Una hibrida perdida: Hija de la luna.

Capitulo 16

- Shia, baja a comer  - Andres me llamaba desde el otro lado de la puerta, deje todo en su lugar para luego salir.

- De acuerdo vamos - dije, Andres asintio y nos dirigimos al comedor.

Escaleras abajo un sabor amargo se hiso presente en mi boca, seguido de un fuerte mareo que me hiso tambalear y sostenerme del barandar Andres se acerco alterado, me sostuvo para evitar que callera.

- Shia, ¿que pasa?, ¿estas bien? - pregunto alterado.

- Si solo fue un mareo - dije.

- Ultimamente no has estado bien, ¿que sucede? - pregunto una vez mas.

- No lo se - dije y era cierto no sabia que pasaba, Andres me miro extrañado y dudoso por mi respuesta.

- Bueno bayamos a cenar antes de que se enfrie la comida - dijo, yo solo accedi sin decir nada mas.

Llegamos al comedor, el mal momento ya habia pasado me sentia mejor aunque no lo suficiente, ultimamente no eh dormido bien, me despierto en las madrugadas por sueños que no logro decifrar pero que siempre traen consigo a un chica de cabellos castaños que se aleja de mi, no lo entiendo, pero algo me dice que es ella. 

- Planeta tierra llamando a Shia ¿estas ahy? - decia Jesus mientras me sacaba de mis pensamientos.

- Dime - dije mis hermanos me miraron extrañados.

- Se te va a enfriar la comida - decia Jesus, y hasta ahora no me habia dado cuenta que ya habian servido la cena - espero que hoy logres dormil tus ojeras se empiezan a notar y no es bueno ya que eres muy blanca para escondelas - termino de decir.

- Lo se, pero no se que pasa, ni yo lo puedo entender, ultimam..... - mis palabras se frenaron mi vista se encontaba borrosa y mis parpados pesaban como nunca.

- Shia ¿que sucede?, ¿que paso?, Jesus trae algo..... - fue lo ultimo que alcance a escuchar antes de caer en una oscuridad que se adueñaba de cada uno de los rincones.

{ Me encontraba en un bosque caminando hacia un rumbo desconocido, llegue a una laguna, esta se encontraba iluminada por la luna, alce mi vista a esta que se encontraba resplandeciente, nubes oscuras la rodeanban tratando de opacar su brillo lo cual se les hacia dificil, pero de un momento a otro ese brillo se apago, las nubes tomaron paso a cubrir cada uno de sus extremos.

Una mujer salia de entre los arboles dirigiendose hacia mi con un hermoso vestido blanco que daba al suelo con una hermosa silueta al compas del  ilgero viento que  abarcaba la zona.

-Hija mia - dijo la muje dejando ver su rostro el cual me era familiar.

-Te conosco - dije, una pequeña sonrisa se posaba en su rostros - esto es un sueño como todos los demas -decia mientras agarraba mi cabeza con ambas manos.

- Debes aprender a interpretar tus sueños, si lo haces sera un gran punto a tu favor - decia de manera dulce lo cual me confundio.

- Porque no es tan extraño como la ultima vez - dije, la mujer se mostro alterada a mis palabras.

- Los humanos se han vueltos ignorantes, se rigen a sus propias reglas, ignoran todo lo que saben que existe, eso no es lo que les enseñe - dijo la mujer exaltada para luego desaparecer.

El intenso brillo de la luna se hiso presente una vez mas iluminando la hermosa laguna < solo cuando su brillo se apaga > pensaba mientras caminaba por los alrededores.

De un momento a otro me encontraba frente a una cabaña en medio de un bosque totalmente distinto al anterior, la intensa luz del sol daba una sensacion de paz.

El llanto de un bebe provenia de la cabaña, me hacerque a observar discretamente por una pequeña ventana, una mujer rubia mesia al bebe en sus brazos para calmar su llanto, una sensacion de paz y felicidad se apadero de mi, pero de un instante todos esos sentimientos se esfumaron, un hombre mayor de cabellos canosos entraba exaltado a la cabaña.

- El momento a llegado - decia el hombre mientras se acercaba a la mujer - debes ser valiente por tu bebe - la mujer solo asentia sin decir nada al respecto en ella se notaba la preocupacion a las palabras de aquel hombre.

El escenario cambio, el bosque se incendiaba y la luna era testigo de ello, miles de hombre o mas bien bestias corrian por los alrededores como si buscaran a alguien, mi vista se fijo en aquella rubia que corria con su bebe en brazos.

Corri tras ella hasta que llegamos a un laguna en donde la luz de la hermosa luna resplandia, donde las llamas no lograban pasar, y donde aquellas bestias no lograban llegar. 

La mujer callo de rodillas al suelo frente a la laguna exclamando palabras en un idioma que no lograba entender, de un momento a otro la mujer dejo a su bebe en el suelo y se sumergio en las aguas de aquella laguna, que al instante se torno de un rojo tan intenso como la sangre.

El bebe lloraba desesperadamente, me acerque a este con la intencion de tomarlo en mis brazos y sacarlo de aquel sitio, era una hermosa niña de cabellos blancos que lloraba por  su madre, al tocarla la pequeña se convirtio en polvo un polvo que se disperso con el viento sin dejar ningun rastro, todo dio vueltas a mi alrededor mi pecho dolia y no sabia el porque,  todo era tan confuso.

Ahora me encontraba en un inmenso castillo, recorria los pasillos como si los conociera a la perfeccion, aunque ni yo misma sabia a donde me dirigia al cruzar por un pasillo me encontre con una enorme sala repleta de cuadros.

Cada una de las pinturas reflejaba un sentimiento distinto, tristeza, furia, miedo, desesperacion, angustia, olvido......




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