Una Promesa A La Luna

Capítulo 17

Raiden

 

Esto es ridículo.

—Oh, ella es la chica. — Larissa inclino más la cabeza. —Oye es linda, ¿De verdad tiene 18 años?

Ahora mismo mi hermana y yo estamos en mi auto acosando a Celine.

—No puedo verla del todo bien, pero su perfil es lindo. Además, me encanta su cabello.

Después de la discusión con mi padre no he vuelto a saber de él y por el momento estoy bien con eso. Por otra parte, mi madre le conto a Larissa que estoy enamorado y ella ha estado molestándome desde entonces para que le presente a Celine.

Le conté mi situación con Celine pensando que se daría por vencido, pero fue todo lo contrario y me hizo traerla para que la pueda ver al menos desde una distancia considerable.

—Raiden creo que ella está llorando. — de inmediato mire hacia dónde está.

—¿Qué fue lo que paso?

Desde esta distancia y solo viendo su perfil puedo notar que su brillo se está apagando.

—Hum, dijiste que termino una relación de dos años ¿Cierto? — asentí. —Debe de estar pasándola pésimo, y más si fue por un engaño. — la mire.

—¿Has pasado por algo así? — pregunte y ella no contesto por un tiempo.

—¿Recuerdas a Leo? — asentí. —Me dolió mucho, incluso ahora puedo confesar que aun lloro bajo las sábanas.

—Pero solo estuvieron menos de 6 meses juntos.

—Si, estuvimos poco tiempo juntos, pero en toda mi vida nunca antes alguien me hizo sentir tan bien. Cuando estábamos juntos éramos solo él y yo en el mundo. Con Leo podía olvidarme de mis problemas y ser quien soy.

Mire el volante mientras la escuchaba y era como si describiera como me siento hacia Celine.

—Tal vez suene tonto, pero a pesar de que he tenido un par de parejas después de Leo, nunca podre querer a alguien como lo quiero a él. — nos quedamos unos segundos en silencio y una risilla salió de su boca —Así te sientes por esa chica ¿Verdad? — la mire y eso fue una respuesta suficiente —Eso es amor verdadero, para ella tal vez seas el amor de su vida o su alma gemela.

—¿No es lo mismo? — pregunte con una ceja levantada a lo que ella hizo una mueca y miro hacia arriba.

—Bueno, cuando era joven leí una hermosa reflexión la cual entendí un poco cuando Leo llego a mi vida.

—¿Que era?

—Decía algo así — sonrió y continúo hablando —A la vida de una mujer llegan dos hombres, el amor de su vida y su alma gemela. El amor de su vida entrara sin avisar a su corazón y la invadirá por completo, será el hombre a quien amara como nunca amara a alguien más y marcara un antes y un después en su vida, pero la relación terminara.

Ambos nos miramos y ella fue la primera en desviar la mirada.

—Y entonces llegara su alma gemela a sanar las heridas que dejo el amor de su vida y con el tiempo le dará la confianza de que vuelva a creer en el amor. Su alma gemela será todo lo que ella busca y lo querrá mucho pero no lo amará como amo al amor de su vida.

Mi expresión se distorsionó al escuchar eso, y Larissa dio un fuerte aplauso que me asusto haciendo que mi corazón casi saliera de mi cuerpo.

—Pero cuando todo este yendo perfecto con su alma gemela, el amor de su vida volverá a desestabilizar sus emociones. Querrá luchar por volver a entrar a su vida aun sabiendo que ella está feliz con su alma gemela, pero dicen que el amor de su vida es quien ganara — termino de hablar.

—¿Eso es todo? — me miro. —¿No hay más?

—Si. — contestó con una sonrisa —Solo me quede un momento pensando.

—¿Que sigue entonces?

—Lo demás se relaciona con el hilo rojo del destino, este hilo rojo es quien la conectará con la persona que tendrá su corazón y nunca podrá romperse. Pero ya es decisión de la chica, si elegirá al amor de su vida o su alma gemela.

Suspire poco después de que termino, de alguna manera me siento algo confundido.

—¿Larissa? — la llame cuando la mire y note que sus ojos estaban poniéndose rojos. —¿Estas bien? — lamió sus labios y asintió lentamente.

—Si, solo recordé un poco el pasado. — hice una mueca.

—Leo ¿Cierto? — no respondió. —¿Por qué terminaron si se querían tanto? — me arriesgue a preguntar.

Yo conocí a Leo muy poco, pero sabía que Larissa era feliz con él. El tiempo que estuvieron juntos fue el tiempo en que Larissa más sonrió y se notaba feliz, pero cuando ambos terminaron ella se distancia un tiempo e incluso tomo terapia.

—Nunca quise admitirlo porque tan solo pensarlo me rompía el corazón. La verdad es que quien era la ex de Leo cuando estábamos juntos, se trataba del amor de su vida y yo jugué el papel de su alma gemela…

—Y Leo la escogió a ella. — termine de decir lo que ella no podía pronunciar.

—Si, la escogió a ella. — suspiro —Y Leo se convirtió en el amor de mi vida y a pesar de que ya han pasado 3 años, mi alma gemela, quien sanara mis heridas, aun no aparece.

—¿Tú quieres que aparezca?

—Claro que si idiota. — se río. —He tenido tres relaciones después de Leo, pero como lo sabes no dure ni dos meses con ninguno, en verdad eran unos idiotas. — me reí —Por eso ya no estaré con nadie hasta que mi alma gemela aparezca.

—¿Qué pasa si no aparece nunca?

—Hum, no importa.

—Pues no falta mucho para que nuestro padre quiera comprometerte como lo está insistiendo conmigo.

—Ja, claro que no. El será mi padre, pero no el dueño de mi vida. Prefiero que me saque de la herencia antes de casarme con alguien a quien el elija. No es por nada, pero con Abigail dejo en claro su mal gusto.

Me reí fuertemente, pero pare cuando ella me hizo señas, nos agachamos un poco. Celine está viendo hacia la calle y casi nos pilla.

—Tonto casi somos atrapados.

—Esto no pasaría sino hubieras insistido tanto.

—Cállate tonto, además tú también querías verla ¿Me equivoco? — no conteste. —Vez como fue beneficioso para ambos.




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