Su alma por fin podrá descansar, ya no tiene nada que hacer acá; la señorita ha creado a un pequeño monstruo en lo profundo del bosque, un pequeño dragón ha sido encontrado con su nombre.
una condena a muerte se le ha dado, y su familia y sociedad, la espalda le han dado, con el paso de los días, la muerte la espera y con una gran sonrisa le grita a todo en la hoguera.
-YO MORIRÉ AQUÍ, PERO LES JURO QUE VOLVERÉ Y CUANDO ESO SUCEDA TODO ESTE MALDITO REINO PERDERÁ TODO, A USTEDES QUE ME HAN DADO LA ESPALDA, A LA FAMILIA QUE DECÍA AMARME, NO QUEDARÁ NADA DE USTEDES, SOLO UN REINO TOTALMENTE DESTRUIDO, QUEMADO, UN REINO CAÍDO Y SIN POSIBILIDAD DE RENACER OTRA VEZ, LA DIOSA LOS HA ABANDONADO Y AHORA SIN PROTECCIÓN SE HAN QUEDADO-
Al momento que guardo silencio, prendieron el fuego y solo se escuchaba la risa desgarradora de aquella persona que antes era conocida como una noble princesa. con el paso de los años, la gente no olvidaba aquellas palabras, y mientras algunos temían, otros no creían, -por la diosa, solo dijo puras palabras, es incapaz de volver a nacer y destruirnos, es mentira, solo lo dijo para asustar- mientras algunos pueblerinos pensaban así, incluso el emperador temía porque sabía que su hija era capaz de realizar lo que dijo, ella era diferente a sus demás hijos o hijas, a pesar de ser una hija ilegítima nació con más poder que cualquiera dentro de la familia real, así que sabía que aquella promesa en algún momento se iba a cumplir.
Así pasaron los años y la promesa se convirtió en leyenda, transmitida por los años, hasta que por fin se cumplió, desde el horizonte se pudo observar, la figura de un dragón volar y con gran fuerza todo ele reino destrozar, ni las armas, ni explosivos lo iban a dañar y su único objetivo se estaba cumpliendo ya, dejando para el final a la familia imperial que entre llantos y súplicas no se pudo salvar, la promesa se cumplió, su alma por fin podrá descansar, ya no tiene nada que hacer acá.