Oscuro (Capítulo 72)

OSCURO (CAPÍTULO 72)

Damien entró en el portal sosteniendo a Leo, que todavía estaba inconsciente. A los pocos segundos aparecieron cerca de lo que parecía un bosque, con un pequeño lago detrás. Era de noche y las estrellas y la luna iluminaban el lugar. Damien dejó caer a Vampire Killer al suelo. En ese momento, escuchó a alguien que lo llamaba desde el lago, y se vio a sí mismo en el agua hablando con él.

-¿A qué esperas? ¡Mátalo! Todavía tienes el trozo de madera, clávaselo en el corazón. - decía la cara que era del lago.

Pero Damien no respondió.

-¡Has estado esperando tanto tiempo este momento! ¿No te acuerdas de todo lo que has tenido que pasar? Si no fuera por mí, habrías muerto en aquella cárcel. Yo fui el que resistió cuando ese vampiro asqueroso te tumbó y te mandó las rocas. Gracias a mí, conseguiste sobrevivir y convertirte en un demonio. Acaba con él, ¿a qué esperas? - dijo la cara del lago.

En ese momento, la expresión de Damien cambió. Se acercó a Leo, sacó la estaca y se preparó para acabar con él.

Pero en ese instante, un búho comenzó a ulular. El ex maestro del americano volvió en sí y notó algo extraño. Fue entonces cuando aparecieron un chico y una chica vestidos con trajes grises, casi como uniformes militares futuristas. Los trajes consistían en pantalones y camisetas monocromáticas grises con pequeñas manchas rojizas y botas negras.

La chica parecía humana pero no tenía pelo y sus ojos eran rojos. Era delgada, de piel blanca y no parecía muy fuerte. El chico tenía el pelo corto en los lados pero más largo en la parte superior de la cabeza. Parecía más alto y musculoso que la mujer, y también tenía la piel blanca.

-¿Quién es usted? - preguntó Damien.

-¿Y vosotros? - respondió el demonio.

En ese momento, se fijaron en Leo y se lanzaron contra el Vampire Killer que seguía inconsciente. Damien se puso delante y golpeó al chico, mientras la mujer lo observaba.

-¡El único que va a acabar con él soy yo, me oís! - gritó el demonio. En ese momento, la mujer se movió con gran velocidad, golpeando a Damien en el estómago y tirándolo al suelo.

Al mismo tiempo, en otro lugar, se abrió un portal y de él aparecieron Ciffer, Rose y los hermanos de Danko. Se encontraban en el mismo lugar donde minutos antes habían estado Damien y el Vampire Killer, antes de meterse en el portal.

-Parece que ha habido una lucha hace poco – dijo Levon.

-Ya no están aquí, se han ido a otro sitio y los objetos tampoco. Pero noto una gran fuerza en ese castillo de ahí detrás – comentó Ciffer mientras señalaba.

-¡No tenemos tiempo para esto! ¡Hay que encontrar los objetos mágicos! ¡Vámonos! – ordenó el hermano mayor del líder de los Nosferatu. Poco después, desaparecieron.

Danko se había quedado dormido en la silla de los mandos de control. En sus sueños, nuevamente era pequeño y veía morir una vez más a quien consideraba su padre. Era una pesadilla que se repetía constantemente. Pero siempre Ahal se levantaba antes de fallecer y le decía que él era el único que podía detener la maldad. Su madre también aparecía y le decía que lo quería, que sabía que él era especial desde que salió de ella.

Momentos después, su complexión cambiaba y se volvía mayor, con una imponente presencia. Les decía que no permitiría que nadie sufriera, y que encontraría esos objetos mágicos que buscaba su padrastro. Y que haría lo que fuera necesario para que no apareciera alguien como su padrastro. Los dos le alentaban a que los consiguiera.

Damien se levantó del golpe y se dio cuenta de que eran vampiros, pero no eran como los de su mundo. Parecían mucho más fuertes y se movían de una manera robótica como si fueran controlados por algo. En ese instante, el chico aprovechó para lanzarse contra Leo y sacó un trozo de madera con punta para acabar con el Vampire Killer. Damien estaba demasiado ocupado luchando contra la chica.

Y cuando estaban por clavársela en el corazón, alguien golpeó al chico. Para sorpresa de Damien, era Susana, la hermana pequeña de Gabriel, la que había golpeado al vampiro. Allí también se encontraba Lucas.

CONTINUARÁ