Tres días pasaron desde que salieron del hospital y Derek se encontraba junto a Sofía frente a la señora Florencia, que los miraba feliz de verlos juntos.
—Entonces él era el muchacho que te descontrolaba hija —dijo la señora Florencia. Sofía se sonrojo.
—Señora Florencia yo… —dijo Derek deteniéndose cuando ella levanto la mano.
—Todo está bien Derek. Nunca te culpe por lo de ese día. Yo te agradezco, por quedarte junto a Margarita todo este tiempo —ambos la miraron confundidos —y por salvar a Sofía.
—¿Cómo sabe qué? —pregunto Derek.
La señora Florencia sonrió —soñé con ella, me conto de la promesa que hicieron. Todo este tiempo, aunque no pude verla siempre estuvo conmigo y la sentí más fuerte ese día del accidente. Sentí su calor y la calidez de los besos que solía darme cuando se marchaba al colegio. Cierto me dio un mensaje para ti Derek.
—¿Un mensaje?
—Margarita tenía razón. lo olvidaste. Margarita dijo que deben cruzar juntos.
—¿cruzar juntos? —pregunto Sofía.
Derek sonrió. Sabia a lo que se refería Margarita —entiendo. Ven Sofía —la tomo de la mano condujo el jeep de Sofía hasta llegar al parque, caminaron al puente en el mismo extremo de ese día.
Sofía entendió a lo que se refería su madre con cruzar juntos. Ella sujeto la mano de Derek —estas seguro de esto.
—Ya es hora. Durante diez años retuve a Margarita, pero ahora ella es libre. Y es lo que quiero contigo Sofía. Ser libre, no quiero sentirme prisionero nunca más.
Sofía presiono la mano de Derek —entonces vamos.
Empezaron a caminar al puente Derek coloco su pie después de mucho tiempo sobre ese puente guiado de la mano de Sofía camino con tranquilada al puente llegando centro donde cayó ese rayo, con su corazón latiendo con fuerza, los recuerdos de ese día llegaron como ese rayo de la nada produciendo un gran estruendo, que lo trasporto a ese día. El piso de concreto destruyéndose bajo sus pies, el grito de Margarita, sus llamados pidiendo ayuda. Se detuvo un momento y presiono con algo de fuerza la mano de Sofía que sintió la tensión y fuerza en el agarre de Derek. Al regresar a verlo lo miro con el rostro lleno de tristeza.
—Estoy aquí —dijo Sofía sujetando la mano de Derek entre sus dos manos —confía en mí.
Al sentir la mano de Sofía se tranquilizó su respiración se normalizo —gracias Sofía —respondió y dio otro paso pasando la mitad del puente hasta que pudo pasar al otro extremo sintiéndose liberado.
Había estado del otro lado del río de muchas formas cruzando el puente de madera frente al colegio, el otro puente para vehículos y cruzar por los dos postes caídos no sintió lo que sentía en este momento, al cruzar el puente de su prisión.
—Felicidades Derek —escucharon una voz femenina que no pudo reconocer.
Volvieron a ver al puente y en el medio se encontraba una joven de cabellera castaña ondulada brillante, ojos esmeraldas. Lleva puesto un top negro y con una cazadora de cuero y vaqueros y zapatos de tacón grueso y un sombrero. Era hermosa.
—Margarita —dijo Sofía sorprendiendo a Derek. No podía creer que esa chica de ahí fuera esa pequeña niña entrometida. —Cuánto gusto me da volver a verte —la abrazo.
—Me alegra que estés bien Sofí y que estés junto a Derek —Derek se acercó —hola —saludo con una sonrisa.
—¡Vaya! Mírate. Finalmente te has convertido en toda una mujer —dijo Derek sonriendo con algo de burla.
Margarita lo noto —si lo soy. Te dije que tenía dieciocho años.
—Pasaste al siguiente nivel para salvarnos ¿verdad? Gracias Margarita.
—Un momento —intervino Sofía —si pasaste al siguiente nivel. ¿Cómo estás aquí?
—Desconozco muchas cosas. Supongo que… solo puede ser un milagro.
—¡Un milagro! —dijo Derek con una sonrisa.
dijo Derek con una sonrisa.
—¿Y? ¿Cuáles son sus planes ahora? —pregunto Margarita.
—Pues Margarita tiene un contrato que terminar en el colegio. Así que me quedare ese tiempo ahí y luego iré a donde debo estar.
—Vas aceptar ese puesto de trabajo como rescatista —dijo Margarita.
Derek asintió —es bueno escucharlo. Por cierto. Me pueden prometer algo.
—¿Qué es? —pregunto Sofía.
—Si tienen una hija. Le pondrán mi nombre.
—Claro. Además, creo que ya está en camino —dijo Derek con picardía mirando a Sofía.
—Entonces me prometen que le pondrán mi nombre —dijo Margarita.
—Lo prometemos —dijeron Derek y Sofía juntos.
Compartieron el ultimo abrazo con Margarita antes de que ella desaparezca de ese mundo para volver al suyo —Se fue —dijo Sofía con alegría y tristeza.
—Si —dijo Derek y la sujeto de la mano y la jalo pasando el puente sin detenerse.
—¡Oye! ¿Qué haces?
—Le hicimos una promesa. Hay que cumplir —dijo sonriendo pícaramente con esos hoyuelos en sus mejillas.
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Editado: 30.01.2024