A pasado tiempo desde la última vez que decidí escribir hoy 09 de septiembre me senté a pensar y recordar un poco todo lo que ha pasado, hace tiempo tuve una conversación por redes sociales con Leopold justamente de la duda que tenía, qué era lo que miraba cuando yo pasaba enfrente del pasillo, realmente inicie con algo como “¿Por qué veías antes tanto hacia el pasillo?” solo respondió que el pasillo estaba al frente de donde él se sentaba, yo de una manera burlona hacía mi le dije “Jajajja pensaba realmente que me mirabas a mí, pero veo que era más interesante y atractivo el pasillo" claro lo dije de una manera en que realmente me estaba riendo de mis suposiciones pasadas, pero él respondió que si era así, que él me miraba a mi cuando yo pasaba y sonreía porque yo sonreía, no sabía si tomarlo como algo bueno o malo pero decidí solo quedarme con la idea de que realmente me miraba a mí, pero no por la idea que tenía originalmente del que yo también le gustaba o si quiera le llamara la atención, sino que solo lo hacía porque yo lo comencé a hacer.
Realmente no sé qué esperaba, pero... creo que en todo este tiempo me ha gustado ver la sonrisa en su rostro que por cierto es muy linda, ese rostro que me provoca ternura y provoca que vuelva a sentir eso que ya no había sentido hace mucho
El miércoles 11 de Septiembre, encontrarlo en las escaleras antes de que se fuera fue lo mejor que me pudo pasar, iba muy molesta e impotente por algo que recién yo había pasado, y ese momento en el que acerco su cuerpo al mío con intención a un abrazo, me relajo demasiado, me hizo sentir que todo iba a estar bien, no pude evitarlo y acapararlo durante un minuto al menos era algo inevitable, me sentí muy bien en ese momento, aunque aún mi cabeza no dejaba de pensar en la discusión que había tenido.
El jueves no lo vi realmente, llegue temprano pero solo lo vi de lejos, ese sentimiento confuso en el que quería dejar de sentir lo que sentía y el no querer dejar de sentirlo era muy confuso.
El viernes 13, claro muchos lo clasifican como el día de la mala suerte, pero... ese día justo cuando iba a subir las escaleras para ir a la puerta para mi almuerzo lo encontré, el me saludo y me dio un semi abrazo, no fue como el del día miércoles, pero me había saludado, me pregunto por su jefe y para su mala suerte él ya había llegado, solo se despidió diciendo que luego me veía y aunque esa sensación de emoción y hambre era muy confusa, me había gustado que el destino nos hubiera hecho coincidir, me gusta pensar a veces que es obra del destino, aunque si es solo coincidencia, me agrada la idea de que eso pase.
Ese mismo día hice algo que realmente me dio pena, escribí un mensaje en la noche ya estando semi dormida, ese mensaje decía "Me gustas mucho Leo" ese mensaje no lo envié cuando lo escribí, creó que no tenía el suficiente valor para hacerlo, una de las razones es que a estas alturas podía casi asegurar que Leopold realmente no sentía nada y otra porque realmente me daba pena, además de que no estaba consciente de lo que hacía o escribía por mi estado, desperté como 3 veces antes de enviar el mensaje pero solo veía el chat en mi teléfono y que había un mensaje sin ser enviado, hasta las 12 am se me ocurrió enviar el mensaje, cuando recordé al leer el mensaje lo que decía borre el mensaje, no sabía cómo él iba a reaccionar y de mi parte no era muy prudente.
El sábado ya que había visto que borré el mensaje me pregunto que había borrado, le dije que era algo muy penoso y en efecto para mí lo era, y que solo lo conformaban 4 palabras, en 4 palabras podía resumir eso que sentía, ¿Qué loco, no?, bueno el caso es que pidió que le dijera que era y lo pensé durante 4 horas si mostrarle o no lo que era, bueno además de que la serie que estaba viendo estaba muy interesante, al fin decidí enviarle lo que había dicho, para él era algo muy normal, realmente no sé cómo sentirme ante ello, pocas veces soy tan directa en mis sentimientos, y es difícil saber cómo debería sentirme, aunque por ver series me sentía un poco bien, por esas series en la que él chico se enamora finalmente de la chica que estuvo enamorado de él, por casi arte de magia, pero claro, como si eso pasara en la vida real, pero bueno no es malo seguir teniendo un poco de fe en que eso pueda llegar a pasar en la vida real.