Capítulo XXXIII [Parte 2]

Narra Ariana

El reloj en la pared marcan a las 9 pm eso significa que en cualquier momento llegarán los invitados.

Jordan y los chicos se van a su habitación. Nosotras nos vamos arreglar en una de las habitaciones de huéspedes.

Jenny nos entrega nuestro outfit.

Sophie se va a cambiar en otro baño, Jenny en el baño de la habitación y yo en la habitación.

Después de unos cinco minutos aparece Sophie.

— listo —  me sonríe —  ¿cómo me veo?

Lleva puesto un overol de Jean claro, por dentro una top negra, encima una camiseta de cuadros rojos con líneas blancas y negros, también tiene puestos unos converse color negro.

— hermosa — le digo y ella suelta una risita.

— tu también te ves hermosa — me dice.

Tengo puesto un short de mezclillas color celeste agua, una camisa blanca que al extremo del lado derecho tiene bordado unas letras rojas y en la parte debajo de la camisa tiene un nutrido, Decido ponerme en la cintura la camisa de cuadros negros y con líneas color café pastel. Por último los converse en botines color blanco.

— Jenny ya estamos lista — Sophie la llama y ella sale del baño.

Tiene puesto una falda que le llega a la cintura, una pupera con mangas color negra encima una camisa de cuadro color verde oscuro y con líneas negras. Por último unas vans verde oscuros. 

Todos los looks esta increíbles, pensándolo bien Jenny debería ser diseñadora o algo relacionado a la moda.

— ven te maquillare — dice Jenny y me hace sentar en la cama.

Veo a Sophie la cual se está alisando su cabello.

No se cuanto tiempo ha pasado pero parece una eternidad.

— quedaste increíble — dice Jenny.

Me miro en el espejo y el maquillaje que me ha hecho es muy natural. Me sorprendo al ver que me ha formado bien las ondas en la puntas de mi cabello. 

— gracias Jen — ella asiente y se comienza a maquillar — deberías ser diseñadora de moda.

— Ariana tiene razón — dice Sophie.

— lo pensaré — dice ella terminando su maquillaje.

— serias muy bueno en ello. Podrías tener tu agencia de moda — le halago.

— no se ve había ocurrido — me mira — es una buena idea — sonríe — pero eso lo pensar luego — asiento — ahora vamos a la fiesta — por fin a terminado de arreglarse.

— nos vemos asombrosas — dice Sophie.

Nuestros oufitfs son parecidos por las camisas de cuadros.

— vamos chicas muero por ver a Víctor — dice desesperada.

Bajamos a la sala, la cual está llena de adolescentes bailando, bebiendo y algunos conversando.

— ¿llego Víctor?  — Jenny le pregunta a su hermano.

— no aún no — dice Nick algo nervioso.

Al parecer los hermanos Rowe están tan nerviosos y angustiados de que lleguen Víctor y Kara.

— ¿nos quedaremos aquí? o ¿iremos a bailar? — pregunta Jordán.

— a divertirnos — decimos al unísono.

Entre risa y charloteo los 7 bailamos en grupo al ritmo de la música. Pero de un cerrar de ojo me doy cuenta que me encuentro sola bailando.

 

Narra Sophie.

Jordán me agarra del brazo y me pide que lo acompañe, supongo que nuestros amigos no se darán cuenta que no estamos, por lo entretenidos que se ven y así que voy sin rechistar.

Caminamos hacia el patio trasero, allí no se escucha tan fuerte la música y ademas no hay nadie porque Jordán no permitió que nadie ingresará.

— ¿qué hacemos aquí? 

— quería estar un rato a solas contigo— me da un corto eso en los labios.

—  yo también quería esto — nos sentamos en el césped.

— también te estarás preguntando porque quería que estemos solo — dice nervioso.

Lo sé porque no para de mover sus pies, después de todo el tiempo que paso con él he aprendido a conocerlo más que a mi misma.

— estás en lo cierto — le sonrió.

— bueno... Sophie, sabes que hemos estado saliendo y vaya que te quiero mucho. Lo que te quiero decir, aunque tal vez me he tardado en pedírtelo, ya que no estaba seguro y no quería sonar desesperado... — toma una profunda respiración y continua hablando — y como hemos tenido un millón de cita no tengo duda de ello. Sabes te quiero muchísimo, y tal vez este no sea el lugar ni el momento, pero ya no soportaba guardarme esto y quería decírtelo. ¿Quieres ser mi novia? —  me toma de las manos.

Lo quiero, y él me quiere a mí. Estaba comenzando a creer que solo era una más de su lista, porque me había acostado con él y me trataba indiferente pero después comenzamos a tener citas y de igual manera no estaba tan segura que él me quisiera para algo más. Había esperado este momento durante mucho tiempo.