Una hibrida perdida: Hija de la luna.

Capitulo 26

Sentia las miradas de todos posadas en mi, me sentia estupida ante todos, era la unica que no sabia que Damian tenia meses engañandome, si no fuera por que Ada me lo acababa de contar no me hubiese enterado, mis amigas, Brian, todos lo sabian.

- Shia - la vos de Brian hizo que estallara de furia, gire de inmediato encarandolo.

- Te atreves a venir a dirigirme la palabra, dejame en paz - dije para despues seguir.

- Shia espera, escucha porque lo hice.

- Lo hiciste porque al igual que todos eres un maldito traidor - dije con repulcion.

- Shia - la voz de las chicas se hizo presente haciendo que en mi mente todo tubiera sentido.

- No se atrevan a acercarse - dije frenando sus pasos, observaba sus rostros desfigurados a mi reaccion - Al igual que el son una traidoras, les dije que no queria que nadie lo supiera, no hasta que yo lo contara - dije intentando controlar las lagrimas que amenazaban con salir de mis ojos.

- Lo sentimos, no sabiamos que el se lo diria - se excusaron, haciendo que mi rabia y furia aumentara.

Me acerque a donde Cely se encontraba, esta se encontraba sin exprecion alguna, esperando mi reaccion hacia ella.

Tome el baso de jugo que esta tria en su mano, para luego dirigirme hacia donde Danne.

- Tienes sed querida - dije derramando el jugo en ella, para despues salir de aquel lugar.

-Eres mala - escuchaba la risa de Ada en cada rincon de mi cabeza, esta parecia disfrutar lo que a mi me ocurria.

- Malditasea deja de reirte - grite en mi interior haciendo que esta se callara de inmediato.

Sentia el aldor en mis venas a causa de la sangre que pasaba por ella a gran velocidad mis ojos ardian y una sensacion estraña se hacia presente en ellos.

-Shia, calmate, porfavor calmate - escuchaba como Ada suplicava que  me calmara.

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Una joven castaña observaba el comportamiento de Shia, esta sentia un aldor en su pecho a causa de lo que habia pasado y lo que presentia que pasaria.

- Sandra, ¿estas bien? - preguntaba un joven de cabellos oscuros.

- No lo se Mateo, algo feo se avesima - dijo.

- Mas feo que el problemon que acabamos de presenciar - dijo el joven de forma divertida.

- Ya basta Mateo es enserio - dijo esta para despues dirigirse a la mesa que tenia las bebidas tomo dos bebidas para despues dirigirse hacia donde Shia.

- ¿A donde vas Sandra? - pregunto el joven.

- Vuelvo en un rato - dijo para continuar su camino.

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