El sueño era muy reconciliador, después de haber ido a la escuela para una simple fiesta. Era comprensible que un joven tan atolondrado se sintiera cómodo y con el cuerpo tumbado sin dada más que hacer, solo sonar.
Luke se levantó casi sin aire sabía que el cuerpo seria capas de vencerlo en cualquier instante. Pero no le importo, se fue directo al baño, pero sin más pensarlo puedo notar que ya había amanecido, salto de golpe sin más pensarlo, pues ese mismo día le tocaba un examen importante.
Ante la distancia del colegio con la de él, no había muchas posibilidades que llegara a tiempo. Agarro sus cosas y decidió bajar lo más rápido posible. Era extraño como no tomaba en cuenta el problemón que había armado ayer. Bajo sin pensar en tener la oportunidad de desayunar. Pero antes de poder llegar a la puerta una vos lo detuvo.
Madre lo lamento te juro que no volverá a pasar—bajo la mirada ante la espera de una seria reprimenda.
Pero ante la posibilidad de algo tan malo para su madre, ella se retiró sin más nada que decir. Luke acelero el paso pues ya era el único año en el colegio. Solo era un año Y a pesar de que las clases habían empezado hace dos días atrás. Se tomó se tomó la molestia de pensar en la reprimenda que pudo haber tenido.
Llego al colegio con la mirada al suelo, pues los pensamiento de cómo sería el examen pasaban por su mente.
Dítelo a ti, llegamos al mismo tiempo. —a bueno si pero es la primera vez que yo llego tarde.
Ahora las palabras se habían convertido en una molestia para Luke. Llego al aula saludando con algo de ansias de poder terminar el examen de una vez. Un hombre alto, con una camisa purpura y con lentes Saludo.
La gente lo miraba como si fuera una maldición para ellos, la única de las carpetas que estaba vacía era en la que estaba sentada teresa.
Hola luke—estaba con una sonrisa en su rostro.
Ho… hola teresa—los nervios estaba a punto de invadir a luke.