Durante el transcurso del último día de vacaciones de verano Liam estuvo bastante nervioso, en la mañana no pudo servirse jugo correctamente del temblor de manos, más tarde no pudo mover una maseta de temblorosas que estaban sus piernas, por la tarde al intentar servirse un poco más de albóndigas tiro una en la cabeza de Tom, en la tarde noche no pudo decidir cual carta tirar en el juego de mesa, por la noche no sabía si ir a dormir o preparar cautelosamente su maleta, preparo todo muy tembloroso y cuando termino no pudo dormir tan fácil, miles de preguntas estaban en su mente, realmente podría ser un buen mago?, que haría si al final todo fue una equivocación y resultaba ser alguien sin magia como su padre o sus conocidos?, como se adaptaría al mundo mágico?, tarde o temprano los ojos de Liam se cerraron y se volvieron a abrir con el dulce sonido de su madre cantando, el primero de septiembre había llegado
-levántate Liam levántate ya o llegaras tarde a tu día especial - cantaba su madre, naturalmente, Liam se levanto de la cama tan nervioso como la noche anterior, se puso la ropa más acorde que encontró y bajo a desayunar
-que pasa hijo? ¿No estás emocionado? – dijo su padre sirviendo algunos hotcakes
-si, creo – dijo Liam sentándose temblorosamente
-queeeeeeeeemociooooon, hoy es un día hermoso! - grito la madre de Liam desde las escaleras – vamos Liam, deprisa termina todo
-claro mamá – Liam tuvo que desayunar rápido, ya que su madre, inconscientemente, presionaba su tiempo.
Al terminar subió por tosas sus cosas y las bajo al auto familiar, en 20 minutos todos estaban en el auto, Tom no se quería perder ni un detalle para cuando fuera su turno el siguiente año, sea como fuera el tiempo era misteriosamente excelente, el día estaba soleado y había pocas nubes en la cielo, cuando llegaron a King's cross eran aproximadamente las 10:40 de la mañana, estacionaron el auto y el padre de Liam le ayudo a bajar todas sus maletas, en la estación tomaron un carrito y pusieron todo ahí, como de costumbre en este tipo de cosas la madre de Liam iba siempre por delante, guiaba a los 3 de una forma especial, casi se podría decir, mágica. 10:50, Liam y los demás se encontraban enfrente de una pared, la madre de Liam suspiro hondo y dijo:
-bien, aquí vamos, Liam, tienes que cruzar por ahí – y apunto a la columna de ladrillos
-mamá, no creo que pueda… es… bueno… una pared – dijo Liam con la voz temblando
-tu puedes, vamos – lo alentó su madre
-ah, ok… si Aura se hace daño será tu culpa – Liam se puso enfrente del muro y empujo su carrito, avanzo lo más rápido que pudo y al acercarse sentía que se estrellaba, estaba cerca del muro y… de pronto estaba en otra parte de la estación, estaba intacto, miro hacia atrás y del mismo muro salió Tom y sus padres
-rápido Liam, tienes que entrar al tren! – dijo su madre casi empujándolo, Liam pudo ver un tren de reojo que al frente ponía "Expreso de Hogwarts" definitivamente ese tren lo llevaría a su destino. 10:55, Liam, entre temblores y nervios tomo sus cosas y dejo el carrito con sus padres
-segura que podre mamá? – pregunto Liam, más nervioso que nunca
-ay, hijo, creo que puedes hacerlo, puedes con esto y más, al principio yo también tenía miedo, pero en cuanto entre a esa escuela, todo se fue, no te preocupes – dijo amorosamente su madre
-está bien, ah, entonces… nos vemos – dijo Liam con un tono un poco triste, Tom abrazo a su hermano más fuerte, como si nunca más se volvieran a ver
-cuídate Liam, te extrañare – dijo su Tom con algunas lagrimas en los ojos
-tratare Tom, tratare, muy bien, entonces, me voy – Tom soltó a Liam y este subió a el vagón más cercano, busco un rato asiento entre toda la gente, pudo encontrar un vagón vacio, así que decidió sentarse ahí, al acomodar su equipaje y sentarse, pudo ver por la ventana que el andén en el que se encontraba era el 93/4, la puerta se abrió y cuando Liam volteo a ver vio a una chica de pelo corto y pelirroja, tenia puesta ya la túnica y el uniforme de Hogwarts
-hola, am, crees que pueda sentarme aquí? Creo que apenas puedo alcanzar lugar – dijo la chica con un aspecto un poco cansado
-ah, claro, adelante, quieres que te ayude con tu maleta? – contesto amablemente Liam
-muchas gracias, y si, me vendría bien ayuda – Liam tomo el equipaje de la chica y lo acomodo, los dos tomaron asiento, por la ventana pudo ver a sus padres y a su hermano, al parecer, su madre acababa de ver lo que paso y Liam veía en sus ojos un brillo inusual. 11:00, el tren empezó a moverse y con la mano hizo un gesto despidiéndose, sus padres también lo hicieron y en pocos segundos se alejaban de la estación – ah, por fin a Hogwarts, es emocionante no crees? – dijo la chica a Liam, bastante emocionada al parecer
-eh, algo, si, creo – contesto tímidamente Liam
-oh, no tengas miedo, seguro te la pasaras bien, por cierto, ¿cómo te llamas?
-ah, claro, soy Liam Baker, un gusto, y tu? – dijo tímidamente y extendió su mano
-mucho gusto, yo soy Emma Brown – dijo alegremente y correspondió al saludo, estrecharon manos y volvieron a hablar – así que, Liam, vienes de una familia mágica?
-bueno, mi mamá es una bruja, me entere en cuento me llego la carta de Hogwarts
-oh, interesante, mis dos padres son magos, aun que mi padre viene de familia muggle
-muggle? – pregunto extrañado Liam
-ah, claro, así les decimos a los que no pueden usar magia
-oh, entiendo, un poco doloroso, creo
-jeje no te preocupes yo no lo uso como insulto ni nada de eso – rio un poco Emma – pero algunos si lo hacen, me enojo cuando los oigo diciendo cosas como "tontos muggles" y cosas así
-sí, ahora que lo dices así es bastante feo
-lo sé, solo puedo regañarlos, en fin – en ese momento un sonidito salió de el bolsillo de Liam – eh? ¿Qué es eso?
-oh, claro, debe de haber señal por aquí, es mi teléfono, mira – Liam saco un teléfono de su bolsillo y Emma lo vio extrañada