Lukas se separa de mí y me lleva con cuidado hacia al sofá.
-- ¿Estás bien? -- asiento con la cabeza -- ¿Por qué te trataba como si te conociera?.
-- Él era antes mi mate -- le digo un susurró.
-- ¿Él es? Ethan me habló sobre eso ayer para que nadie se te acercara. ¿Quiere que llame a Ethan?.
-- No, tiene que hacer unos trabajos y no lo quiero preocupar.
-- Pero Lexie, él ya te marco así que sabe que te sucede algo.
¿Por qué siempre olvidó lo de la marca?
-- A ti todo se te olvida.
-- Lo llamaré para que no se preocupe -- dice sacando su celular y en ese momento suena -- Es él.
Estoy muy nerviosa y no se porque.
-- Es Ethan, el que está nervioso -- dice Nidia. -- Por la marca sentimos lo que él siente así como él siente lo que tú.
-- Así que él sintió mi miedo.
-- Si.
-- Aló -- contesta Lukas -- Si, está bien…. No le pasó nada… sería mejor que ella te cuente -- dice mirándome de reojo -- no ... .ok lo haré. -- me extiende su celular -- quiere hablar contigo.
-- Hola. -- digo al ponerme el celular en la oreja.
-- ¿Estás bien?.¿ Por qué estabas asustada?.
-- Estoy bien, y es una larga historia.
-- Voy para la mansión.
-- Termina lo que tienes que hacer Ethan.
-- No me importa quiero estar contigo y además puedo dejar a Iker que lo terminé. Llegaré cuarenta minutos ¿Ok?
-- Ok patrón. -- escucho su risa ronca.
-- Pásame a Lukas y no te separes de él.
Le pasó el celular a Lukas.
-- Ya te dije que lo haré, adiós -- dice y cuelga el celular.
Me levanté del sillón y caminé hacia la cocina seguida de Lukas.
-- ¿No te apetece comer algo? -- le pregunto al llegar a la cocina.
-- No, gracias. -- dice sentándo se en un taburete.
-- ¿Que me puedes contar de ti? Nunca hablamos.
-- Es por qué siempre terminamos en una pelea gritando. -- rio por qué es cierto.
-- No negaré eso.
-- Bueno tengo la misma edad que Ethan.
-- Aquí todos son momias.
-- ¿Y que cuánto tienes tú? ¿Treinta?
-- Veinte. -- digo con una pequeña sonrisa y él queda sompredindo.
-- ¿Que? Pensé que tenías más.
-- Soy una joven, lo sé -- le digo mientras busco algunas cosas en la cocina.
-- ¿Qué buscas?
-- Quiero hacer galletas, antes siempre hacías para mí familia. Y hoy quiero hacer galletas para ustedes.
-- Aquí nadie hace galletas. Solo las de servicios.
-- ¿Por qué?
-- Nadie sabe, solo cocina las de servicio. Joana rara vez cocina y los demás no sabemos.
-- Bueno, a mi me gusta hacer galletas y pasteles.
Al encontrar todo lo que necesito lo pongo en la mesa para poder comenzar.
-- Sabes? Me puede ayudar.
-- Ya te dije que no se cocinar.
-- Es fácil, yo te enseñaré, ven.
Se levanta del taburete y comenzamos a hacer las galletas.
Treinta minutos después la galletas ya estaba en el honor. Lukas y yo quedamos llenos de harina por qué no las tiramos en un momento de desacuerdo.
-- Bueno, es lo más difícil que he hecho en mi vida -- dice Lukas y yo río.
-- No puede ser que el gran beta del rey le es difícil hacer galletas con chispas de chocolate.
-- Pero soy excelente en mi otras cosas.
-- Pero haciendo galletas no.
Rio y él también lo hace.
-- Mia -- dice Ethan rodeándome con sus brazos y mirando mal a Lukas.
No me di cuenta cuando llegó.
-- No estés de celoso, él me estaba ayudando a hacer galletas -- le digo.
-- ¡Ya hermano! Además sabes que con ella solo gritando nos la pasamos. -- dice Lukas.
Ethan no me deja y solo mira a Lukas.
-- Mejor me voy, me avisas cuando esten. -- dice y se va.
Me doy la vuelta quedando enfrente de él y él inmediatamente comienza a olerme el cuello causadome cosquillas.
-- Ethan, no tienes que estar celoso de Lukas, él es tu mejor amigo. -- solo me gruñe -- Además a ti a quien amo. Te amo mi rey.
Él se aleja de mi cuello y me veo a los ojos.
-- Yo también te amo mi reina -- dice y luego me besa.
Iba a profundizar más el beso pero en eso suena la campana del honor avisando que las galletas ya están. Me alejo de Ethan y él gruñe por mi acción yo solo rio.
Tomó los guantes y sacó la bandeja con las galletas del honor, las dejó en la mesa para poder ponerlas en un recipiente.
-- ¿Dónde hay un recipiente para poner las galletas? -- le pregunto a Ethan, él solo me señala el lugar. -- Ethan ahí no alcanzó, podrías bajarlo por favor.
-- Claro enana.
-- ¿Cómo te fue?
-- Bien, arregle algunos asuntos y la próxima vez te voy a llevar para no dejarte sola. Y… ¿Quién era? ¿Por qué tenías miedo? ¿Te hizo algo?
Él se levanta y me baja el recipiente, me lo entrega y como las galletas todavía están calientes tomó una tenaza para moverlas.
-- Él era el alpha José Hernández de la manada Cruz Roja y no me hizo nada, Lukas llegó a tiempo.
-- ¿Ese alpha era?
-- Si -- le digo en voz baja.
Veo como Ethan quiere agarrar uno pero le pegó en la mano antes que la tomé.
-- Todavía no y quieres llamar a Lukas por favor.
-- ¿Por qué?
-- ¿Por que, que?
-- ¿Por qué quiere que lo llame?
-- Ethan no te enojes pero con él hice las galletas y yo le enseñe. Es a la primera persona que le enseño.
-- ¿No le enseñaste a tu hermano o algún primo?
-- No -- digo inflamado las mejillas -- mi hermano solo sabe cocinar lo básico y no tengo primos, mis padres eran hijos unicos.
-- Ok, lo llamaré. -- dice saliendo de la cocina.
Voy al resfriador para sacar algo para la cena. En eso llegan Ethan y Lukas.
-- Ya están las galletas. -- le digo sacando un poco de jugo para cada uno.
Le doy para que prueben.
-- ¿Qué les parece?
-- Está excelente, obvio yo ayude a hacerlas -- dice Lukas y yo ruedo los ojos.