Capítulo 34: Naja

El día posterior a mi llegada a la Torre Oscura, Eraxium —o debería llamarlo Maestro Eraxium ahora— me dio mi primera clase de magia oscura. Volví a concentrar la bola de electricidad en la palma de mi mano y eso me hizo sentir más seguridad con respecto a mi nueva magia. Todo iba bien hasta que se unió Akuro a la clase, a pesar de que él está más avanzado que yo.

Mencionó algo sobre que él también tiene derecho a que el maestro Eraxium le de clases. Así que ahora está a muchos pasos de mí junto a otros alumnos más jóvenes que ya estaban cuando entré. De vez en cuando me lanza una mirada de odio que no me hace sentir demasiado cómoda.

Me gustaría que Kala, o incluso Hedeom estuvieran ahora aquí para sentirme más segura. No me gusta estar con este chico, me da miedo que pueda hacer o decirme algo malo. Pero Eraxium me ha dicho que ellos ya han aprendido todo lo que tenían que aprender y ya son hechiceros oficiales. Creo que Hedeom les enseña a unos aprendices que son más tímidos y no les gusta estar con demasiadas personas.

Me pregunto si yo podré ir con él, por que aun que me gusten las clases de Eraxium, a pesar de que antes le temía, no puedo seguir tan cerca de Akuro.

—No sé qué es lo que ha visto el maestro Eraxium en ti para traerte aquí —me dice él de pronto cuando termina la clase.

—Yo...No lo sé…

—Deberías volver con tus estúpidos amigos. Este no es lugar para ti.

Aliska empieza a gruñir de inmediato para defenderme haciendo que el cuervo que se posa en su hombro empiece a graznar, formando un escándalo. Yo intento armarme de valor para enfrentarme a él.

—Yo tengo el mismo derecho que tú de estar aquí. Si Eraxium sigue queriendo que sea su alumna lo seré.

En el rostro de Akuro se forma una mueca de odio y veo como aprieta los puños. Temo que vaya a hacerme algo pero entonces Kala aparece allí y tira de mi brazo, alejándome de él.

—¡Pero serás cansino! ¡Déjala en paz estúpido!

—¿Ahora eres su amiguita? —dice Akuro poniendo los ojos en blanco— Por favor…

Eraxium aparece tras él y le pone una mano en el hombro, sobresaltándolo.

—Akuro, te avisé de que te portaras bien con ella. Tengo que recordarte lo que dije?

Él parece aterrado de pronto, abriendo mucho los algo. Quizás por algo que ha recordado. Después aparta la mirada y clava la vista en el suelo. No sé qué es lo que le habrá dicho.

De pronto el cuervo vuela hacia mí, asustándome y me picotea la cabeza. Intento deshacerme de él pero el sigue volviendo para atacarme. Me agacho hacia el suelo ye me protejo la cabeza con las manos. Puedo ver la media sonrisa que me lanza Akuro, como si le hiciera gracia. Estoy segura de que ha sido él que se lo ha dicho. Kala me dijo que puede hablar con los animales.

Pero entonces escuchamos como algo se quiebra encima de nosotros. El suelo empieza a temblar bajo nuestros pies y yo caigo de rodillas sin saber a qué sujetarme. El maestro Eraxium parece decir las palabras de un hechizo y todo parece calmarse. Miro hacia arriba para ver como una enorme roca está apunto de caer sobre mí y sobre el cuervo.

Sin pensar lo tomo entre mis manos y lo abrazo contra mí para protegerlo de ser aplastado. Pero la roca no llega siquiera a rozarnos. Cuando abro los ojos, Eraxium la mantiene en el aire a un par de metros sobre mí. Nos ha salvado.

Deja la piedra donde estaba, sellándola con su magia para que no vuelva a caerse y va junto a mí.

—¡Naja! —dice preocupado—. ¿Estáis bien los dos?

—Sí...Gracias…

El cuervo tiembla entre mis manos y me mira con unos ojitos negros como todo su plumaje. Entonces apoya su cabeza en mi mejilla. Parece que es su forma de agradecerme que lo haya salvado.

—¡Cuervo! —Akuro se ha acercado rápidamente a nosotros y se agacha para cogerlo.

Por raro que me parezca parece que Cuervo es su nombre. Cuervo grazna con suavidad cuando vuelve a estar con su amigo y él lo abraza contra su pecho. Yo me pongo en pie y me sacudo la ropa, que se ha llenado de polvo. Aliska gimotea a mi alrededor preocupada y yo la abrazo para calmarla.

—¿Qué...Qué es lo que ha pasado? —pregunto cuando me calmo un poco.

Eraxium parece estar decaído de pronto y no es capaz de mirarme.

—La gema, al estar corrompida, provoca desastres a su alrededor. Antes solo pasaba de vez en cuando pero estos últimos meses los temblores se han ido aumentando. Siempre intento calmarlos y arreglar las grietas pero cada vez es peor. Esa es otra de las razones por las que quiero devolver la gema, Naja… Lo siento por haberte puesto en peligro.

Miro las grietas que se han formado en la sala y un escalofrío me recorre por todo el cuerpo. Esa gema es muy peligrosa. Esta magia lo es. ¿Cuánto tiempo podrá aguantar esta Torre?

Launexx se ha acercado a nosotros y se coloca junto a mí preguntándome si estoy bien. Después va junto a Eraxium con paso decidido.

<<Mi padre está de camino hacia aquí>>