Una última vez... para siempre

Momento de ser felices

Amirov:

- ¿Dónde están, Thesion?, ¿cómo están? ‒no había sido mi intención ser tan brusco con él, pero había tirado de su brazo con algo de fuerza.

- Tranquilo señor Bianchi, ambos están bien, Enith esta durmiendo pero puedo hacer que entren, sólo deme un momento ‒suspiro con alivio, cuando Jackson me informó de lo que pasó, sentí que todo mi mundo colapsó, supongo que así debió sentirse ella.

Lo veo alejarse y comienzo a caminar de un lado a otro hasta que lo veo volver junto a una enfermera.

- Señor Bianchi, me dijo el doctor Solon que quiere ver a su esposa, sígame por favor, también pueden pasar a los cuneros a ver a su bebé ‒asiento, primero iría a verla a ella, necesitaba saber que estaba bien.

La sigo y sin esperar a que me dejen entrar, ingreso a la habitación, verla dormida en total calma hace que el miedo abandone mi cuerpo, me acerco y acaricio su mejilla suave, le doy un casto beso en los labios.

- Ya estoy aquí mi amor, ahora iré a ver a nuestro pequeño ‒digo suave, vuelvo a besarla y salgo para reunirme con el resto en los cuneros, siento mi corazón latir cuando lo veo dormido, estaba en calma.

- Enirov Bianchi, hermoso ‒abrazo a mi madre mientras asiento, comienzo a llorar de alivio y felicidad.

- Todo esta bien Amirov, ambos lo están ‒Jackson había palmeado mi hombro, asiento, me había dado cuenta de algo, debía intervenir.

 

Enith:

Había despertado y en cuanto lo hice, Thesion dejo entrar a todos, me abrazaron y felicitaron. Momentos después trajeron a mi pequeño, Thesion me dio unas cuantas recomendaciones, asentí sonriendo.

Amirov no se despegó ni un solo momento, lo que me hizo feliz, no quería estar sola en ningún momento.

Por la noche me dieron de alta, así que nos fuimos todos, estaba algo cansada y por suerte, Eni no lloró ni dio problemas en toda la noche, algo que agradecí, en ese sentido Rach había llorado más por las noches.

- Buenos días ‒bostezo, Amirov me había despertado con un suave beso, le sonrío con amor, mi sonrisa se vuelve grande al ver que me trajo el desayuno.

- Buenos días a la mamita más hermosa ‒suspiro de amor, me sentía tan feliz.

- Buenos días papito ‒rio bajito, lo acerco para besarlo de nuevo.

- Cara, necesitamos hacer una intervención con mi madre y Jackson, creo que deben estar juntos, pero para eso, necesito tu ayuda ‒asiento, con todo lo que había pasado, creí que era justo hacerlo.

Tras una semana, en la que supimos que Jackson y Thesion se habían ido de vacaciones; lo habíamos citado.

- Mamma, Jackson, estamos aquí porque hay algo importante que debemos tratar con ustedes, por ahora, sólo escucharan ‒ambos se miran con desconcierto pero asienten.

- Madre, los eventos recientes me han hecho ver algo importante, la vida es demasiado corta para guardar lutos perpetuos o respetar viejas amistades ‒mira serio a ambos‒. Sé que amaste a mi padre, y él a ti, pero ya no está, tú sí y también tu gran amor, todos lo sabes y sé con certeza que mi padre también lo supo ‒mamma quería llorar, pero sabía que no era porque se sintiera herida, más bien por lo mucho que lo amó pero que sabía, no había sido el amor de su vida‒. Y tú Jackson, te has quedado a su lado sin pedir nada, porque sé que la amas y harías todo por ella, y crees que debes guardarle respeto a mi padre, pero no es así, ambos hicieron lo que tuvieron que hacer en su momento, no le debes ni te debe nada, así que por todo lo bueno, hágannos el favor de casarse y ser felices por lo que les quede de vida ‒asiento de acuerdo, mamma comienza a llorar mientras es abrazada por Jackson.

- Tu hijo tiene razón, te he amado toda mi vida, Giulietta, ¿te casarías conmigo? ‒no puedo evitar llorar de la emoción, aplaudo cuando ella le dice que sí, me pongo de pie y los abrazo feliz, todo era perfecto ahora.




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