Ahí está ella nuevamente, su ondulado cabello castaño cayendo a los lados de su cara, una mirada que delata timidez. Es realmente hermosa. Si tan solo pudiera reunir el valor de cruzar el vagón y preguntar su nombre, pero el valor que tengo solo me permite llegar hasta donde está ella y sentarme frente a su sitio, como todos los días de lunes a viernes. Y si pudiera, el resto de mis días.Ahí está ella nuevamente, su ondulado cabello castaño cayendo a los lados de su cara, una mirada que delata timidez. Es realmente hermosa. Si tan solo pudiera reunir el valor de cruzar el vagón y preguntar su nombre, pero el valor que tengo solo me permite llegar hasta donde está ella y sentarme frente a su sitio, como todos los días de lunes a viernes. Y si pudiera, el resto de mis días.