steve cuando las conozca quiera quitármelas, alejarlas de mí. También se que no puedo pensar de esa manera, pero no podía evitarlo por la manera en la que me ha tratado Steve sé que él es capaz de todo.

Me encontraba en el hospital visitando a Zachary, levanto la mirada de mi celular ya que estaba viendo la notificación del décimo mensaje que me enviaba Steve, miro a mi hermana con un semblante mucho mejor, ya no se encontraba pálida, sonreía mucho y reía mientras hablaba con mis pequeñas que le contaban felizmente que su papa acepto conocerlas, siento mi corazón latir con fuerza contra mi pecho al darme cuenta justamente ahora que mis bebe y el tienen bastante parecido, cosa que no veía antes, físicamente tiene de Steve, la forma de sus ojitos y el color verde, sus naricitas y la forma de sus labios, de mi solo tienen el cabello.

Hablo solo físicamente, porque que la inteligencia la sacaron de mí, porque Steve no es inteligente, las neuronas se le ahogaron en vino al pobre.

Suspiro sonoramente con fastidio, Zachary me mira alarmada le hace señas a Calex para que se lleve a las niñas, pero él se queda estático sin entender nada, la miro con una ceja alzada, ella se queda mirándome seriamente mientras alza su ceja derecha, me esta dando a entender que tenemos que hablar, ruedo los ojos y asiento.

- Nunca he podido entender esa manera que tienen de comunicarse sin decir una palabra – dice Calex confundido y con algo de recelo fingido.

Tanto Zachary como yo, soltamos varias carcajadas.

- Es una habilidad que desarrollamos con el tiempo, eres un envidioso rubio teñido -le saco la lengua a mi amigo, el se hace el ofendido.

- ¡Para tu información soy rubio natural!, ¡Pez globo! -contrataca.

Zachary y mis pequeñas lo que hacen es reírse mientras Calex y yo seguíamos con nuestra tonta discusión que me parecía graciosa, como también solo lo hacíamos para que Zachary tuviera buen ánimo.

- ¡Soy un pez globo sexy!, ¡Tu seguirás teñido!

Calex me saca el dedo del medio, mi hermana no duda en regañarlos porque eso no se hace frente a sus sobrinas, el la mira como perrito regañado, reí bajo, estoy feliz de que ambos se dieron la oportunidad de enamorase, son felices que están juntos apoyándose sin importar lo duro e injusto que esta siendo la vida para ellos.

- Lleva a las niñas por algo rico a la cafetería, por favor cariño -pide con ternura mi hermana.

Veo como mi amigo se derrite ante la manera en la que ella lo llama, asiente todo feliz e enamorado.

- Vamos mis pequeños terremotos, vamos a la cafetería -mi amigo llama a mis bebes, ellas todas felices se bajan de la camilla.

Toman a su tío de las manos, luego me miran y sonríen todas emocionadas porque saldrán a la cafetería.

- Venimos ahola mami -me avisa Hope, tanto ella como su hermana se despiden con la manito.

- Vayan con cuidado y no molesten mucho al Tío Calex

Aviso mirándolas con advertencia, ellas ríen y asienten los tres salen de la habitación, me quedo unos segundos viendo la puerta que se quedó semi abierta.

- ¡Mi gordita bella! -me llama Zachary.

Pongo mi mirada en ella, mi amiga se encontraba sonriéndome con ternura, aunque su mirada gritaba preocupación, ella me hace señas para que me acerque a la silla que esta al lado de su camilla, me levanto del pequeño sillón y me siento donde me lo esta pidiendo.

- Corazón, ¿es cierto lo que me dijeron mis pequeños ángeles? -pregunta con suavidad, mientras toma mi mano y le da pequeñas caricias.

Suelto un respiro cansado y asiento.

- Si, es cierto, pero lo hago por ellas, ellas tienen la ilusión de conocer a su padre y él también quiere conocerlas

- Lo entiendo mi corazón, pero eso no es realmente lo que te preocupa, hay algo más, te conozco perfectamente

Odio que ella me conozca tan bien, pero a ella nunca podría mentirle, asiento dándole la razón, me quedo unos segundos viendo como su mano acaricia la mía dándome apoyo como siempre.

- Tengo...-hago una pausa- Tengo miedo de que vea lo brillantes, amorosas y buenas que son mis bebes y me las quiera quitar, no podría vivir con eso...- ella niega y lleva su mano algo fría por el frio de la habitación y acaricia mi mejilla volviéndola cálida.

- Por todo lo que me ha contado del imbécil donador de espermas creo que es normal que te sientas así, pero aquí estoy yo y Calex también, nunca vamos a permitir algo así

Rei mirándola, lo sabía a la perfección.

- Le pateamos ese culo de rico que tiene para que vea con mi hermana y mis sobrinas nadie se mete

- Esa seria una buena idea -apoyo la locura de mi hermana, seguimos hablando de cosas triviales olvidándome de la preocupación que sentía, Calex vuelve con las niñas que habían comprado varias cositas para comer.

Sonrió al ver como mis niñas nos enseñan lo que su tío les compro, aprovecho que no tienen la atención en mí, saco mi celular lo desbloqueo, me adentro a los mensajes viendo cuan desesperado esta porque no le contesto a Steve, suspiro comienzo a escribir, cuando lo tengo listo me quedo mirando lo que había escrito.

Mensaje de Texto para Tomlinson

Podrás conocer a mis niñas el sábado, en el lugar Helados de la abuela en la Ave 71 Broadway... como a las 2:00 de la tarde, Por favor no llegar tarde. Enviado ✔️​✔️​

Ya había enviado el mensaje así que no había vuelta atrás, el sábado mis niñas conocerán a su padre, solo espero que todo salga bien, guardo mi celular en mi bolsillo trasero de mi pantalón, las manos me temblaban un poco, siento mi celular vibrar, pero no quería ver su respuesta. Me quedo con mi pequeña familia pasando una buena tarde, aunque estuviéramos en una habitación de hospital.