Capitulo 24

POV Ivón

Salimos cuando ya la luna está claramente visible afuera yo, Andrew y Robert con Amelia. ¿Adonde ibamos? No lo sabíamos y tampoco pudimos aprovechar para escapar ya que, Robert vino con una pequeña arma consigo por si pensabamos en eso, en escapar asi que, solo hacemos lo que nos mandan por ahora yo teniendo esperanzas de YAHWEH nos guardaba en todo momento a mí y al gran pelirrojo.

Caminamos como por unos diez minutos por medio de lo que es un pequeño bosque cerca de la casa de estas personas que nos tienen como prisioneros entonces, vislumbro con el resplandor de la luna llena una casa grande de color rosado con amarillo—Ya llegamos—dice Robert y toca la puerta mientras nosotros estamos a su lado y Amelia detrás de él mirando con una sonrisa al pelirrojo y yo solo frunzo el ceño.

—¿Qué es lo que está mujer le pasa con Andrew?—pensé en mis adentros un poco como molesta por sus miradas hacía él hasta que escucho que alguien habla del otro lado de la puerta.

—¿Quién es?—dice la persona del otro lado.

—Soy yo, Robert—le abren de inmediato y veo a un tipo abrirla la puerta con ropa toda negra agarrando un candelabro de cuatro velas.

—Llegas a tiempo porque, ya vamos a empezar— el hombre se va hacía adentro de la casa yo me pongo algo nerviosa debido a que nose que harán con nosotros y Andrew parece darse cuenta y me toma de la mano apretándola.

Amelia entra rápidamente—Ustedes dos ¿qué están esperando para entrar?—dice Robert de forma áspera y empuja a Andrew y como me tiene agarrada a su mano me jala y terminamos entrando luego, cierran la puerta tras nosotros.

Vislumbro gracias a varios candelabros que hay en varias esquinas de la casa a varias personas como a 20 personas en la casa vestidas de negro completamente.

—Muy bien damas y caballeros, acérquense—un hombre sin barba y con el cabello amarrado de color oscuro nos llama.

—Vengan—Robert nos incita a ponernos delante con los empujones de las personas que querían estar cerca de este hombre como si le fuera a dar un millón de dólares llegamos al frente junto también con los empujones de Robert cabe añadir el cual, se pone a nuestra par cuando ya estamos allí.

—¿Cuántas mujeres fertiles trajeron?—comenta el hombre que llamó al público y nadie levantó la mano sino que se miraban unos otros para ver quien la levantaba.

—¿Qué rayos será lo que estas personas hacen?—pensé en mis adentros con el ceño fruncido y algo de preocupación veo a Robert levantar la mano como si fuera a decir algo.

—¿Si Robert?—manifiesta el señor dándole permiso a esta persona que hable.

—Trajimos Amelia y yo a esta mujer pero, no sabemos si es fertil, aún no la he tocado de esa manera para probarlo pues, reciéntemente está con nosotros— cuando yo escucho a este tipo hablar abro grandes los ojos y Andrew que tiene tomada mi mano la aprieta ligeramente y yo volteo a verlo notándolo muy serio a él como si no le gustara nada lo que escuchó.

—Oh muy bien Robert esperaremos a que lo hagas entonces mientras, prepararemos el ritual para Elizabeth que ya está embarazada y puede dar a luz en poco tiempo—veo que un grupo como de tres personas pasan al frente donde este hombre que ha estado hablando y vislumbro una mujer embarazada con los ojos vendados.

—¿Ahora que es lo que van a hacer?—pensé algo nerviosa por la situación y otros dos hombres traen como dos mesas de varios metros y las unen haciendo que la mujer se acueste allí vendada aún y su cuerpo quedaba justo al tamaño de las dos mesas pues, ella era bajita.

—¿Qué es lo que está pasando?—dice ella con tono algo nerviosa.

Yo también quería saber que era lo que ellos iban a realizar con ella si ofrecer su bebe a algún dios o tal vez era....

—La vamos a hacer sangrar un poco en los brazos y demás ¿verdad? Hoy tengo mucha hambre—manifiesta uno de las tres personas que fue a llevar a la mujer delante.

—Si optimus, mucha hambre tenemos y queremos probarla para ver si saciamos nuestra sed—añade otro de los que estaba allí y yo ya creo pensar que es lo que van hacer y espero no sea eso que pienso.

—¡S optimus, queremos probarla pues, tenemos sed!—casi todos los presentes comenzaron a vociferar diciemdo estas palabras.

—Traigan el cuchillo—dice el hombre de cabello recogido sin barba el cual, se llama o se hace llamar optimus.

—Pero, hay que amarrarla mi señor—comenta uno de ellos y optimus asiente con la cabeza.

—Tienes razón. ¡Traigan la soga!—dice él como respuesta y la amarran sujetandole los brazos y piernas a las patas de la mesa con las piernas abiertas y brazos extendidos, así quedó ella.

—Ya empezaré—comenzó haciendo cortes en sus brazos haciendo que salga sangre y lo que vi que me dió mucho que pensar fue ver a las personas de este lugar acercarse una a una a lamer y absorver o chupar esa sangre que se derramaba, solo Andrew y yo no lo hacíamos.

Pasan luego a la parte de la barriga de la mujer y le hacen un gran abierto allí y yo volteo mi rostro hacía Andrew y este cuando me ve así me atrae hacía si abrazandome haciendo que mi rostro quede en su pecho y así no vea todo esto.

Hasta que llama a Andrew el señor Robert para que vaya—¿ Andrew, no me dijiste que eras vampiro también? Ven y no te hagas el inocente—cuando yo lo escucho hablar tales palabras me espanto tanto que suelto de inmediato el agarre del pelirrojo—espera Ivón, no es lo que piensas—trato de respirar profundo para controlar mis nervios.

—¿Él es un vampiro...?—pensé en mis adentros con el ceño muy fruncido y temblando un poco.

Andrew intentaba tocarme la mano ptra vez y yo me alejaba más para atrás—no me toques—le decía.

—Ivón, no es lo que piensas—lo miro—o tal vez si—cuando lo escuché hablar parece ser que ni él lo entiende bien—solo un poco, déjame explicarte...—escucho a la mujer vociferar grandemente captando nuestra atención entonces, noto que le sacaron al bebe de su vientre y yo trato de respirar inhalando y exhalando.