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EN LA OFICINA

Jesús llamo a su padre porque él era una de las piezas que esa mujer estaba moviendo para hacerle daño y necesitaba saber por qué. En unos 15 minutos aproximadamente llegó y Jesús mantenía su fachada de preocupación por la desaparición de Cristina habían decidido guardar el secreto y obviamente le avisaron a Luz que llegó justo después llorando.

-. Alguna noticia – ella se sentó en el sillón, e hizo pucheros.

-. Ninguna – Rogelio obviamente se sintió ignorado.

-. ¿Para qué me has llamado? – Rogelio se hizo notar.

-. Me puedes decir porque tu media hermana me sigue acosando – Rogelio se sorprendió y se quedó congelado por breves segundos.

-. Por qué dices eso… - dijo nervioso.

-. Tú lo sabes bien – Jesús camino un poco más cerca de ahí – y estoy muy seguro que ella algo tuvo que ver con la desaparición de Cris.

-. Hijo yo simplemente colaboró con ella, solo eso – se sentó nervioso.

-. Y entonces explícame porque ella estaba detrás de mi supuesta infidelidad - Rogelio se dejó caer en el sillón como si ya no tuviera fuerza.

-. Así que ya lo sabes – respiro profundo bajó la cabeza no era capaz de mirarlo a los ojos.

-. Y estoy muy seguro de que tú le debes demasiado dinero como para que seas un títere que maneja a su antojo – Rogelio simplemente asintió y dejo caer sus hombros.

-. Pero – Jesús lo miró con advertencia – yo creo que si tú no tienes nada ella se alejará de ti.

-. No puedo creer que seas tan… - paso el dorso de su mano por su frente – ella es más que millonaria poco o nada le importa si yo tengo dinero o no.

-. Eso… - al pensarlo un poco se dio cuenta que su hijo tenía razón – todo a sido mi culpa.

-. Exacto – Jesús le brindo una sonrisa de sarcasmo – no entiendo porque eres tan fácil de manipular.

-. No me trates como un estúpido – Jesús puso los ojos en blanco.

-. Y entonces… - se moría por decirlo todos los insultos habidos y por haber que se sabía, peor debía permanecer en su papel.

-. Solo intentaba ayudarte – él se veía así mismo como un héroe o el bueno de la historia.

-. Bien y como lo has hecho ya que mi esposa está desaparecida – él estaba en realidad aliviado porque ella estaba bien, de lo contrario estaría como un loco.

-. Pero ella no creo que sería capaz – Jesús dio una risa desganada.

-. La creo capaz de eso y más – Rogelio pensaba que él estaba exagerando después de todo simplemente es por una mujercita insignificante.

-. La vas a llamar porque necesito que me diga donde tiene a mi mujer – Rogelio asintió y sacó el celular para llamarla, ella llegó unos minutos después.

Era una mujer con buena figura que para tener casi 60 años parecía de 45, aunque igual era demasiado vieja al parecer de Jesús, y más con lo raro que se le veía el rostro después de someterlo a diferentes tratamientos estéticos para tratar de frenar el envejecimiento.

-. Querido – se acercó para besar y abrazar a Jesús y este se alejó como si hubiese sentido un olor a pescado podrido.

-. Señora buenas tardes – le indicó que se siente él se mantendría de pie porque su integridad estaba en riesgo.

-. Vaya que formalidad – se sentó con suma delicadeza y finura, como si ella fuese una dama joven – me has llamado para aceptar mi colaboración – ella lo miraba ilusionada.

-. Señora – dijo con desagrado – mi empresa está muy bien posicionada y son más aquellas empresas que nos vienen a buscar para cooperar y usted no estaría en esa lista.

-. Entonces – ella mantenía su postura sin tan ni siquiera inmutarse.

-. Está aquí porque deseo saber dónde tiene a mi esposa- ella simplemente dio una sonrisa.

-. Bien pongamos las cartas sobre la mesa – esto para ella era un juego.