LA ELECCIÓN (CAPÍTULO 10)
Ra se quedando mirando a Damien por unos segundos, había conseguido superar la prueba para convertirse en un hijo de Ra, superando la muerte ya que no todos podían beber la "sangre de demonio" y vivir.
El joven Ethan había sido una de las victimas al introducirle esa pócima diabólica a la fuerza y no superar el dolor físico y mental que provocaba. Damien en cambio había conseguido sobreponerse y volverse más fuerte.
El omnipotente Ra elegía cuidadosamente a los que quería convertir y aun siendo un humano había conseguido superar la gran prueba. Aunque las ansias de poder de Damien no tenían límites y tendría que vigilarlo, era una gran pieza en su nuevo ejército: "Los hijos de Ra".
-¡Bienvenido hijo mio!
- ¡Oh gracias padre!- contestó el enemigo acérrimo de Leo
- Toma una de las habitaciones del piso de arriba. ¡Instálate!
-¡Con mucho gusto!
El maestro de Leo subió las escaleras mientras miraba a Keith riéndose. El creador de la fórmula del super soldado comenzó hablar con Ra cuando vio que su ex compañero había cerrado la puerta de su habitación.
-¡Mi señor siento no estar de acuerdo con esto..!- exclamó Keith
- No te preocupes, no es rival para mí y si intentará algo moriría.
- ¡Yo sé cómo es!. ¡Es un víbora meterlo aquí es un suicidio!. ¡Lo mejor sería acabar con él antes que las cosas se compliquen!.
- ¡Ha superado la prueba, igual que tú!. Vosotros dos sois los únicos humanos que no son brujos que lo habéis conseguido. Sé el odio que le tienes por cómo te trataba pero se ha ganado el privilegio.
- Pero señor...
-¡Basta no hay más que hablar!- cortó la conversación.
-¡De acuerdo!- se quedó callado.
El hombre imponente volvió a sentarse en su trono, cerró los ojos y comenzó a concentrarse, un aura oscura empezó a salir de él.
Al mismo tiempo Gabriel corría a gran velocidad, estaba decidido a terminar con el mal él solo, sin ayuda de Leo. Consideraba que se había hecho mucho más fuerte que el Vampire Killer además se había convertido en algo personal después de que ese ser había acabado con Samantha la bruja con aspecto de niña que le ayudó.
Por eso cuando vio que un pequeño pueblo estaba siendo atacado por vampiros y por seres iguales a Zack , comenzó a luchar con ellos y vencerlos fácilmente, cogió a varios de ellos y empezó a preguntarles donde encontrar a su amo, pero ninguno habló por lo que el joven español se vio obligado a acabar con ellos.
Excepto uno de ellos que decidió suicidarse ya que Gabriel estaba utilizando su poder vampírico para controlarlo y decirle donde estaba escondido el organizador de todo lo que había ocurrido.
Había salvado el pueblo pero no estaba contento ya que no había averiguado donde se encontraba su enemigo, así que cuando salió de allí golpeó una piedra que destrozó por la frustración.
-¿Me buscabas?- sonó una voz grave detrás de él
- ¿Tú eres ese Ra?- preguntó el vampiro
- Así es. ¡Y tú eres Gabriel Luna!- afirmó el hombre
- ¿Cómo me has localizado?.
- Uno de mis hijos me habló sobre ti, un vampiro capaz de derrotar a un demonio. Realmente eres alguien interesante Gabriel.
- ¡Y ahora te derrotaré a ti!- exclamó el español
- ¿De verdad quieres enfrentarte a mí?. ¿Y sí te dijera que puedo traer de vuelta a tu amada Elena?.
- ¿De qué hablas?- dijo sorprendido.
- No soy demasiado amante de los vampiros, para mí son un error pero hay que reconocer que tú eres alguien especial. ¡Y yo solo elijo a gente especial!. Por eso no me importa que seas un vampiro. ¡Únete a mí!
- ¿Cómo sabes lo de Elena?.
- Como te decía uno de mis hombres me habló de ti, así yo que tengo la capacidad de hablar con la gente fallecida investigué y hablé con el asesino que acabó con Elena.
- ¿Johan?.
-¡Así es!. Y luego también me enteré sobre la muerte de tú padre y tu familia gracias a tu antigua creadora.
-¡Maldito!
-¡Yo puedo volverlos a la vida!. ¡Si me ayudas todo lo que te fue arrebatado te lo puedo devolver!
Gabriel se quedó con la mirada perdida y pensó en volver a tener a su familia otra vez de vuelta y estrechar sus brazos en el cuerpo de Elena. Casi la podía ver con su sonrisa cristalina la tentación era muy grande. De los ojos del joven comenzaron a caer lágrimas.