Unconditional Love

Capítulo LI

Narra Ariana

Cinco semanas después

No soporto vivir aquí. Los golpes son cada vez más constante, siempre tiene una excusa para ello. Hasta es imposible dormir por el temor.

— baja a desayunar — me grita Raquel.

Abro la puerta y me encuentro con Issac.

— ¿cómo estas hermanita? — me acaricia el cabello.

— no me toques — aparto su mano de mi cabello — y no soy tu hermana.

— es aún mejor porque así pue... — me agarra de la cintura y comienza a besar mi cuello.

— aléjate — lo empujo pero me acorrala hacia la pared. De nuevo besa mi cuello y una de sus manos comienza a tocar mi muslo.

— ¿qué te sucede? — Raquel aleja a su hijo de mi — déjala en paz.

— no te metas.

— le diré a mi padre — mi respiración se encuentra acelerada.

— no te creerá — él se va.

— debo avisarle — sollozo y Raquel soba mi espalda.

— no, saldrás más perjudicada.

— per...

— mejor vamos a desayunar —bajamos las escaleras.

— ¿por qué demorarse mucho? — mi padre se encuentra sentado en la mesa.

— es que... — miro a Raquel y me hace una seña para que no diga nada — Raquel me estaba ayudando con mi ropa.

— siéntate a comer — me ordena y niego.

— estoy tarde. Nos vemos luego —salgo de la casa y camino hasta la parada de taxi.

— buenos días señorita.

— buenos días — me subo al taxi.

Le doy la dirección y en una hora hemos llegado

Decido no entrar al colegio, ya que quiero caminar sin algún rumbo para poder relajarme.

— estoy harta de vivir en esa casa —susurró para mí.

Doblo en la esquina y choco con alguien. Caigo sentada en el suelo.

Miro al chico que está a unos metros más allá. Me levanto y me acerco a él

— ¿te encuentras bien?— le existiendo mi mano para ayudarle a levantarse y  la acepta — lo siento venía muy distraída.

— también venía distraído — se agacha a coger su patineta.

Nos ponemos a la orilla de la carretera.

— bueno... tengo algo de prisa —miento y comienzo a caminar.

— espera — me agarra del brazo —¿Adónde vas? — camina junto a mi.

— no se pero aún lugar tranquilo.

— te acompañaré — me mira y asiento — sabes, te me haces conocida— lo miro confundida — creo que eres la chica que me dijo "tienes una sonrisa bonita" — mis ojos de agrandan. Lo miro y si es el chico que conocí en la fiesta de la casa de Jordán. — pensé que no te volvería a ver — extiende su mano — me llamo Alex — la estrecho.

— yo Ariana.

—lindo nombre — le sonrío —¿quieres ir a un parque que conozco?— asiento.

Caminamos por unos largos minutos.

— esto no parece un parque — miro encantada al lugar — parece un bosque de cuento de hadas.

— pensé lo mismo cuando lo vi por primera vez — corre jalándome del brazo.

Para de correr y nos sentamos cerca de un árbol lleno de flores color rosa.

— Ariana ¿qué hacías por allí?

— púes.. quería salir un poco de mi rutina y decidí salir a caminar.

— ¿no entraste al colegio? — pregunta.

— no tenia ánimos ¿tú que hacías?

— tampoco entre a clases, es que son aburridas y prefiero hacer lo que más me gusta.

— ¿qué te gusta hacer?

—andar en patinete y tomar fotos.

— wuo...interesante.

—si traigo mi cámara a todo lados, es como mi mejor amiga —me sonríe —¿me dejarías tomarte algunas fotos? — miro sus profundos ojos negros.

— no lo se, estoy toda espantosa.

— claro que no, eres muy linda con lo que cargues puesto. ¿nunca te han hecho secciones de fotos?

— si pero...

— se te hará más sencillo.

— esta bien — siento un flash — aun no estaba preparada — me quejo.

— saliste muy bien.

— le estas bien — él niega.

— no importa como estés o en que lugar, lo que importa es el verdad significado de la foto y muy poco lo logran descifrar.

— nunca había conocido una persona muy profundo — suelta una risita y comienza a poner flores sobre mi cabeza.

— párate allí — me ordena y le hago caso. De nuevo siento otro flash —ahora súbete al árbol.

— ¿quieres qué me mate?




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