Vampire Killer: El Duelo final

El refugio (Capítulo 55)

 

EL REFUGIO (CAPÍTULO 55)

 

El rey y Damien seguían hablando, pero los dos estaban muy perjudicados, su hermano Armand había quedado fuera de combate de tanto beber, por lo que pidió a Allen el jefe de la guardia real que lo llevara a su habitación.

Y así hizo el hombre de pelo rojizo y ojos verdes, lo cogió con sus fuertes brazos, y se lo llevo de allí. Incluso el ex agente de la CIA se quedó observando el imponente cuerpo que tenía el líder del destacamento, era alto y de complexión fuerte, lucía una barba del mismo color del cabello y llevaba al hermano del rey como si fuera un saco de patatas.

El monarca contó la historia de Allen el más fuerte de sus hombres, el más leal y también el que creía que debía ser el nuevo rey después de él. El propio Leland  se lo había comunicado que si algo le pasara, sería su heredero.

Damien  al tener una mente tan oscura y negra empezó a pensar en las posibilidades de esas palabras, todo lo que había sucedido y su imaginación le hizo pensar en que quizás lo de la maldición en el reino había sido ideada por el mismo Allen ya que si le pasara algo se convertiría en el nuevo monarca.

Así que el demonio decidió decirle a su majestad que estaba cansado y necesitaba descansar, se hizo el ebrio mucho más de lo que de verdad estaba y se despidió. Inmediatamente subió las escaleras de ese majestuoso castillo, cuando vio que nadie le miraba fue a ver si encontraba a Allen.

Y en efecto se lo encontró de cara, volvió hacerse el perjudicado mientras le acompañaba a su habitación lanzó un hechizo de localización sobre el líder de la guardia real sin que se diera cuenta. Así lo tendría localizado ya que creía que todo lo que había pasado en el reino y en la próxima guerra no era fortuito. Él consideraba que estaba planeado y que todas las fichas se habían movido para que Allen fuera el heredero y si era tal como pensaba él intentaría sacar tajada.

Se tumbó en la cama y vio que el hombre se había encerrado en su habitación y estaba descansando también.

 

Al mismo tiempo Leo y Kano estaban entrenándose en una cuadrilátero que era el lugar de entrenamiento que el rey de los Voldemi les había dejado. Gabriel al ver que el Vampire killer estaba siendo muy blando con el niño se metió en el entrenamiento.

-¡Solo quedan horas para que comiencen los juegos!. Y no te ha hecho ningún ataque en condiciones. ¿De verdad piensas que este pequeñajo tiene alguna posibilidad de hacer un buen papel en la competición?- dijo muy enfadado el español

-¡Lo creo sí!. ¡Puedo notar dentro de él un poder grande muy escondido!. Yo necesité tiempo para habituarme- explicó el ex agente de la CIA

-¡No tenemos tiempo!. ¡Tienes que ser más duro con él!- exclamó el mayor de los Luna

El niño al escuchar esas palabras del vampiro, miró al suelo estaba triste, Leo puso la mano sobre la cabeza del niño.

-¡Kano solo tienes que confiar en ti!. ¡Aunque haya gente no crea en tus posibilidades, tu eres capaz de mostrarles lo equivocados que están!. ¡Muéstraselo a Gabriel!.

-¡Lo haré maestro!- sus ojos se iluminaron al escuchar a Leo

-¡No me hagas reír!. Enserio pretendes que me enfrente a él. Si lo hago yo no seré tan permisivo como tú.- contestó arrogantemente el joven.

El Vampire Killer empujó levemente al niño, que intentaba armarse de valor, ya que había visto lo terrible que era el vampiro. Pero finalmente se plantó delante de él. Mientras Gabriel tenía una sonrisa maléfica, apretaba sus puños y sus huesos crujían.

-¡Niño prepárate porque no voy a tener ningún miramiento contigo!. Así que si tienes algún poder escondido será mejor que lo muestres- vociferó el no muerto mientras sus garras crecían y sus ojos se volvían del color del infierno.

 

En el otro mundo Susana, Tetsuo, Lucas, la falsa Rachel, el padre y el hijo seguían su camino esta vez por un pantano, había mucho barro. Sin saberlo estaban siendo observados por Ra que no les quitaba ojo.

Susana no paraba de pensar en su amiga Jessica y Laura, además parecía que la elegida de ese mundo estaba más interesada en saber dónde se encontraba ese lugar que habían sobrevivientes, que preocuparse realmente por si sus compañeras se encontraban bien.

Su manera de ser le llamaba mucho la impresión a la vampiresa, quizás se estaba volviendo loca pero notaba algo muy extraño en esa supuesta elegida. Finalmente salieron del pantano y vieron que había un pequeño pueblo y alrededor estaba todo intacto incluso brillaba el sol cuando desde que se encontraban allí todo era nubes y un ambiente malsano.

Allí habían varias roulottes entonces unos niños que jugaban allí se acercaron felices al ver que era gente normal y llamaron a sus padres que salieron inmediatamente y luego todos los que habitaban ese pequeño poblado de no más de 50 personas.

-¿Así que aquí estaban los sobrevivientes?- exclamó la falsa Rachel mientras disimuladamente intentaba hacer un hechizo con sus manos mientras el hombre y su hijo les hablaba de las chicas que había conocido. Pero antes que pudiera lanzar magia oscura, Susana notó con su sentido vampírico algo extraño así que movió rápidamente su brazo y golpeó a la falsa  elegida ante la sorpresa de todos y la impulsó dentro del pantano.

-¡Cuidado proteger a los sobrevivientes!. ¡Te has olvidado de yo no soy humana y mis sentidos son mucho mayores que una persona normal!.- gritó la vampiresa

En ese instante aparecieron zombis saliendo de allí, y el aspecto de  Rachel cambió, sus ojos se volvieron azules, su ropa se volvió oscura y las zapatillas que llevaba se convirtieron en una especie de botas.

-¡Matadlos a todos! – gritó la bruja oscura

- ¡Así que este es tu verdadero aspecto!- comentó la pequeña los Luna

Los seres decrépitos corrieron donde estaban Tetsuo y Lucas protegiendo a la gente. El japonés se sentía extraño sin una espada pero lanzó varias bolas de energía que impactaron contra los muertos que fueron despedazados por la explosión aunque aún seguían con vida.




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