Así fue como pasaron los días, e inevitablemente la amenaza de los exámenes apareció, de pronto Liam y compañía se vieron a una semana de los exámenes. Las tardes eran ocupadas por largas sesiones de estudio, Amanda pasaba de libro en libro y por si Liam no tuviera suficiente con la rigurosa rutina de Amanda, Jack también le hacía tener buenas sesiones de estudio, aún que por lo general nunca estaba solo en ellas, siempre hacía en falta algo de vida fuera de la biblioteca.
-estamos acabados – dijo Jack con una evidente falta de sueño – mañana empiezan los exámenes y no hemos llegado a la página 125
-Jack, hubiéramos llegado si no nos hubieras detenido en Elfrico – contesto Liam cansado
-esa era importante!
-Jack literalmente mi mamá nos envió una carta diciendo que no vendría!
-eso pudo ser hace mucho tiempo, el plan de estudios puede que haya cambiado
-rayos, hasta Harry nos dijo que no estaría!
-sí, pero él no es profesor de historia o sí? – contesto Jack moviendo la pierna rápidamente
-Jack tienes que descansar ya – Liam se froto los ojos con las palmas y cerro el libro de historia
-sí, creo que tienes razón
-iré a dormir ya, descansa Jack – dijo y se levantó del asiento de la sala común
-claro, subo en un momento
Pero ese momento se convirtió en una, dos, horas. Liam y todos los demás chicos del dormitorio despertaron con un "rápido! ¡Tenemos que estudiar una última vez!" de Jack. Naturalmente Liam nunca se había preocupado tanto por unos exámenes en lo que llevaba de vida escolar, pero está vez fue todo lo contrario. El primer examen que rindieron fue el de pociones, tuvieron que hacer una perfecta poción de olvidó si es que querían la máxima nota, aún que el profesor era bastante comprensivo y permitió que bastará con que se pudiera beber, Liam la termino mucho después que Emma, pero más rápido que Jack. El siguiente fue el de defensa, uno a uno tuvieron que crear un Verdimilius que electrificara lo suficiente al maniquí para que un foco en su cabeza se encendiera. Al siguiente día el profesor Flitwick les indico que tenían que hacer que una piña bailará sobre la mesa, Liam y Amanda casi no tuvieron problemas, a diferencia del pobre Jack. La profesora Amelia les hizo transformar un ratón en una cajita, Liam que ya había practicado eso una y otra vez después de clase no tuvo problema, y es qué a veces a la profesora se le escapaba alguno y estaba demasiado asustada como para transformarla ella misma, así como Liam, Erika no tuvo gran problema siendo la segunda en terminar el examen. Herbologia estuvo llena de plantas y hechizos de fuego, por cada planta carnívora que lograrán controlar ganabas unos satisfactorios puntos. Al final y luego del cansado examen de Astronomía vino el de Historia de la magia, Liam contestaba pergaminos sobre magos antiguos que hicieron una u otra cosa, escribió cortas biografías y cuando el profesor fantasma dio el aviso de soltar todo es cuando Liam descanso finalmente.
-bien, eso es todo chicos, los resultados serán entregados la próxima semana – dijo el profesor recibiendo el último pergamino
-ah, por fin libres – dijo Jack estirándose – pues no vino Elfrico
-ya, que sorpresa no crees? – contesto Liam suspirando
-ok, tal vez tú mamá tenía algo de razón, pero bueno, ahora toca descansar una semana completa
-yo no lo diría así – dijo Liam consternado. Ese mismo día él tendría un examen más, uno extracurricular, Pomona Sprout lo esperaba en la cocina, tendría que preparar lo que ella dictará, como si lo que hizo en navidad no hubiera sido suficiente Liam accedió. Liam llegó a la cocina y antes siquiera de que pudiera tomar un vaso de agua la profesora Sprout apareció.
-buenas tardes Liam – dijo educadamente
-buenas tardes profesora
-ya sabes lo que tienes hoy, cierto?
-sí, estoy listo – dijo suspirando
-ja, muy bien, ya pueden pasar! – la profesora Sprout grito y acto siguiente sus amigos y el profesor Forker aparecieron en la cocina – trabajar en una cocina significa tener montones de pedidos, así que tus amigos accedieron a ordenar sus comidas preferidas
-pero… bueno, sí, yo puedo – dijo Liam espabilando
-perfecto, ahora… empiecen a ordenar en 3… 2… YA! – en cuanto la profesora Sprout dijo la palabra los chicos empezaron a pedir, Liam escucho atentamente y acto siguiente se puso a trabajar. Las sartenes se calentaban, las especias iban de un lado a otro, el aceite bailaba en una crujiente sinfonía, el aire se llenó de un cálido aroma. Los platos fueron hacia sus amigos uno a uno, al final todo estuvo servido y listo para degustar, uno a uno dio su visto bueno. Liam suspiro cuando la última papa frita fue comida por el profesor Forker
-todo estuvo delicioso Liam – confirmo el profesor
-muy bien, todos dieron su visto bueno, Liam Baker, oficialmente eres parte de esta cocina – dijo la profesora Sprout alegremente, todos aplaudieron y Liam no se pudo sentir más feliz, tanto que una pequeña lágrima de felicidad paso por su mejilla.
La noche llegó y los chicos disfrutaban de un hermoso cielo estrellado, finalmente podrían descansar de su intensa vida escolar. Sin embargo, los resultados eran algo digno de preocuparse. Durante la tranquila semana post-examenes Liam y compañía estaban tranquilos fuera del castillo cuando de repente algo llamo la atención del chico.
-eh? ¿Qué es eso que se mueve por ahí? – dijo Liam señalando algo blanco
-vamos a ver – Jack se acercó junto con Emma y Liam, vieron un conejo que normalmente sería propiedad de Hagrid para alimentar a las creaturas
-esto… no debería estar aquí o sí? – dijo Liam tímidamente
-no… - contesto Jack
-ejem… Wingardium Leviosa – conjuro Emma nerviosa, el conejo se elevó y debajo estaba una buena araña, mejor dicho, acromantula, Jack actuó rápidamente y saco la varita
-Araña Exumain! – grito y la acromantula fue erradicada