27: G e r m i n a r

“El germinar es el primer proceso para dar comienzo a una nueva vida, es muy cobarde e hipócrita de mi parte esto…pero solo es la verdad…De corazón deseo que puedas germinar y darle comienzo a tu nueva vida. Te amo, siempre fuiste a la nieta que más quise pero quizás no lo supe demostrar bien. Que tu corazón sea la guía en todo esto”—Tu abuelo Sebastián.

Camine sujetándome con fuerza del antebrazo de Charlie, las miradas ahora eran de curiosidad, ahora que nos encontrábamos a centímetros de los otros ya no había murmullos.  Subí las escaleras del pórtico, en la sala de estar el licenciado dijo que nosotras éramos las que decidían si Charlie y Roy nos acompañarían, nadie dijo ni una sola palabra, hable por mí diciendo que no tenía ningún problema porque ellos se quedaran, las demás estuvieron de acuerdo.

En ese momento no importaba que pensaran o que sintieran los demás, lo único que quería era tener a Charlie a mi lado para que esta situación se hiciera más llevadera.

Selene y Jackie se sentaron al lado derecho con su madre detrás de ellas, yo hice lo mismo del lado izquierdo de la habitación, mi madre poso su mano justo en mi hombro.

—Todo estará bien—me susurro para después sonreírme—Y veo que no estás sola, me da gusto ver que alguien te cuide.

Solo le sonríe, me tomo por sorpresa ver como las cosas han cambado en los 30 días que me quede en el pueblo, sentía el cariño y la preocupación real de mi madre, algo que no sentía desde hace mucho tiempo, Crisela se encontraba en silencio, Selene al igual que Jackie parecían impacientes, algo me decía que todas ya estábamos cansadas, queríamos que esto llegara a su fin. 

Hasta el aura de la habitación se sentía diferente, se sentía tranquila, se sentía en paz, cerré mis ojos deseando que esto concluyera bien para todos, a pesar de nuestras diferencias y problemas solo deseaba…que esto sea un buen cierre para todas. 

El licenciado se colocó en una mesa delante de nosotros, coloco su maletín a un lado de él, saco con unos papeles y se preparó a hablar.

—Supongo que esto es el final—soltó un gran suspiro—De todo corazón espero que esto sea el cierre que necesitan…eso hubiera querido Sebastián.

Acomodo unos sobres de cartas en la mesa.

—Antes que nada quiero que sepan que lo que dejo escrito Sebastián es su última voluntad y en pleno uso de sus facultades mentales dejo escrito lo siguiente…—hubo un pequeño silencio antes de que la lectura diera comienzo.

“Queridas Emma y Crisela nada en la tierra me hizo tan feliz como cuando su madre me dio la noticia de que sería padre, el mayor logro que he tenido es poder decir que son mis hijas, no se preocupen por mí, después de muchos años me podre reunir con el amor de mi vida…Su madre…gracias por darme una buena vida…gracias por todo mis pequeñas…”

Mire a mi madre de reojo, las lágrimas ya se hacían presente en sus pómulos, su tristeza era evidente, le tome la mano con fuerza lo cual la tomó por sorpresa.

—Todo irá bien—le susurre y mi voz llego su punto de quiebre.

Me sonrió mientras las lágrimas aun recorrían su rostro, se acercó y me dio un beso en la mejilla. Estuve tan concentrada en mí que olvide algo sumamente importante, a pesar de todo, mi madre perdió a su padre y eso es algo que por experiencia sé que es lo más doloroso del mundo, unas cuantas lagrimas se deslizaban por mis mejillas, Charlie se agacho para tomar mi mano mientras seguía la lectura.

“Y cuando pensé que lo tenía todo ustedes me dieron el mejor regalo que existe, me dieron la oportunidad de ser abuelo…dicen que la vida nos da la oportunidad de ser abuelos para corregir los erros que tuvimos como padres pero falle…les falle a las tres y eso me perseguirá por siempre, en esta vida y en la que siguiente o lo que sea que Dios me tenga preparado…”

Las lágrimas ahora eran muchísimas más, a tal grado que me nublaban la visión, podía escuchar los sollozos de Jackie del otro lado de la habitación, todas fuimos muy buenas en ocultar lo que sentíamos pero nunca puedes ocultar tu sufrimiento lo suficientemente profundo para que no salgan a flotes.

“Espero que algún día puedan perdonar a este viejo cobarde, que con sus ideas antiguas y sus estúpidos prejuicios solo logro fracturar a lo que más ame en este mundo, a mi familia…”

Hubo un silencio en la habitación.

“Jackie perdóname por no verme lo mucho que sufrías, lo mucho que te dolía no poder ser tú, perdóname por hacerte pasar noches con miedo, con esa inseguridad de saber si te seguiremos queriendo cuando se sepa la verdad…pero sabes no hay ninguna verdad que se tenga que descubrir, eres mi sangre y te amo, te amo desde el día que vi tu primera risa, te amo sin importar a quien sea la persona que decidas amar, sé que todos en casa te amaran y sé que Dios está feliz con la cálido que es tu corazón, a él no le importa nada más… querida Jackie me fui amándote…”

Sonreí porque me da paz infinita saber que al fin Jackie supiera que la ameros sin importar que, ya que de eso se trata la familia, del amor. Los sollozos de Jackie cesaron supongo que ya había llorado lo suficiente lo que le esperaba ahora era solo paz.

 “Selene… mi querida Selene… perdóname por no ver a tiempo la soledad que invadía tu corazón, perdóname por no ver que ese enojo que sientes era el resultado del carente amor que pensabas que sentíamos por ti, como no voy a amar a la persona que me hizo abuelo por primera vez…Eres importante para todos nosotros, no importa donde estés recuerda que siempre te acompañare, que siempre te cuidare, que siempre te guiare y lo más importante que siempre te amare…  ”