Capítulo XXX

Narra Ariana

Bajo a la cocina y saludo a Michelle.

—  iré al comedor —  le aviso.

— en unos minutos le llevaré el desayuno —  salgo de la cocina y voy al comedor. En un par de minutos Michelle aparece con el desayuno. — 

— gracias, se ve muy rico —  me sonríe —  ¿Harry ya se fue? — le pregunto.

— no, está en el jardín.

No digo nada y me concentro en mi comida.

— ¿qué haces?— pregunta Harry sentándose.

— comiendo —  digo con obviedad. 

— ok — el ambiente es muy tenso.

Michelle le sirve el desayuno a Harry. Comemos en silencio, sin dirigirnos la palabra o la mirada hasta que Harry rompe ese silencio tan incómodo.

— lo siento no debía tratarse así, a veces me porto como un idiota.

— ya no importa, yo no debí tampoco tratarte así —  no lo miro. A veces suelo ser muy orgullosa.

Me levanto y voy hacia la sala a coger mi maleta.

— ¿vas a venir conmigo? — pregunta estando en la puerta principal.

— me van a venir a ver —  miento.

— bueno nos vemos en el cole— se va.

La verdad nadie me venía a ver, solo que no quería ir con él.

— Michelle puedes llamar a un taxi.

— Claro — se va la cocina y rápidamente regresa —  en unos minutos viene — me avisa

Llega el taxi, le doy la dirección, y como no hay tráfico llegamos rápido.

— gracias —  le digo al señor taxista y entro al colegio.

Camino hacia mi casillero y me encuentro a  Jenny y Sophie.

— Ariana, ¿cómo te fue ayer? —pregunta Sophie.

— bien, pe...  — Jenny me interrumpe.

— Harry ¿te dejo de nuevo? 

—no.

— ¿entonces? — preguntan las dos.

— no quise venir con él.

—¿Por qué? —  pregunta de nuevo al unísono. 

— no quiero hablar sobre ello —  toca el timbre —   vamos a clase.

Nos dirigimos las tres al salón de química

*****

—te compramos un sándwich y tu pastel favorito — dice Jenny. Me siento en la mesa donde se encuentra.

— gracias — les sonrío — ¿han visto a Ryan?

— se quedó aun en el salón con una chica — me dice Sophie. Como un pedazo del pastel.

— alguien está celosa — me molesta Jenny.

— no lo estoy, solo es mi amigo — les grito y ellas me miran sorprendida — lo siento, no fue mi intención gritarles  — digo avergonzada.

— tranquila — me sonríe Jenny — mejor dinos como te fue ayer en tu no cita — dice Jenny.

—  super bien, conversamos sobre todo lo que hemos hecho y  luego fuimos a casa a ver películas.

— pensé que iban hacer algo más romántico — dice Sophie.

— les dije que fuimos plan de amigos.

— si tenias razón — Jenny alza sus manos en signo de derrota y yo sonrío.

— hola chicas — dice Nicolás sentándose. Harry y Jordán también lo hacen.

— ¿de qué hablaban? — pregunta Jordán.

— cosas de chicas —  Sophie. Muevo con el tenedor el pastel en el plato de un lado a otro.

— ¿puedo sentarme?— pregunta Ryan.

— Claro — le dice Jenny.

Ryan se sienta a mi lado y me alborota el cabello.

— hola Ryan — no lo miro.

Todas hablan y se ríen entre si, mientras que yo sigo moviendo el tenedor contra el pastel.

— ¿por qué no comes? — pregunta Harry. Todos voltean a verme haciéndome sentir incomoda.

— también has estado muy callada — dice Sophie.

— Harry ¿qué le hiciste a la pequeña minion? — dice Nick. Ahora todos lo miran.

— no me ha hecho nada, solo he despertado con el pies izquierdo — hago una mueca —  tengo que ir a ver un libro para la siguiente clase, los veo luego —  me levanto de la mesa y salgo corriendo de la cafetería.

Es obvio que no tengo que ir a ver nada, solo no quiero estar ahí y que me invadan de preguntas.

— espera — Harry toma mi brazo para que me detenga.

— suéltame — me quejo.

— no lo haré — me mira — ¿sigues molesta conmigo?

— si es lo único que te interesa saber—  también lo miro —  pues no estoy molesta contigo — el timbre suena para la siguiente clase — me sueltas, por favor. Debo ir a clases — veo como los alumnos corren a sus clases

— en serio lo siento.