¿La Mano que mueve los hilos? (Capítulo 74)

¿LA MANO QUE MUEVE LOS HILOS? (CAPÍTULO 74)

Leo miraba a la joven mientras andaban, y sus ojos no reflejaban su edad y tampoco su esencia era mucha más antigua.

-Me presentaré, soy Anya, soy la que conecta a todas las llaves de todos los mundos. Se me conoce como “La llave de llaves”. Y también soy la primera “Vampire Killer” de todos los universos. – relató

Leo se quedó sorprendido al escuchar esas palabras y quiso preguntarle, pero la chica prosiguió con su historia, antes que él pudiera decir nada.

-Hace mucho, mucho tiempo un mal como nunca se ha visto, llamado Necromante asoló nuestro mundo, su poder era tal que acabó con todo aquel a quien se enfrentaba. Y su ansia de alimentarse no tenía límite- explicó

- ¿Qué era una especie de demonio?- preguntó el ex agente de la CIA.

- ¡No!. Era un vampiro, pero no uno ordinario, como he dicho, su ansia de alimentarse era increíble, pero él no lo hacía de sangre como los otros no muertos que conoces. Él se alimentaba de la energía vital y para él no era suficiente nutrirse de algunas personas, necesitaba gran cantidad de gente.

Sus planes fueron a más cuando con su poder, consiguió abrir portales a otros mundos y sus hombres y él pensaban ir a otros universos a seguir alimentándose. Por eso “Los ancestros”, unos seres muy poderosos y antiguos, decidieron sacrificarse y concentrar su poder en alguien para poder hacerle frente, el elegido era mi hermano Dailon.

Pero ese maldito monstruo se enteró y mató a mi hermano antes que pudieran hacerlo, los brujos  que quedaban en pie decidieron hacerle frente, y los “Ancestros” que aún no habían muerto siguieron con su plan.

Mientras los otros le entretenían dando su vida, para que el hechizo se pudiera completar, la elegida, esta vez fui yo, convirtiéndome en la primera “Vampire Killer”. Luché con todo mi poder, pero no podía ganarlo, por eso con toda la sabiduría que me habían otorgado los “Ancestros” y poder hice un hechizo para atraparlo y encarcelarlo, y pude quitarle su capacidad de abrir portales a otros mundos, pero era tan sumamente fuerte que se podía escapar, por lo que no me quedó otra que vincularlo a mí. Por lo que me encerré con él en este antiguo templo, si yo salía de aquí, él podría volver.

Realmente lo hice para tomar el tiempo, para poder entrenarme y ser lo sumamente poderosa para vencerle, pero lamentablemente, aún no lo he podido conseguir. Algunos de sus hombres consiguieron llegar a otros mundos mientras él y yo luchábamos.

Por lo que me vi en la obligación de hacer algo, lamentablemente no podía salir del templo, pero sí podía crear portales a otros mundos. Por lo que mandé una parte de mi poder a seres que consideraba nobles y que podían ayudar en la lucha contra esos seres.

Esos seres se convirtieron en “Las llaves, ellas enseñaron a otros su poder, originando así lo que serían los brujos y brujas. Y también creando un elegido en cada mundo para evitar que el mal se apoderara de cada universo.

Después de eso, decidí dejar que cada mundo se hiciera cargo. Y decidí seguir entrenando sin hacer caso a lo que pasaba, ya que mi objetivo era acabar de una vez por todas con Necromancer. Por lo que cree una dimensión donde poder entrenarme en algún lugar del espacio-tiempo. Cuando volví del entrenamiento aún no era lo suficientemente fuerte para hacerlo. Y vi lo que pasaba en mi mundo, los humanos se habían descarrilado y los vampiros habían aumentado. Me di cuenta, que en los otros lugares estaban ocurriendo cosas y pude ver lo que pasó en el tuyo. De alguna manera ese ser había guardado algo de su esencia en unos objetos que se habían llevado sus hombres mientras luchábamos la última vez.

Por lo que decidí ayudar, actuar. Temo que todo lo que ha sucedido hasta ahora ha sido planeado por él. – terminó de hablar.

-¿En mi mundo también?. – cuestionó Leo.

- El tuyo es el que pienso que fue más afectado. Tengo la certeza que Ra fue manipulado de alguna manera, y él originó todo.- comentó la chica.

Ella le dijo que le acompañara, él la siguió, estaban en un lugar luminoso y poco a poco se fue oscureciendo, entonces notó un aura impresionantemente oscura y poderosa, mayor a todas las que había visto, provenía de debajo de él.

-Lo has sentido, ¿verdad?- preguntó la chica.

-¡Ese poder es increíble, noto una oscuridad como nunca había sentido!. Pero es muy parecida a esa aura que desprendía Ra, incluso el tipo al que me enfrenté hace poco. Pero mil veces mayor.- exclamó el ex agente de la CIA.

- Ahora que eres vampiro lo puedes notar mucho más, ya que tus sentidos se han agudizado mucho- le explicó Anya.

- ¡Solo recuerdo que estaba en el suelo, y que el veneno estaba acabando con mi vida!- comentó Leo.

- Gabriel te mordió, y te convirtió

En ese instante cuando Leo estaba por preguntar donde se encontraba el español, sintió un gran dolor que venía de Jessica, y salió corriendo a gran velocidad, la cogió de la cabeza notaba como sufría y el aura oscura se hacía más grande.

“La llave de llaves” se quedó mirándolo, mientras le decía que tenían poco tiempo, ya que estaba comenzando a llegar a su límite. Le explicó para poder salvarla tenía que crear un hechizo para conectarlos a los dos. Y por el hecho de que ahora al convertirse en un vampiro tenía algo de oscuridad dentro de él podía hacerlo, pero que tuviera mucho cuidado, ya que si en menos de 2 horas no volvía quedarían atrapados los dos para siempre.

Sin dudarlo, Leo le ordenó que lo hiciera.

CONTINUARÁ