Una última navidad para ellos

La tercera visita

Alison Hills, joven a la que se le hacía imposible pronunciar la palabra “No”, destinada desde su juventud a ser obediente y servil, criada por una familia muy conserva que vigilaba cada uno de sus pasos y castigaba severamente sus errores.

Cuando la jovencita cumplió la mayoría de edad, trato de independizarse de sus padres, pero su suave voz, no tuvo peso ante las pesadas y prejuiciosas palabras de sus progenitores. Entonces la joven, mientras padres, hermanos y familiares celebraban alegres la festividad navideña alrededor de la cálida estufa, Alison fue relegada a hacerlo solitaria en el frio sótano de la casa, donde encontró una pequeña ventanilla que conducía hacia la libertad, una fría, blanca y nevada libertad.

La joven aun sabiendo que su hogar quedaba casi en mitad de la nada, decidió huir, corrió y corrió, perdió sus pequeños zapatos negros por el camino y su blanco y largo vestido se rasgó con las ramas de los árboles, pero eso no le impidió seguir corriendo, hasta que en su camino se topó con una lejana sombra negra que, tomando la forma de una niña, fingía caminar despreocupada sobre un lago congelado. El bondadoso corazón de la joven reacciono al instante y trato de ir en ayuda de la niña, la cual desaparición en el instante en que Alison llego a la mitad del gélido lago.

El hielo que conformaba el piso comenzó a agrietarse apenas la joven trato de dar un paso en dirección a la orilla. Alison sabiendo lo que pasaría si intentaba moverse nuevamente, se arrodillo en el suelo e intento orar, suplicando la ayuda de un lejano ser en los cielos, el cual había ya sellado su destino.

Las horas pasaron con lentitud para la joven, quien imaginándose un hermoso futuro, logro aferrarse a la vida hasta la mañana del veinticinco de diciembre, cuando a lo lejos comenzó a ver a personas con linternas y faroles que gritaban su nombre, era su familia que parecía llamarla con angustia y arrepentimiento, la joven partió en llanto y suplico su ayuda, pero ellos no parecían escuchar su frágil y temblorosa voz, entonces Alison trato de levantarse para hacerle señales, solo para darse cuenta que sus extremidades habían sufrido un grabe caso de congelamiento durante la noche, ahora tenían un color morado oscuro y no parecían ya sentir frio o dolor, ahora no eran más que partes inertes que se desprendía de una joven desesperanzada.

Con todo en su contra la joven siguió implorando ayuda mientras movía su torso de lado a lado, sin darse cuenta que a cada movimiento el frágil hielo se despedazaba un poco más a su alrededor, hasta finalmente provocar que este se partiera por completo y Alison callera en las profundidades del gélido lago, quien, sin poder mover sus manos y pies, trato de mantener la respiración hasta su último instante, en espera de que alguien llegara en su ayuda, pero nadie llego hasta horas más tarde.  



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En el texto hay: amor, muerte, amistad

Editado: 11.12.2018

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