- No te resistas chiquilla, si te hago mia podre desposarte sin que nadie se oponga - mis ojos ardian por las lagrimas que acumulaba mientras folcejeaba para soltarme o almenos dar tiempo a que alguien nos encontrara.
- ¡Ada, ayudame ¿como salgo de este lio?! - le grite por la coneccion.
- Lo siento, no puedo ayudarte, aun no estas lista para trasformarte, no lo resistirias, pero sigue resistiendote, no permitas que gane, alguien vendra por nosotras - hablo Ada alterada por la situacion.
- ¡Sueltame maldito estupido! - grite con todas mis fuerza esperando que alguin me escuchara en estos momento deseaba que alguien usara su poder auditivo.
Escupi en su cara lo que solo logro que me abofeteara, se dispuso a romper mi polo con una de sus manos dejandome en brasier, mientras que con la otra inmovilizaba mis manos y con su cuerpo ejerciendo precion entre el mio y la baranda no lograba moverme.
El asqueroso dejaba moretones muy notarios a causa de la succion que hacia en mi cuello mientras repartia sus asquerosos besos en mis pechos mientras que con su mano libre manoseaba mis muslos.
< Juro que si salgo de esta, no volvere a usar ninguna falda por el restro de mi vida > me maldecia intermanamente por acceder a usar esto.
Cuando pense que era mi fin, Alguien tomo al hombre lanzandolo hacia la pare del pasillo, divice a Dorian quien se encontraba golpeando al sujeto con todas sus fuerzas y admito que nunca me senti mas feliz de tener a Dorian cerca.
- ¡Maldito desgraciado! - exclamo Adara quien se acercaba a mi para ayudarme a levantarme y sostenerme de la baranda
- ¡Dorian, alto vas a matarlo! - exclamo Axel alterado al ver que este no media la fuerza en que golpeaba al maldito de Octavio .
- Shia dile que lo suelte - pidio Dante igual alterado ya que no podian quitarcelo de las manos a Dorian, si fuera en otro situacion dejaria que lo mate, pero tampoco queria que se ensuciara las manos con alguien que no valia la pena - solo tu puedes hacer que se detenga antes que sea condenado por asesinar a un Duque - dudaba en que yo lo haria cambiar de parecer, porque aparentemente Dorian tenia mucha ganas de matarlo, pero intentarlo no costaba nada.
- ¡Dorian! - grite con la poco fuerza que tenia haciendo que Dorian frenara el puñetazo que se dirigia a la cara del sujeto - no vale la pena que te manches las manos con alguien como el - dije con dificulta a causa de la precion que el sujeto habia ejercido anteriormente en mi abdomen.
Dorian giro levemente su rosto mirandome a los ojos y para mi sorpresa dejo caer al hombre bruscamente al suelo que inmediatamente fue sujetado por los guardias de la mansion.
< Y con tantos guardias, ninguno fue capas de pasar por este pasillo minutos atras > pense, Dorian se dirijo a mi direccion y me miro de pies a cabeza para despues quitarse su chaqueta de jeans para cubrir mis pechos semi-desnudos, que hasta ahora me daba cuenta que todos me habian visto en estas fachas, mis mejillas ardieron de verguenza.
Despues de colocarme la chaqueta, Dorian recorto la distancia para envolverme en sus brazos, y tengo que admitir que entre ellos me senti segura sin ganas de separme de el, segundos despues de el fuerte abrazo Dorian se separo de mi y al verlo a los ojos note una pequeña lagrima que corria por su mejilla.
- Pordoname - dijo tomandome por sorpresa, Dorian se dejo caer de rodillas al piso abrasandome por la cintura - perdoname por no haberte podio evitar esta mala experiencia, se supone que deberia cuidarte y es lo que menos hecho desde que te conoci - dijo con la vos ronca, intente hacer que se levantara pero se aferro mas a mi, como niño asustado quieriendo ser protegido por su mama.
Me conmovio que se hechara la culpa por lo que habia pasado, esto no era su culpa, todo era culpa del maldito desgraciado de Octavio que no conocia el sentido de la caballerosidad, que pretendia hacerme suya a la fuerza.